Pozo Navarro desde Linares de Mora.

Aparcamos a la entrada de Linares y tras un breve callejeo, enfilamos una larga bajada rectilínea de unos 200 metros que nos deja en las afueras de la población y listos para comenzar por cómoda pista nuestro paseo de hoy.
Nuestro caminar discurre a escasos metros del río Paulejas que por cierto nos alegrará la mañana con el rumor constante de su caudal no muy potente en estas fechas pero mejor de lo esperado para este Ferragosto tan caluroso.
Bien es cierto que a las 8h de la mañana el termómetro marca 18° ya que caminamos a unos 1.400 / 1.500 metros

Al cabo de 1 kilómetro aproximadamente, decidimos tomar una variante sobre la ruta original de Juane Alemany (gracias compañero) y desviamos a la derecha para seguir por pista hasta nuestro destino.
Este último tramo sin apenas sombra y cruzando por la Masía del Arenal.

Alcanzamos sin más novedad nuestro destino y el Pozo Navarro y su entorno nos parecen de gran belleza.
Disfrutamos de un tentempié, fotos de rigor y un pequeño descanso junto a la cascada que no se encuentra en su esplendor pero la poza Navarro con agua cristalina y suficiente nos invita a gritos a un refrescante baño.
Hoy no tocaba.... quizás a la próxima.

Buscamos el imponente pino larisco "Obrado", en una loma apenas a unos 100 metros del pozo Navarro y subimos campo a través aunque luego descubrimos un mejor acceso que tomaremos en la bajada.
El pino es majestuoso y hay que acercarse hasta la base para disfrutar de su belleza.
Creo que sus dimensiones son inferiores a las del pino Escobón pero igual de orgulloso y monumental, este quizás algo más, al resultar más inaccesible y agreste.

Emprendemos la vuelta, esta vez por senda, paralela al río y que resulta de gran belleza y sin apenas dificultad salvo unos pocos metros en los cuales hay que extremar la precaución.
Preciosa ruta, ideal para el verano, GPS muy conveniente como siempre y sus 8 kilómetros y escaso desnivel la hacen perfecta para mi.
El exceso de tiempo es culpa del tentempié, fotos, charretas.....y mariposas.
Gracias Mateo y Juan por vuestra magnífica compañía, ha sido un placer.
Sigamos haciendo camino !