Río Dílar-Rambla Seca-Vereda de los Alayos-Sendero río Dílar 5-NOV-22 IBP 80

¡¡ATENCIÓN!! Antes de nada debemos advertir que esta ruta tiene un par de pasos peligrosos y complicados, ya que la Vereda de los Alayos se ha deteriorado mucho en algunos lugares, en los que casi no queda senda y hay que pasar por una franja muy estrecha y con riesgo de fuerte caída. Por esta misma razón no la recomendamos a gente que tenga vértigo.

Muchas más rutas en el blog: MIL Y UNA RUTAS
¡Síguenos en INSTAGRAM!
También nos puedes seguir en FACEBOOK Muchas más rutas en el blog: MIL Y UNA RUTAS

Iniciamos la ruta en el río Dílar, en el aparcamiento del área recreativa, junto al Merendero Los Alayos. Seguimos río arriba, pasando junto al área recreativa y, cuando acaba la pista, cruzamos el río por un puente de madera.

Comenzamos ya la subida por Rambla Seca, un fuerte y continuado ascenso que nos lleva hasta el corazón de Los Alayos.

Hay que abandonar Rambla Seca y tomar un sendero que parte a la izquierda. Está señalizado con hitos. La pendiente es ahora mayor. Nos adentramos en un pequeño pinar. Un poco más adelante un cruce nos indica el desvío a la Vereda de Picacho a la derecha. Nosotros seguimos por la izquierda, que está señalizado como Vereda Cuesta PN.

Esta vereda va ascendiendo hasta un pequeño collado, desde donde tenemos vistas al río Dílar, el Cerro Sevilla y el Trevenque. Desde este collado hay que descender para continuar la senda.

Un poco más adelante es donde se pone peligrosa. La erosión prácticamente se ha ido llevando la ladera y queda un espacio muy pequeño y muy expuesto para pasar por un terreno muy arenoso, con evidente riesgo de caer ladera abajo.

Esta vereda recorre Los Alayos por debajo de las cumbres emblemáticas de esta zona como el Corazón de la Sandía, y ofrece magníficas vistas de toda esta zona de la sierra.

En un barranco de nuevo ha desaparecido la senda, de forma que el paso es muy expuesto y peligroso.

En otros puntos la senda ha desaparecido por la caída de árboles y hay que sortearlos, aunque se intuye bien por donde hay que pasar.

La vereda acaba adentrándose en el bosque de la Cuesta del Pino, que sorprende tras el recorrido por un terreno tan agreste y árido. Descendemos a través del bosque hasta el río Dílar, que cruzamos junto a la toma del Canal de la Espartera.

Para el regreso hemos seguido el sendero del Canal de la Espartera para abandonarlo y descender hacia el río Dílar a la altura de la Cascada.

El sendero que va por el río Dílar es una maravilla, pero hay que tener en cuenta que hay que vadear el río en varias ocasiones, y os mojaréis con seguridad. Por tanto, tened en cuenta la época del año y si el río viene muy crecido. En otro caso la alternativa para volver es continuar por el Sendero del Canal de la Espartera hasta el Cortijo Sevilla.

En esta ocasión no nos hemos acercado a la cascada, pero si no la conocéis vale la pena que os desviéis un poco para asomaros a la misma.

Para más info de la ruta pincha en el siguiente enlace: