Río Cabriel. De la Presa y la Venta de Contreras al puente de hierro (Alto de Contreras).
near Contreras, Castilla-La Mancha (España)
Viewed 4069 times, downloaded 193 times
Trail photos
Itinerary description
Ramonz ha enviado un comentario en el que informa de que la ruta ha sido cortada por el propietario del camping, con sentencia favorable, aunque no se en qué lugar exacto se produce el corte, ni cuanto dura. Cualquier interesado en utilizar el track debe tener en cuenta que la ruta debe ser modificada en el lugar de corte.
El río Cabriel ofrece algunos de los mejores paisajes fluviales del Estado. Las hoces constituyen un paisaje de excepción, pero los Cuchillos y la parte inicial tras el embalse, hasta Fonseca, configuran un paisaje igualmente bellísimo.
El punto de inicio se establece en un complejo turístico cuya base es una Venta del siglo XVI, conocida actualmente como Venta de Contreras, aunque hace años era más conocida como Caserío o Hacienda de Contreras. Está en el término municipal de Minglanilla, en la carretera de acceso al río Cabriel desde la N-III, muy cerca de la Presa que cierra el Embalse de Contreras, pero no existe una población que lleve el nombre de Contreras en este lado del río. Cuando en 1950 se iniciaron las obras de construcción de la Presa, se creo en el lado valenciano, al este del río, el Poblado de Contreras, con viviendas y otras instalaciones (entre las que se incluyen las carreteras de acceso, por la que hoy hemos pasado y que está en perfecto estado) para los trabajadores del pantano; el poblado está ubicado en el término de Villargordo del Cabriel, del que fue una pedanía. Si se mira hacia el río, aguas abajo de la presa, se podrá ver un hermoso puente, sobre el que cruza la carretera que llega al Poblado; este puente fue construido un siglo antes (entre 1845 y 1851) por Licinio del Valle, para cruzar el río antes de la construcción del viaducto sobre la N-III, siguiendo el trazado de la antigua carretera del Puerto de Contreras.
El embalse de Contreras es otra de esas muchas historias para no dormir que pueblan el desarrolladismo ignorante, cuando no simplemente oportunista e interesado, del país en que vivimos. Es un gran embalse, en un lugar bellísimo que estuvo a punto de ser destrozado por toda suerte de proyectos empresariales de los que no se ha salvado de milagro, pero casi. Su superficie es de 2710 hectáreas, y su capacidad máxima es de 943 hectómetros cúbicos, pero el nivel real de depósitos raramente supera el 20% de esa cantidad, por la permeabilidad de la roca sobre la que está cimentada una segunda presa, situada a unos cientos de metros al oeste de la presa principal. En estas condiciones puede suponerse la rentabilidad de una presa que debía ser utilizada para la producción de energía y el abastecimiento de agua al Canal Júcar-Turia.
Llegar al punto de inicio es ligeramente más complicado que hace años. Llegamos por la A-3, desde Valencia, hasta la salida de Villargordo del Cabriel, y ahí pasamos a la N-III, que seguimos en dirección a Minglanilla. No llegaremos a esa población, cerca ya del indicador del km 234 saldremos por la izquierda (no está bien señalizado antes, por lo que hay que estar atentos), hacia la CM-9327, por la que bajaremos el Puerto de Contreras hasta llegar a las Ventas de Contreras y el Puerto (más abajo llegaríamos al Puente de Contrera), con espléndidas vistas en el trayecto sobre el embalse y las instalaciones anexas. Dejamos aparcado el coche a la puerta de la Venta e iniciamos la caminata dirigiéndonos hacia un sendero bien señalizado, protegido por vallas de madera y escalonado, por el que descendemos hacia el cauce del río.
Seguimos a la vera del río, aguas abajo, en un paraje de ensueño, hasta llegar a un lugar con huertos de frutales y almendros, donde el sendero se aparta del río y más tarde encuentra un cruce de caminos con un cierre señalizado como Finca Privada (en el mapa instalaciones de la Central Eléctrica de Contreras o Casas Mirasol), en el que se abre un portón metálico, que da paso a un sendero que continúa nuestro trayecto para dirigirse a un bonito barranco, con un impresionante suelo de roca viva aplanada, que parece bajar desde El Martinete.
