Portillo de los Tejos por el Hayadal. Cueva de las Grajas. Mirador de Valdelugaña. Senda de los Cazadores. GR-99. Desde Remolino

Ruta circular exigente y considerada difícil por el paso del portillo de los Tejos hasta llegar al molino más oriental del parque eólico de la Torada, sierra de Tudanca.

El esfuerzo por realizarla bien vale la pena, pero considero que no es para todos.
Se debe tener experiencia y buen estado físico para recorrer el Hayadal de Villalaín y pasar el portillo.
Por lo demás, el recorrido apenas presenta dificultad, si no tenemos en cuenta los saltos de desnivel en el descenso de la Senda de los Cazadores.

Salimos desde la otra orilla del Ebro en el despoblado de Remolino.
Atravesamos la pasarela del río y giramos a la izquierda siguiendo el GR-99 junto a la ribera hasta llegar a la canal del Hayadal de Bisjueces.

Antes de llegar a la pasarela norte del camino Requejo del desfiladero de los Hocinos nos desviamos a la derecha para atravesar al Hayadal de Villalaín.

El primer tramo es sucio, con zarzas y ramas de pequeños arbustos, pero enseguida se aclara ya que aparece en primer término un robledal.
Nosotros avanzamos siempre por la vaguada o lecho del barranco o canal.

Más adelante el bosque se transforma en hayedo y más arriba, después de dejar restos de antiguas carboneras, un pinar de reforestación.

Así hasta llegar a un collado para inmediatamente girar en perpendicular a la izquierda y ascender con esfuerzo entre hayas, pequeños tejos y mucha piedra suelta y escondida por la hojarasca aún seca a pesar de se ya octubre.

Cabe resaltar que esta ruta no es apta para realizarse si hay lluvias.

Después de ir acercándonos a la pared sur del barranco comienzan a aparecer buenos ejemplares de tilos, algún haya de buen porte y unos imponentes tejos a la derecha de la entrada al portillo de los Tejos.

La subida se realiza con mucho cuidado, pues la pendiente y la cantidad acumulada de derrubios por gravedad envueltos entre la tierra y las hojas de la vegetación hacen que la tarea no tenga margen de error.

Poco a poco se asciende el portillo junto a la parte derecha, y entre tilos y tejos imponentes se llega al collado que nos va a dar una tregua para inmediatamente atacar la pared de piedra e hierba que nos separa para llegar al alto del Horadillo.

Desde ahí las panorámicas hacia el monasterio de Rioseco, todo Manzanedo y el sinclinal Villarcayo-Tobalina son inmensas e increíbles.

Terminamos des ascender entre genistas hasta el aerogenerador que está más al este del parque eólico y de ahí bajamos por Valdeabuz entre casetas de pastores y sobre enebros rastreros hasta la Cueva de las Grajas.

Ahora sí está debidamente acondicionada para evitar posibles accidentes.

Después de disfrutar de este escondido rincón tomamos la Senda de los Cazadores.

A mitad de descenso giramos a la derecha para congraciarnos con las vistas que el desfiladero de los Hocinos nos brinda.
El portillo Estaca está llamándonos, pero lo dejaremos para otra ocasión.
Nosotros seguimos las manchas azules con las que se ha marcado para no perdernos en un rápido descenso hasta la orilla del río Ebro.

Ahí aparece de nuevo el GR-99.
Cruzamos la pasarela más septentrional del camino Requejo y salimos así del desfiladero.

Remontamos la orilla del río para llegar a nuestro punto de partida, Remolino.


Ruta impresionante y no recomendable para todos.
Avisado queda.
Saludos