Pico Gilbo

Desde el aparcamiento anterior al puente que lleva a Riaño, parte la ruta que comparte inicio con otras como la Cueva de la Vieja del Monte, el mirador de las Biescas o los Osines.
Se comienza por una pista que va bordeando el embalse de Riaño.
Tras cruzar un arroyo por un puente de troncos, nos desviamos a la izquierda por otra pista que sube paralela a este arroyo. Aunque en un principio supera algunas praderas, luego se interna en un agradable hayedo hasta alcanzar un collado con una valla. En este punto, debemos desviarnos a la derecha, ganando altura por una pista que asciende ahora convertida en sendero hasta otro collado superior.
Desde este collado veremos a la derecha el camino que tomaremos luego para bajar.
Enfrente nuestro vemos la traza de sendero que sube a otro collado ya entre piedras.
Desde este collado la senda es clara y sube por una diagonal en la cara norte del pico.
Hay que echar las manos en algunos lugares pero sin ningún paso con verdadera dificultad. Lo que sí puede ser algo peligroso es la piedra suelta si hay gente por arriba.
La ruta sube por esta vía ganando altura de forma sostenida hasta situarse en el collado entre las dos cumbres.
Desde el collado giramos a la derecha y por trazas de sendero alcanzamos la cumbre con unas vistas 360 grados espectaculares.
La bajada la efectuamos por el mismo camino hasta llegar a la base del collado de piedras que hemos mencionado en la subida.
Ahora giraremos a la izquierda por un sendero que parte sin perder altura por los prados con buenas vistas hasta girar a la izquierda y meterse en el hayedo de las Biescas.
En este tramo veremos señales blancas y amarillas de PR.
La bajada por el hayedo tiene buen sendero y es bastante pendiente.
Llegamos a la parte de abajo y pronto llegaremos al mirador de las biescas.
Un poco más adelante podemos desviarnos de modo opcional a la cueva de la vieja del monte.
Ya sólo nos queda seguir la pista bordeando el embalse hasta el inicio de la ruta.