Aquí, en el cruce con la rambla del barranco, el sendero gira hacia el sur y va a reunirse de nuevo con el río. Antes de llegar a él vemos las instalaciones de un medidor de aforos, en una zona muy bella de entrada a los Cuchillos. Bajamos hasta cerca del medidor para hacer fotos, y luego continuamos el camino por la muy agradable pista no asfaltada. Pronto llegaremos a un horno de cal fácilmente identificable. Continuamos con la vista del río permanentemente a nuestra izquierda, hasta llegar a una zona donde las paredes rocosas que delimitan el valle empiezan a juntarse y la roca se desgarra en mil contorsiones al tiempo que se aplana para formar los impresionantes Cuchillos. Hay otras zonas desde donde se puede admirar la impresionante erosión que ha dado lugar a los cuchillos, pero esta es mi favorita. La zona es bellísima y, aunque se ven carteles avisando del peligro de desprendimientos y aconsejando pasar deprisa, uno encuentra tal paz y belleza en este lugar que siente el deseo de quedarse en el mientras pueda. Cuando llegamos a la parte final, tras pasar bajo la Torre Negra, atravesando el túnel y saliendo al lugar donde está lo que queda del puente metálico el valle comienza a ensancharse para entrar en el paraje de La Fonseca. Aquí comienza otra parte maravillosa del río, las grandes hoces, de las que la primera que encontraríamos de seguir es el Rabo de la Sartén. Pero eso ya lo hemos mostrado en otra ruta, así que toca dar la vuelta y emprender el regreso por el mismo camino.
Pasadas las Casas de Mirasol, al encontrar el sendero por el que bajamos desde la Venta de Contreras, seguimos por la derecha, al lado del río, por el camino principal, para llegar al pie del Puente de Contreras y la presa principal del embalse. Ahí giramos a la izquierda y seguimos ascendiendo por el camino asfaltado que viene desde el Puente, mientras oímos el inconfundible ruido del agua que desciende por la pared del río; no vemos la causa, en una zona con abundante vegetación, podrían ser tuberías, pero no suelen hacer tanto ruido, así que pensamos que probablemente hay afloramientos de agua, por las filtraciones u otra razón. Esta última parte tiene más pendiente y nada de protección; el sol y un día caluroso no son la mejor compañía, pero nos han dado un día con espléndida luminosidad, lo que asegura una belleza sin par de las vistas, así que bienvenida sea la ración de sudor.
Y llegamos a la venta, que está cerrada pero abierta. Es decir, la puerta está abierta pero no hay nadie. Pocos segundos después entra su dueño que nos dice que no están abiertos, pero que nunca dicen no a los caminantes, así que la cerveza bien fría ayuda a disolver cualquier posible quiebra en la opinión de que esta es una ruta casi obligada para todo el que guste de la belleza de un entorno fluvial como este.
La ruta no tiene ningún punto difícil, su desnivel es escaso y la longitud media. Si la temperatura lo facilita y no conoce la zona, siga hasta Fonseca y vea la parte inicial del Rabo de la Sartén, pero las mejores vistas de las grandes hoces (Rabo de la Sartén, Vicente, Purgatorio) se abordan desde la otra ribera. Por comodidad lleve calzado de montaña y bastones; en días como hoy hay que ponerse protección solar, usar sombrero y llevar mucha agua, o confiar en que en la Venta le facilitarán la lucha contra la sed y el calor.
El río Cabriel ofrece algunos de los mejores paisajes fluviales del Estado. Las hoces constituyen un paisaje de excepción, pero los Cuchillos y la parte inicial tras el embalse, hasta Fonseca, configuran un paisaje igualmente bellísimo.
