Picos Tres Concejos y Camparón o Pisones desde Pendilla de Arbas

Salimos desde la localidad leonesa de Pendilla de Arbas (así lo denominan los lugareños, sin tilde) por la antigua vía romana de La Carisa y no abandonamos esta hasta que, una vez ya en Asturias y habiendo superado la Col.lá Propinde, la vía comienza a llanear y nos encontramos una hermosa cabaña de piedra a la derecha. Desde este lugar surge un sendero que, al principio, tenía una traza clara y despejada, pero después comienza a estar tomado por el matorral (eso sí, no demasiado alto). Más adelante nos dimos cuenta de que hubiera sido mejor elección haber subido por una pindia ladera terrosa que vimos a nuestra derecha, pero ya no íbamos a dar la vuelta. En fin, poco a poco, nos fuimos aproximando a la cima del Tres Concejos, que en su parte final es mucho más cómoda de andar.
Desde esta apacible cumbre ya nos apeteció acercarnos hasta el contiguo Pico Camparón o Pisones, tramo para disfrutar de la Cordillera en estado puro.
Por cierto que, resulta llamativo que, prácticamente, toda la Cordillera Cantábrica en la zona asturiana tenga la figura de protección de Parque Natural (Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias, Somiedo, Ubiñas-La Mesa, Redes, Ponga y Picos de Europa, este Parque Nacional) y la parte de Aller, bellísima, no haya "merecido", hasta la fecha, dicha protección.
Y el descenso desde el Camparón, para que nos saliera un poco circular la ruta, lo hicimos directo hasta el valle de Bustamores, improvisando e intentando evitar el matorral más alto. Esta fue la parte más "penosa" de la excursión, porque se veían a tiro los pastizales que enmarcan el inicio del arroyo de Las Vegas pero, como había que bajar con mucho cuidado, por la pendiente y el incómodo matorral (básicamente, brezos y piornos), se nos hizo largo y tedioso este tramo. A partir de ahí, ya a disfrutar por este hermoso valle hasta enlazar con la vía de La Carisa y regresar a Pendilla.