ÁVILA. Ruta Castrejon Peña Halcón desde El Hoyo de Pinares

Comenzamos la ruta en el Pilón del matadero en donde tenemos el panel informativo sobre la ruta que queremos seguir, porque desde ese punto también sale la ruta de la Necrópolis. También se puede dejar el coche un poquito más abajo donde está situada la bodega cooperativa. La ruta está muy bien señalizada.

Nosotros desde el Pilón del matadero salimos a la carretera de Robledo de Chávela, y siguiendo su margen derecho por una vereda pequeña al cabo de un kilómetro nos desviamos a nuestra derecha, donde una señal nos indica Ruta Castrejón Peña Halcón y Pino Ratón.

A los pocos metros la vereda desciende y cruzamos el arroyo de Majalasvacas por una pequeña pasarela de madera. Desde aquí subimos una pequeña cuesta y girando a nuestra izquierda sobre el kilómetro 2,2 con el prado de Castrejón, donde se encuentra el Pino Castrejón

El Pino Castrejón, catalogado por la Junta de Castilla y León en el año 2005 y protegido por la legislación autonómica perteneciente a la Orden MAM/1156/2006, del 6 de junio de 2006, por la cual se regula el «Catálogo de especímenes singulares de especial relevancia de Castilla y León», en el cual se incluye.

El Pino Castrejón, pertenece a la especie Pinos pinea (Pino piñonero) y tiene un porte inconfundible cuya silueta es apreciable en la distancia, al situarse en un prado donde no hay vegetación arbórea dominante.

Tiene una altura que supera los 16 metros, y una amplitud máxima de copa de 25 metros, debido a las extensas ramas horizontales que parten de su cruz.

Su perímetro normal, medida de la circunferencia a la altura del pecho, es de 4,78 m, siendo uno de los pinos piñoneros más gruesos de la Comunidad de Castilla y León, y el de mayor grosor de la provincia de Ávila.

El tronco, empieza a dividirse a partir de los dos metros aproximadamente, en varias ramas principales. Dos de ellas, que son las estructurales, ascienden verticalmente. Posee una grandísima copa aparasolada, típica de la especie en los ejemplares maduros. El resto del ramaje, se abre horizontal, casi paralelo al suelo.

Se encuentra en plena plenitud de su vida, con más de 250 años de edad y otros tantos de abundante producción. Se cuenta que este pino ha llegado a producir hasta 2000 piñas, globosas e inconfundibles, en una única temporada.

Ha estado presente como hito de referencia para los lugareños que trillaban los prados donde se ubica, y aguantaban el implacable sol que caía en los meses de verano a la sombra de su extensa copa.

Continuamos el camino atravesando el prado y teniendo la carretera a nuestra izquierda para en el kilómetro 2,6 volver a llegar a la carretera, seguimos unos 200 metros giramos a la derecha y cogemos un camino por el cual ascendemos. Nos encontramos una valla y una puerta metálica la cual pasamos `por un lateral que tiene la valla.

Sobre el kilómetro 3.2 llegamos al alto de Valquejigoso. Desde aquí tenemos a nuestra izquierda unas bonitas vistas del valle de pinos y de la Peña Halcón.

Continuamos por un sendero estrecho y rodeados de pinos a derecha e izquierda para empezar un descenso hacía el Río Sotillo (o Palizas). En el descenso nos encontramos con piedras y surcos en la tierra por las lluvias de los días anteriores. Las vistas siguen siendo muy bonitas con el Risco Halcón a nuestro frente.

En el Kilómetro 5 llegamos al Río Sotillo lo atravesamos por un puente de madera y empezamos a ascender, atravesamos una vaya metálica con unas casetas a nuestra izquierda, seguimos subiendo hasta llegar a una pista forestal la cual atravesamos y seguimos subiendo por un sendero que se encuentra entre los pinos.

En el kilómetro 6,5 nos encontramos otra caseta con un muro de piedras y un rebaño de ovejas en donde el pastor era el perro y que nos hizo pasar un mal rato.

A partir del kilómetro 7 la subida es más fuerte, pero se hace muy bien, porque a pesar de que hace mucho frío, nos acompaña el sol y las vistas que son maravillosas

Cuando estamos llegando al kilómetro 7,4 hay que fijarse un poco y torcer a la derecha para empezar a subir a Peña Halcón, ya que no hay ninguna señal que indique la subida. Siendo la siguiente señal azul de la ruta de bajada.

Una vez que empezamos a subir vemos a nuestra izquierda unos cables de acero y unos anclajes en las piedras nos hacen más fácil la subida, aunque se puede subir perfectamente.

Una vez que estamos arriba nos sentamos a reponer fuerzas y a disfrutar del maravilloso paisaje, contemplando el pinar de La Enobrosilla y la Estación Espacial de Cebreros, sin olvidar a los buitres leonados que no dejaron de volar por encima y por debajo de nuestras cabezas.

Se cree que el nombre de Peña Halcón se debe porque en sus oquedades hace sus nidos el ave de rapiña. Cuenta la leyenda que su nombre es Peña Arcón, derivado de la creencia de que, en su interior, en una cueva, había un tesoro escondido, guardado en un arca grande –arcón- (aún se sigue creyendo esta fantasía).

Después de disfrutar e todas estas vistas, dejamos la cima del Risco Halcón, para continuar por el camino que traíamos, para dirigirnos hacia nuestra derecha rodeados de pinares hasta llegar al kilómetro 9,2 donde la pista se hace más ancha, en donde vamos a coincidir con la Ruta Cuesta Mala que sale a nuestra izquierda. Nosotros continuamos a nuestra derecha hasta llegar al kilómetro 10,8 en donde volvemos atravesar el Río Sotillo por un antiguo puente de piedra de granito

A partir de aquí el camino es bastante aburrido porque continuamos por la pista. En el kilómetro 11.4 atravesamos un paso canadiense y nos acompaña a nuestra derecha la Peña Halcón y viñedos a la izquierda de la pista hasta llegar al alto de La Mojonera.

Un poco más adelante abandonamos la pista a nuestra izquierda para descender por un sendero estrecho y ver un cartel que pone “Calzada Romana”. Seguimos y en pocos minutos volvemos a la pista que nos llevará a la pista asfaltada viendo el cementerio a nuestra derecha. Siguiendo la pista nos lleva a El hoyo de Pinares al Pilón del matadero, lugar donde empezamos la ruta.

Ruta circular y muy bonita, que de una forma tranquila en 5 horas nos hace disfrutar del Pino Castrejón y de las vistas inmejorables de la Peña el Halcón.

La última parte de la ruta, una vez que llegas a la pista se hace monótona y aburrida, aunque se puede seguir por los pinares que siguen paralelos a la pista. De todas las formas hasta llegar a Hoyo de Pinares se hace un poquito más pesada. Pero todo esto queda compensado por lo que se disfruta en el resto de la ruta.

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¡QUE LA DISFRUTEIS!!!