Río Dúrcal - Salto de agua Canal de Fuga, Dúrcal (Granada)

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Domingo 24 de junio de 2018.
Nos dirigimos a Dúrcal, pueblo que forma parte del Valle de Lecrín (o Valle de la Alegría en árabe) en la provincia de Granada.
Salimos desde Málaga por la A-7 dirección Almería y una vez pasado Nerja, Almuñécar y Salobreña (a unos 85 km. del inicio nos incorporamos a la A-44.
A unos 25 km. tomamos la salida 157 hacia la N-323a Nigüelas-Dúrcal y seguiremos por la carretera Bailén-Motril buscando el I.E.S. Valle de Lecrín que está en el Camino de las Arenillas. Un poco antes de llegar al instituto hay una explanada donde podemos dejar el coche bien aparcado y comenzar la ruta.

Esta ruta que nosotros hacemos forma parte de la SL-A-236 Río Dúrcal-Los Bolos. Su comienzo está en el centro de Dúrcal, en la Plaza de España pero nosotros la comenzamos en la explanada por donde se accede al área recreativa del río Dúrcal.
La iniciamos por un camino que encontramos al frente y por el cual un poco más adelante discurre una acequia, a veces abierta y otras veces abovedada y a la izquierda del camino hay parcelas cultivadas o con frutales.
Desde aquí tenemos vistas hacia el valle del río Dúrcal o también llamado Ízbor y si miramos hacia atrás veremos el puente de hierro o de Lata como lo llaman los durqueños.
Este camino nos lleva hasta el inicio de la ruta “Los Bolos”, desde aquí primero bajaremos al curso del río y enseguida subiremos de nuevo para continuar por encima de la Acequia de Márgena o Mahína construida en época musulmana.
Llegaremos a un pequeño túnel que tendremos que atravesar agachados y seguiremos por encima de la acequia hasta llegar a un paso “sumamente estrecho” que atravesamos andando lateralmente para continuar de nuevo por encima de la acequia. Ésta sigue hasta el salto de agua del Canal de Fuga, que desde los años 20 del siglo pasado permite el funcionamiento de la Central Hidroeléctrica o Fábrica de la Luz.
El agua que alimenta esta cascada llega de la Sierra de Dúrcal, la transportan hasta el Cerro del Zahor, desciende hasta la central eléctrica produciendo electricidad y una vez cumplido su objetivo el agua es devuelta al río Dúrcal en forma de cascada.
A veces esta cascada está seca, bien porque el verano es sumamente seco o bien porque la central está averiada.
A partir de aquí continuamos por el interior del río pero la corriente es bastante fuerte y aunque nos ayudamos con los bastones nos cuesta mucho trabajo avanzar. Decidimos seguir media hora más pero el río está en las mismas condiciones así que ponemos fin a nuestra aventura y damos la vuelta (se hace muy difícil seguir a contracorriente).
Seguramente otro día volvamos a intentarlo para llegar al salto de agua "Los Bolos" que era nuestro deseo.
La ruta de vuelta idéntica a la de ida.
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