PR3 Caminhos do Sol Nascente-Arouca (Portugal)
near Moldes, Aveiro (Portugal)
Viewed 795 times, downloaded 42 times
Trail photos
Itinerary description
El PR3 "Caminos del Sol Naciente" es un recorrido de pequeña ruta, con cerca de 13 kilómetros, circular, con un pequeño ramal de acceso a la Iglesia Matriz de Moldes, donde se inicia.
Por ser circular puede ser iniciado en cualquiera de los lugares por donde pasa y en cualquier sentido, pero por la subida de Moldes para Bustelo se recomienda por ser más suave:
Junto a la Iglesia de Moldes tomamos la carretera asfaltada en dirección a Fuste y, pasados trescientos metros, después de la bifurcación para Friães, la abandonamos, tomando a la derecha un camino que nos lleva a la Sierra.
Siguiendo las marcas amarillas y rojas encontramos un camino antiguo que, subiendo, nos conduce por un bosque donde predomina el pino, aquí y allí salpicado de castaño y roble. Algunos eucaliptos también, para desgracia de la zona.
Continuando por él y después de frondoso bosque de castaño y roble, llegamos a Bustelo. Se pueden contemplar los campos en terrazas, después de lo que se recorre la aldea por su camino más antiguo, pasando una rústica, sencilla y bella fuente de agua cristalina y fresca, fresca, digamos fría en el día de hoy, entrando de nuevo en el camino de asfalto hacia la antigua escuela. Junto a ésta, retomamos los caminos antiguos y tradicionales.
Después de atravesar el arroyo de Espinho, tomamos un camino, a la izquierda, que sube suavemente, bajo las ramas frondosas de otro bosque. En una curva apretada, tomamos el camino de la izquierda, un camino muy antiguo que hacía la conexión de las aldeas de montaña (Cabreros, Tebilón y Cando) a la sede del Municipio. Por aquí que se hacían los funerales para el cementerio de Moldes. Siguiendo por dicho camino, que sube suavemente, alcanzamos un molino flanqueado de bellos ejemplares de acebo y luego un peto de ánimas.
Después de atravesar el arroyo en un pequeño puente de arco seguimos, subiendo suavemente, hacia Espinheiro. Aunque el recorrido pase al lado, la arquitectura y la construcción tradicional, donde impera el granito, merece una visita.
Atravesada la carretera de asfalto que une Adaúfe a Espinheiro, pasamos por detrás de este último lugar continuando subiendo la Sierra. Después de alcanzar un gran tramo de subida, estamos en la cuota cercana a los 800 metros de altitud. De aquí tenemos deslumbrante panorámica sobre el valle de Moldes y la Sra. da Mó, al norte; para Nordeste la Serra do Montemuro, para Noroeste los campos en terrazas de Adaúfe y de Bustelo. Avistamos ardillas.
Descendiendo por la carretera, rápidamente alcanzamos, al final de éste, un gran tanque comunitario de regadío tradicional. En este lugar seguimos por el camino de asfalto, hacia la derecha, hasta Fuste.
Después de admirar algunos motivos interesantes de contenido agrícola forestal, seguimos por el camino tradicional hasta el núcleo más antiguo de la aldea. Nos encontramos un molino ahora parado. Continuamos el recorrido, otra vez por la carretera de asfalto que nos lleva hasta la escuela.
Inmediatamente tomamos el camino de la izquierda, bajando a Cova y al valle de Moldes. Se advierte el frondoso bosque, uno de los más bien conservados de Arouca, y en su bosque con algunos ejemplares de acebo, laurel y madroñero, entre otros.
Llegados a Cova, seguimos hacia la izquierda. Se observa la forma integrada y armoniosa de los núcleos habitacionales de Póvoa y de Friães: los bosques circundantes, los cultivos de maíz, las ramas de las viñas
Pasados 900 metros dejamos la carretera de asfalto, atravesamos un pequeño puente de arco y estamos, otra vez, en un camino tradicional. Pasamos Póvoa y luego Friães y poco después estamos de nuevo en la Iglesia de Moldes.
Trece kilómetros de dificultad media por un lugar desconocido de Portugal que deja un grato recuerdo de esta zona interior del país vecino.
