PONTONES. Pueblos abandonados/ Miravete- Los Centenares- Las Canajelas- Las Huergas- Espumaderas

Un recorrido imprescindible de las Sierras de Cazorla, Segura y las Villas por los descomunales paisajes, la abundante vida animal y por la historia de sus pueblos abandonados tras las políticas llevadas a cabo después de la Guerra Civil.
Remontamos por la senda junto al Segura a Pontón Alto. Un cañón antaño lleno de vida, con campos cultivados y molinos a pleno rendimiento hasta hace poco.
Luego la pista directa que va a Fuente Segura y al nacimiento del Segura. En una curva a izquierdas el río se apodera del camino, y justo ahí dejamos la pista y comenzamos a su ir de forma tranquila por medio de un barranquillo.
La subida se hace entretenida. La mayoría del tiempo campo a través, o por senderillos de cabras que aparecen y desaparecen.
Ganamos un mirador y abajo tenemos el Embalse de Tranco de Beas y también el Barranco del Lobo. Hacemos una cuerda por lo más alto buscando una sendita en bajada que, una vez tomada, nos pondrá en el pueblo abandonado del Miravete.
El sol en todo lo alto y no hay agua. Así, seguimos camino a Los Centenares. Primero remontando el escaso caudal y luego, llegados a una cerrada sin salida, toca remontar a la brava hasta dar con un antiguo camino ya en desuso.
Llegados a Los Centenares directos a la única casa aún habitada que posee dentro de un verjado una fuente entubada y con buena sombra.
Hidratados, preparamos los bocatas, la fruta que llevamos y la transferencia nada del ciruelo, y una siesta muyyyy reponedora jeje.
Al levantar el campamento ponemos rumbo al pueblo de Las Canalejas. Un tramo corto en su oda por pista para entrar luego en un sendero casi inexistente por lo más profundo de un barranco. Directos, visitamos el cementerio (lo mantienen), fuente/lavadero (la mejor agua de la contorná, también entubada), y pueblo e iglesia (derruidos).
La salida del pueblo en subida por pista hasta una curva cerrada a derechas. Justo pasada la cueva nace a izquierdas un sendero marcado con hitos, en principio aún un tramo en su oda y pasado un pequeño collado, tendremos un largo descenso por dentro de un barranco hasta llegar al Barranco del Lobo, que cobija el curso de agua más importante de la comarca: Centenares.
La explanada a la que se llega es un lugar de ensueño. Punto de unión de las aguas de al menos tres barrancos, y un Congosto por donde las aguas se precipitan en busca del Pantano del Tranco. La noche. Acecha inminente y en una plana mullidita junto al río montamos la carpa. Tras la cena tardamos nada en acomodar nuestro sueño.
A la mañana las fotos, el desayuno y, recogido el campamento ponemos rumbo a la muy cercana población abandonada de Las Huergas-. Damos luego tumbos en busca de la senda que nos ha de sacar dirección Las Espumaderas y la vuelta a Pontones. Y una vez encontrada solo tenemos que seguirla, ganando altura rápidamente, tres buenas tachuelas antes de ganar los poblados de Espumaderas de arriba y de abajo.
Tras el collado, la plana a casi 1400m+, que recorreremos luego de almorzar fruta para llegar a Pontón Alto y deshaciendo el camino de ayer, directos a Pontones.

Sin duda se trata de una ruta ideal para hacerla en día y medio con pernocta en el camino. También. Si se quiere se puede hacer de .a era deportiva en un solo día.