Pico Peñalba

Salimos desde el pueblo de Villabasil por la pista que nos lleva tranquilamente hasta la ermita en menos de 2 km. A partir de aquí tomamos la mala decisión de no seguir ningún camino de los existentes con lo cual entre los km 2 y 3,5 se nos complicó un poco la progresión aunque con bastante emoción por la incertidumbre de si podríamos continuar. Lo conseguimos y alcanzamos un hermoso hayedo dónde reencontramos una pista que nos acercará bastante a la base de la montaña. La abandonamos para adentrarnos en otro hayedo que poco a poco va cogiendo inclinación. En medio del bosque aparecen unos ejemplares de jóvenes tejos. Alcanzamos unas zonas de pastos y matorrales altos que nos dejan en la base de unos resaltes rocosos dónde destaca un esbelto monolito calizo. En varias zetas perfectamente diseñadas por ganado caprino, superamos estos tramos herbosos. Ganamos altura y vistas, hasta un par de pasos dónde hay que echar mano a la roca. Alcanzamos la Cumbre después de crestear un poco por la arista somital. Las vistas del Valle de Mena son impresionantes. Después de un breve pic-nic y la foto de rigor comenzamos el descenso continuando la progresión de la arista cimera. Algún tramo tiene unos desplomes totalmente verticales hacía el Norte. Bajamos por senda marcada con puntos rojos hasta encontrar una charca y restos de una antigua construcción. Volvemos a la cara Sur de la montaña y de nuevo otro hayedo imponente nos recibe. Aquí no encontramos ningún sendero marcado, no sabemos si es por la hija caída. Alcanzamos un enorme ejemplar de haya que marca el emplazamiento de un pozo construido de piedra, que nos da la impresión de ser una antigua trampa para lobos. Salimos del bosque y ya por senderos herbosos, nos topamos con rebaño de ovejas y sus correspondientes perros pastores. Tomamos la pista para regresar de nuevo al pueblo. La calificación la pongo de moderada por la orientación dificultosa en los hayedos y los tramos después de la ermita por decisión nuestra. Buena y original ruta.!