---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
O PR3 Camiños do Sol Nacente é un percorrido de pequena ruta, con preto de 13 quilómetros, circular, cun pequeno ramal de acceso á Igrexa Matriz de Moldes, onde se inicia.
Por ser circular pode ser iniciado en calquera dos lugares por onde pasa e en calquera sentido, pero pola subida de Moldes para Bustelo recoméndase por ser máis suave:
Xunto á Igrexa de Moldes tomamos a estrada asfaltada en dirección a Fuste e, pasados trescentos metros, despois da bifurcación para Friães, abandonámola, tomando á dereita un camiño que nos leva á Serra.
Seguindo as marcas amarelas e vermellas atopamos un camiño antigo que, subindo, condúcenos por un bosque onde predomina o piñeiro, aquí e alí salpicado de castiñeiro e carballo. Algúns eucaliptos tamén, para desgraza da zona.
Continuando por el e despois de frondoso bosque de castiñeiro e carballo, chegamos a Bustelo. Pódense contemplar os campos en terrazas, despois do que se percorre a aldea polo seu camiño máis antigo, pasando unha rústica, sinxela e bela fonte de auga cristalina e fresca, fresca, digamos fría no día de hoxe, entrando de novo no camiño de asfalto cara á antiga escola. Xunto a esta, retomamos os camiños antigos e tradicionais.
Despois de atravesar o arroio de Espinho, tomamos un camiño, á esquerda, que sobe suavemente, baixo as ramas frondosas doutro bosque. Nunha curva apertada, tomamos o camiño da esquerda, un camiño moi antigo que facía a conexión das aldeas de montaña (Cabreros, Tebilón e Cando) á sede do Municipio. Por aquí que se facían os funerais para o cemiterio de Moldes. Seguindo polo devandito camiño, que sobe suavemente, alcanzamos un muíño flanqueado de belos exemplares de acivro e logo un peto de ánimas.
Despois de atravesar o arroio nunha pequena ponte de arco seguimos, subindo suavemente, cara a Espinheiro. Aínda que o percorrido pase á beira, a arquitectura e a construción tradicional, onde impera o granito, merece unha visita.
Atravesada a estrada de asfalto que une Adaúfe a Espinheiro, pasamos por detrás deste último lugar continuando subindo a Serra. Despois de alcanzar un gran tramo de subida, estamos na cota próxima aos 800 metros de altitude. De aquí temos cegador panorámica sobre o val de Moldes e a Sra. dá Mó, ao norte; para Nordeste a Serra do Montemuro, para Noroeste os campos en terrazas de Adaúfe e de Bustelo. Avistamos ardillas.
Descendendo pola estrada, rapidamente alcanzamos, ao final deste, un gran tanque comunitario de regadío tradicional. Neste lugar seguimos polo camiño de asfalto, cara á dereita, ata Fuste.
Despois de admirar algúns motivos interesantes de contido agrícola forestal, seguimos polo camiño tradicional ata o núcleo máis antigo da aldea. Atopámonos un muíño agora parado. Continuamos o percorrido, outra vez pola estrada de asfalto que nos leva ata a escola.
Inmediatamente tomamos o camiño da esquerda, baixando a Cova e ao val de Moldes. Advírtese o frondoso bosque, un dos máis ben conservados de Arouca, e no seu bosque con algúns exemplares de acivro, loureiro e madroñero, entre outros.
Chegados a Cova, seguimos cara á esquerda. Obsérvase a forma integrada e harmoniosa dos núcleos habitacionales de Póvoa e de Friães: os bosques circundantes, os cultivos de millo, as ramas das viñas
Pasados 900 metros deixamos a estrada de asfalto, atravesamos unha pequena ponte de arco e estamos, outra vez, nun camiño tradicional. Pasamos Póvoa e logo Friães e pouco despois estamos de novo na Igrexa de Moldes.
Trece quilómetros de dificultade media por un lugar descoñecido de Portugal que deixa un grato recordo desta zona interior do país veciño.
Por ser circular puede ser iniciado en cualquiera de los lugares por donde pasa y en cualquier sentido, pero por la subida de Moldes para Bustelo se recomienda por ser más suave:
Junto a la Iglesia de Moldes tomamos la carretera asfaltada en dirección a Fuste y, pasados trescientos metros, después de la bifurcación para Friães, la abandonamos, tomando a la derecha un camino que nos lleva a la Sierra.