El punto de inicio se establece en un complejo turístico cuya base es una Venta del siglo XVI, conocida actualmente como Venta de Contreras, aunque hace años era más conocida como Caserío o Hacienda de Contreras. Está en el término municipal de Minglanilla, en la carretera de acceso al río Cabriel desde la N-III, muy cerca de la Presa que cierra el Embalse de Contreras, pero no existe una población que lleve el nombre de Contreras en este lado del río. Cuando en 1950 se iniciaron las obras de construcción de la Presa, se creo en el lado valenciano, al este del río, el Poblado de Contreras, con viviendas y otras instalaciones (entre las que se incluyen las carreteras de acceso, por la que hoy hemos pasado y que está en perfecto estado) para los trabajadores del pantano; el poblado está ubicado en el término de Villargordo del Cabriel, del que fue una pedanía. Si se mira hacia el río, aguas abajo de la presa, se podrá ver un hermoso puente, sobre el que cruza la carretera que llega al Poblado; este puente fue construido un siglo antes (entre 1845 y 1851) por Licinio del Valle, para cruzar el río antes de la construcción del viaducto sobre la N-III, siguiendo el trazado de la antigua carretera del Puerto de Contreras.
El embalse de Contreras es otra de esas muchas historias para no dormir que pueblan el desarrolladismo ignorante, cuando no simplemente oportunista e interesado, del país en que vivimos. Es un gran embalse, en un lugar bellísimo que estuvo a punto de ser destrozado por toda suerte de proyectos empresariales de los que no se ha salvado de milagro, pero casi. Su superficie es de 2710 hectáreas, y su capacidad máxima es de 943 hectómetros cúbicos, pero el nivel real de depósitos raramente supera el 20% de esa cantidad, por la permeabilidad de la roca sobre la que está cimentada una segunda presa, situada a unos cientos de metros al oeste de la presa principal. En estas condiciones puede suponerse la rentabilidad de una presa que debía ser utilizada para la producción de energía y el abastecimiento de agua al Canal Júcar-Turia.
Llegar al punto de inicio es ligeramente más complicado que hace años. Llegamos por la A-3, desde Valencia, hasta la salida de Villargordo del Cabriel, y ahí pasamos a la N-III, que seguimos en dirección a Minglanilla. No llegaremos a esa población, cerca ya del indicador del km 234 saldremos por la izquierda (no está bien señalizado antes, por lo que hay que estar atentos), hacia la CM-9327, por la que bajaremos el Puerto de Contreras hasta llegar a las Ventas de Contreras y el Puerto (más abajo llegaríamos al Puente de Contrera), con espléndidas vistas en el trayecto sobre el embalse y las instalaciones anexas. Dejamos aparcado el coche a la puerta de la Venta e iniciamos la caminata dirigiéndonos hacia un sendero bien señalizado, protegido por vallas de madera y escalonado, por el que descendemos hacia el cauce del río.
Seguimos a la vera del río, aguas abajo, en un paraje de ensueño, hasta llegar a un lugar con huertos de frutales y almendros, donde el sendero se aparta del río y más tarde encuentra un cruce de caminos con un cierre señalizado como Finca Privada (en el mapa instalaciones de la Central Eléctrica de Contreras o Casas Mirasol), en el que se abre un portón metálico, que da paso a un sendero que continúa nuestro trayecto para dirigirse a un bonito barranco, con un impresionante suelo de roca viva aplanada, que parece bajar desde El Martinete.
Aquí, en el cruce con la rambla del barranco, el sendero gira hacia el sur y va a reunirse de nuevo con el río. Antes de llegar a él vemos las instalaciones de un medidor de aforos, en una zona muy bella de entrada a los Cuchillos. Bajamos hasta cerca del medidor para hacer fotos, y luego continuamos el camino por la muy agradable pista no asfaltada. Pronto llegaremos a un horno de cal fácilmente identificable. Continuamos con la vista del río permanentemente a nuestra izquierda, hasta llegar a una zona donde las paredes rocosas que delimitan el valle empiezan a juntarse y la roca se desgarra en mil contorsiones al tiempo que se aplana para formar los impresionantes Cuchillos. Hay otras zonas desde donde se puede admirar la impresionante erosión que ha dado lugar a los cuchillos, pero esta es mi favorita. La zona es bellísima y, aunque se ven carteles avisando del peligro de desprendimientos y aconsejando pasar deprisa, uno encuentra tal paz y belleza en este lugar que siente el deseo de quedarse en el mientras pueda. Cuando llegamos a la parte final, tras pasar bajo la Torre Negra, atravesando el túnel y saliendo al lugar donde está lo que queda del puente metálico el valle comienza a ensancharse para entrar en el paraje de La Fonseca. Aquí comienza otra parte maravillosa del río, las grandes hoces, de las que la primera que encontraríamos de seguir es el Rabo de la Sartén. Pero eso ya lo hemos mostrado en otra ruta, así que toca dar la vuelta y emprender el regreso por el mismo camino.
