Pico Valdivia o Pico El Grajo por el Sendero Puerto de los Martínez - Sierra de Alcaparaín (PR-A 271) y vereda alternativa.

Se trata de una de las rutas montañeras más tradicionales de Málaga, que combina un trazado fácil de recorrer con unas vistas panorámicas excepcionales. Aunque ya había estado en la Sierra de Alcaparaín anteriormente, este sendero era desconocido para mi y me ha sorprendido muy gratamente. Creo que se trata de una ruta ideal para iniciarse en la montaña.

Comenzamos la ruta en el Puerto de los Martínez, separación entre Sierra Prieta y Sierra de Alcaparaín, un nudo de comunicaciones entre los Valles de los ríos Turón y Guadalhorce y punto de inicio de un gran numero de interesantes rutas senderistas. Comenzamos a caminar por un espeso bosque de pino carrasco, a través de un camino de herradura construido con muros de piedra seca y que se mantiene en un buen estado de conservación. Pronto tomamos un desvío a mano izquierda (de seguir recto iríamos a Carratraca) y el sendero empieza a ganar pendiente, sin embargo en ningún momento se hace dificultoso ya que está delineado en amplios zigzag que permiten avanzar sin gran fatiga. Me ha gustado especialmente este tramo del que he tomado un sinfín de fotografías.

Un nuevo cruce nos hace cambiar de dirección y comenzamos a ascender por la ladera este de la Sierra, ganando rápidamente altura. Pronto dejamos atrás el pinar y se abren unas impresionantes vistas al Valle del Guadalhorce, a la vez que tenemos la primera visión directa del Pico El Grajo. Progresamos rápidamente y tras un nuevo cambio de dirección encaramos la parte más montañera de la ruta. Alcanzamos un pequeño collado que nos ofrece una panorámica del Valle del Turón y en ese lugar nos sorprende el vuelo de una docena de buitres que se acercaban a ver si había potencial alimento. Vuelta al sendero y pronto llegamos a un indicador que nos dirige hacia la cima del pico. Aquí el camino se hace más difuso, pero no existe ningún riesgo de pérdida. A partir de ese punto comienza a subir la niebla y cierra totalmente la cumbre, escondiendo así las maravillosas vistas que hay desde el Valdivia. Por suerte ya había estado aquí y pude disfrutar de ellas a placer.

Este incidente acortó significativamente la ruta, ya que no estuve ni cinco minutos allí arriba. Tocaba desandar el camino con el aliciente de hacer los dos últimos kilómetros por un sendero alternativo que cerrara una ruta circular. En este caso se trata de un camino no tan ancho como al anterior pero bien marcado, cómodo y fácil de seguir, en el seguimos disfrutando del frondoso pinar, pasaremos por una curiosa mina de agua ya seca y por los restos de un par de caleras, además de una visión directa de las Sierras Prieta y Cabrilla y del Valle del Turón.