Siguiendo las marcas amarillas y rojas encontramos un camino antiguo que, subiendo, nos conduce por un bosque donde predomina el pino, aquí y allí salpicado de castaño y roble. Algunos eucaliptos también, para desgracia de la zona.
Continuando por él y después de frondoso bosque de castaño y roble, llegamos a Bustelo. Se pueden contemplar los campos en terrazas, después de lo que se recorre la aldea por su camino más antiguo, pasando una rústica, sencilla y bella fuente de agua cristalina y fresca, fresca, digamos fría en el día de hoy, entrando de nuevo en el camino de asfalto hacia la antigua escuela. Junto a ésta, retomamos los caminos antiguos y tradicionales.
Después de atravesar el arroyo de Espinho, tomamos un camino, a la izquierda, que sube suavemente, bajo las ramas frondosas de otro bosque. En una curva apretada, tomamos el camino de la izquierda, un camino muy antiguo que hacía la conexión de las aldeas de montaña (Cabreros, Tebilón y Cando) a la sede del Municipio. Por aquí que se hacían los funerales para el cementerio de Moldes. Siguiendo por dicho camino, que sube suavemente, alcanzamos un molino flanqueado de bellos ejemplares de acebo y luego un peto de ánimas.
Después de atravesar el arroyo en un pequeño puente de arco seguimos, subiendo suavemente, hacia Espinheiro. Aunque el recorrido pase al lado, la arquitectura y la construcción tradicional, donde impera el granito, merece una visita.
Atravesada la carretera de asfalto que une Adaúfe a Espinheiro, pasamos por detrás de este último lugar continuando subiendo la Sierra. Después de alcanzar un gran tramo de subida, estamos en la cuota cercana a los 800 metros de altitud. De aquí tenemos deslumbrante panorámica sobre el valle de Moldes y la Sra. da Mó, al norte; para Nordeste la Serra do Montemuro, para Noroeste los campos en terrazas de Adaúfe y de Bustelo. Avistamos ardillas.
Descendiendo por la carretera, rápidamente alcanzamos, al final de éste, un gran tanque comunitario de regadío tradicional. En este lugar seguimos por el camino de asfalto, hacia la derecha, hasta Fuste.
Después de admirar algunos motivos interesantes de contenido agrícola forestal, seguimos por el camino tradicional hasta el núcleo más antiguo de la aldea. Nos encontramos un molino ahora parado. Continuamos el recorrido, otra vez por la carretera de asfalto que nos lleva hasta la escuela.
Inmediatamente tomamos el camino de la izquierda, bajando a Cova y al valle de Moldes. Se advierte el frondoso bosque, uno de los más bien conservados de Arouca, y en su bosque con algunos ejemplares de acebo, laurel y madroñero, entre otros.
Llegados a Cova, seguimos hacia la izquierda. Se observa la forma integrada y armoniosa de los núcleos habitacionales de Póvoa y de Friães: los bosques circundantes, los cultivos de maíz, las ramas de las viñas
Pasados 900 metros dejamos la carretera de asfalto, atravesamos un pequeño puente de arco y estamos, otra vez, en un camino tradicional. Pasamos Póvoa y luego Friães y poco después estamos de nuevo en la Iglesia de Moldes.
Trece kilómetros de dificultad media por un lugar desconocido de Portugal que deja un grato recuerdo de esta zona interior del país vecino.
---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
O PR3 Camiños do Sol Nacente é un percorrido de pequena ruta, con preto de 13 quilómetros, circular, cun pequeno ramal de acceso á Igrexa Matriz de Moldes, onde se inicia.
Por ser circular pode ser iniciado en calquera dos lugares por onde pasa e en calquera sentido, pero pola subida de Moldes para Bustelo recoméndase por ser máis suave:
Xunto á Igrexa de Moldes tomamos a estrada asfaltada en dirección a Fuste e, pasados trescentos metros, despois da bifurcación para Friães, abandonámola, tomando á dereita un camiño que nos leva á Serra.