Pasadas las Casas de Mirasol, al encontrar el sendero por el que bajamos desde la Venta de Contreras, seguimos por la derecha, al lado del río, por el camino principal, para llegar al pie del Puente de Contreras y la presa principal del embalse. Ahí giramos a la izquierda y seguimos ascendiendo por el camino asfaltado que viene desde el Puente, mientras oímos el inconfundible ruido del agua que desciende por la pared del río; no vemos la causa, en una zona con abundante vegetación, podrían ser tuberías, pero no suelen hacer tanto ruido, así que pensamos que probablemente hay afloramientos de agua, por las filtraciones u otra razón. Esta última parte tiene más pendiente y nada de protección; el sol y un día caluroso no son la mejor compañía, pero nos han dado un día con espléndida luminosidad, lo que asegura una belleza sin par de las vistas, así que bienvenida sea la ración de sudor.
Y llegamos a la venta, que está cerrada pero abierta. Es decir, la puerta está abierta pero no hay nadie. Pocos segundos después entra su dueño que nos dice que no están abiertos, pero que nunca dicen no a los caminantes, así que la cerveza bien fría ayuda a disolver cualquier posible quiebra en la opinión de que esta es una ruta casi obligada para todo el que guste de la belleza de un entorno fluvial como este.
La ruta no tiene ningún punto difícil, su desnivel es escaso y la longitud media. Si la temperatura lo facilita y no conoce la zona, siga hasta Fonseca y vea la parte inicial del Rabo de la Sartén, pero las mejores vistas de las grandes hoces (Rabo de la Sartén, Vicente, Purgatorio) se abordan desde la otra ribera. Por comodidad lleve calzado de montaña y bastones; en días como hoy hay que ponerse protección solar, usar sombrero y llevar mucha agua, o confiar en que en la Venta le facilitarán la lucha contra la sed y el calor.
Waypoints
Comments (13)
You can add a comment or review this trail
I have followed this trail View more
Information
Easy to follow
Scenery
Moderate
Excelente ruta
Excelente ruta
I have followed this trail View more
Information
Easy to follow
Scenery
Moderate
Calor, calor, menos mal que accedimos al baño
I have followed this trail View more
Information
Easy to follow
Scenery
Easy
Excelente ruta, extensible a voluntad.
I have followed this trail verified View more
Information
Easy to follow
Scenery
Moderate
Ruta muy fácil, no acta para el baño, lo único que merece la pena ver sus los cuchillos
Tu opinión es tuya, pero hay sitios donde es posible bañarse.
I have followed this trail View more
Information
Easy to follow
Scenery
Easy
Precioso río e impresionantes cuchillos. Buen lugar de baño el final del sendero de acceso, aunque no recomendable a todo el mundo.
I have followed this trail verified View more
Information
Easy to follow
Scenery
Easy
Ruta muy bonita y de fácil acceso
Gracias por su valoración.
Hola se puede hacer con carrito de bebé?
Con cierta dificultad. Sería más fácil llevar al bebé en una mochila adecuada.
RUTA CORTADA POR EL PROPIETARIO DEL CAMPING CON SENTENCIA FAVORABLE
Gracias por la información. ¿Podrías indicar en qué lugar exacto se corta la ruta?. No recuerdo que hubiese ningún camping, aunque si unas instalaciones para prácticas deportivas. Bastaría indicar la distancia a la que se corta y cuanto dura el corte. Gracias de nuevo.