Seguindo as marcas amarelas e vermellas atopamos un camiño antigo que, subindo, condúcenos por un bosque onde predomina o piñeiro, aquí e alí salpicado de castiñeiro e carballo. Algúns eucaliptos tamén, para desgraza da zona.
Continuando por el e despois de frondoso bosque de castiñeiro e carballo, chegamos a Bustelo. Pódense contemplar os campos en terrazas, despois do que se percorre a aldea polo seu camiño máis antigo, pasando unha rústica, sinxela e bela fonte de auga cristalina e fresca, fresca, digamos fría no día de hoxe, entrando de novo no camiño de asfalto cara á antiga escola. Xunto a esta, retomamos os camiños antigos e tradicionais.
Despois de atravesar o arroio de Espinho, tomamos un camiño, á esquerda, que sobe suavemente, baixo as ramas frondosas doutro bosque. Nunha curva apertada, tomamos o camiño da esquerda, un camiño moi antigo que facía a conexión das aldeas de montaña (Cabreros, Tebilón e Cando) á sede do Municipio. Por aquí que se facían os funerais para o cemiterio de Moldes. Seguindo polo devandito camiño, que sobe suavemente, alcanzamos un muíño flanqueado de belos exemplares de acivro e logo un peto de ánimas.
Despois de atravesar o arroio nunha pequena ponte de arco seguimos, subindo suavemente, cara a Espinheiro. Aínda que o percorrido pase á beira, a arquitectura e a construción tradicional, onde impera o granito, merece unha visita.
Atravesada a estrada de asfalto que une Adaúfe a Espinheiro, pasamos por detrás deste último lugar continuando subindo a Serra. Despois de alcanzar un gran tramo de subida, estamos na cota próxima aos 800 metros de altitude. De aquí temos cegador panorámica sobre o val de Moldes e a Sra. dá Mó, ao norte; para Nordeste a Serra do Montemuro, para Noroeste os campos en terrazas de Adaúfe e de Bustelo. Avistamos ardillas.
Descendendo pola estrada, rapidamente alcanzamos, ao final deste, un gran tanque comunitario de regadío tradicional. Neste lugar seguimos polo camiño de asfalto, cara á dereita, ata Fuste.
Despois de admirar algúns motivos interesantes de contido agrícola forestal, seguimos polo camiño tradicional ata o núcleo máis antigo da aldea. Atopámonos un muíño agora parado. Continuamos o percorrido, outra vez pola estrada de asfalto que nos leva ata a escola.
Inmediatamente tomamos o camiño da esquerda, baixando a Cova e ao val de Moldes. Advírtese o frondoso bosque, un dos máis ben conservados de Arouca, e no seu bosque con algúns exemplares de acivro, loureiro e madroñero, entre outros.
Chegados a Cova, seguimos cara á esquerda. Obsérvase a forma integrada e harmoniosa dos núcleos habitacionales de Póvoa e de Friães: os bosques circundantes, os cultivos de millo, as ramas das viñas
Pasados 900 metros deixamos a estrada de asfalto, atravesamos unha pequena ponte de arco e estamos, outra vez, nun camiño tradicional. Pasamos Póvoa e logo Friães e pouco despois estamos de novo na Igrexa de Moldes.
Trece quilómetros de dificultade media por un lugar descoñecido de Portugal que deixa un grato recordo desta zona interior do país veciño.
Waypoints
Waypoint
0 ft
Bustelo
Religious site
0 ft
Cimeterio
Cementerio
Waypoint
0 ft
Espigueiro / Caniço (Vila Cova)
Waypoint
0 ft
Espinheiro
Fountain
1,451 ft
Fonte
Waypoint
0 ft
Fuste
Waypoint
0 ft
Fuste.
Waypoint
0 ft
Línea eléctrica
Panorama
0 ft
Miradouro Natural
Wilderness hut
2,277 ft
Muiños ruinas
Picnic
2,133 ft
Parque Lacer da Palma
Park
0 ft
Placa de geoparque
Waypoint
1,385 ft
Povoa.
Waypoint
0 ft
Póvoa
Waypoint
0 ft
Regato Côto do Boi
Waypoint
2,066 ft
Ribeiro de Espinho
Waypoint
0 ft
Serras de Freita e Arada
Waypoint
0 ft
Vila Cova
You can add a comment or review this trail
Comments