Pico Correcillas 'Polvoreda' y Cueva Moruquín (Cármenes)

Ascensión al Pico Correcillas desde Rodillazo por el Collado Santiago, descendiendo luego por la Cueva de Moruquín y el valle del Marqués hasta el Collado Santiago, para volver por la Calzada Getino al punto de partida en Rodillazo.

Rodillazo (1.310 metros) - Collado Santiago (1.576 metros) - Pico Correcillas (2.007 metros) - Cueva del Moruquín (1.617 metros) - Collado Santiago (1.576 metros) - Rodillazo (1.310 metros).

En la comarca leonesa de Cármenes, y por la carretera LE-311 hacia la hoces de Vegacervera, seguimos el descendente cauce del río Torío para llegar al desvío que conduce en Felmín a las cuevas de Valporquero. Justo en el cruce, nos desviamos a la izquierda por una estrecha carretera que en algo mas de 3 kms concluye en el pequeño pueblo de Rodillazo. A la entrada, hay un espacio amplio donde se puede dejar el vehículo.

Rodillazo, cuyo origen etimológico proviene de Río Lazo/Río Helado, se encuentra prácticamente deshabitado durante el invierno (tiene censados en el 2.018, 3 habitantes). Fue durante siglos un pueblo importante, ya que era lugar de tránsito por la denominada Calzada Getino, que comunicaba la comarca de Cármenes desde Felmín hasta Correcilla, por el Collado Santiago para llegar a las tierras del río Curueño. La población entre los años 1.900 y 1.930 rondaba las 80 personas. Su importancia estratégica decayó cuando en el siglo XVIII, se construyó el paso a través de las hoces de Vegacervera.

Cruzando el pueblo en dirección Este, enlazamos con el camino empedrado, que va ascendiendo en ligera pendiente por el llamado valle de La Abadía. Se debe este nombre a que en las proximidades del Collado Santiago, debió existir un pequeño cenobio, ahora solo quedan piedras amontonadas de lo que pudo ser una pequeña torre de vigilancia. El camino es una auténtica calzada real, con muros consistentes y suelo empedrado discurre por la izquierda del barranco que forma el río Rodillazo. Cuando llevamos poco mas de 500 metros cruzamos el pequeño arroyo de Sancenas que desciende de los peñascos norteños del valle. Desaparece la escasa arboleda y con 2 kms recorridos, nos encontramos con una portilla y unos carteles que prohiben el paso por ser una finca privada. Como veníamos con algo de información sobre este problema del que luego hablaremos, lo obviamos, abrimos la portilla, pasamos y la volvemos a cerrar (es sencillo). El camino real y su configuración continuan, pero han pasado maquinaria para hacerlo mas amplio y el empedrado así como su estructura milenaria han desaparecido. Se comprende que no hubo un estudio de impacto ambiental y como tal, parece que fue una decisión medieval en el siglo XXI.

Llegados al Collado Santiago, nos desviamos a la derecha por un camino que cambia hacia el Sur y que nos lleva a una barrera metálica que encontramos abierta, poco después damos vista por primera vez al Pico Correcillas. Hacia èl vamos dejando el camino y continuando por la derecha de una valla electrificada, que en linea recta se dirige hacia las laderas de la montaña. Hacia el Oeste quedan los pastizales del valle del Marqués por los que volveremos en el descenso. Cuando se acaba la valla, orientamos la ascensión hacia la derecha por la amplia ladera que se dirige a unas llambrias, la pendiente es constante y el esfuerzo evidente para alcanzar la loma cimera y poco después la cumbre.

La importancia de esta montaña leonesa se refleja en todas sus señales de cima: vertice geodésico, buzón y placas "in memoriam", presiden su altiva figura. Hacia el Norte todo el relieve de la Cordillera Cantábrica, queda por encima de las cumbres calizas de Fontún y Bodón. Hacia el Este la Peña Valdorria y hacia el Sur la Peña Galicia, es el último obstáculo para llegar al fértil páramo leonés. León que en línea recta queda a unos 30 kms, es ya la puerta de la meseta.
Otra cuestión con cierta polémica es su nombre: Correcillas, Polvoreda y Fito son los tres nombres por los que se puede denominar esta montaña, es de suponer que los tres pueblos de su contorno, Villalfeide, Rodillazo y Correcillas, condicionan esta diversidad en función de donde proceda nombrarla. No obstante la Federación de Montaña Castellano Leonesa lo adopta en su web como Pico Polvoreda, teniendo como punto de partida mas frecuente para su ascenso la localidad de Villalfeide.

Luego de disfrutar de esta privilegiada atalaya, descendemos por un sendero jitado que desde la ladera sureña sigue en dirección Oeste hacia Villalfeide. A la altura del primer collado (1.896 metros), cambiamos hacia el Norte para descender por el fondo de la vaguada de la Campona hacia la Cueva del Moruquín.

Emplazada en el Valle del Marqués, es en realidad un enorme sumidero, una grieta kárstica que recoge las aguas de este también denominado puerto de Rodillazo para llevarlas a través de unos 13 subterráneos kms, a la Fuente del Infierno en la Hoces de Vegacervera. El origen de su nombre puede proceder del guerrero árabe Moro Quil, que fue un protagonista relevante durante las guerras astures.

Cruzamos las praderas de esta amplia vega en dirección Este, en la que pastan mas de 100 cabezas de ganado a la orilla del pequeño arroyo, que luego se sumerge en la Cueva del Moruquín, para enlazar con el camino que a través del Collado Santiago nos devuelve a nuestro punto de partida en Rodillazo.

NOTA IMPORTANTE:
El Valle del Marqués parece ser una propiedad privada, denominado así porque fue señorío de los Marqueses de San Vicente, está rodeado de mucha polémica que se refleja en foros y redes sociales. Para su acceso desde Rodillazo, lo que se entiende que es un camino milenario y de uso público, está limitado por una portilla metálica, con carteles advirtiendo que está prohibido el paso. Nosotros hemos obviado esa prohibición, y hemos realizado la ruta sin encontrar a nadie que nos haya puesto impedimentos, incluso en la zona vallada con dirección a la cumbre nos cruzamos con un grupo de 7 personas que volvían hacia el Collado Santiago. Entre los años 2.008 y 2.012 aproximadamente, según pudimos ver a través de los foros, las dificultades fueron mayores para acceder al valle, por la presencia de guardas de seguridad que impedían el paso. Parece ser, que el principal motivo por el que se impedía el paso, era por la repoblación de animales como objetivo de caza. En nuestro recorrido, no pudimos ver nada mas que un enorme rebaño de vacas junto al arroyo del Valle del Marqués.
Sobre estos incidentes y de fechas recientes, solo hemos encontrado una referencia del 24 de Agosto de este año, en el que alguien que se identificó, como el dueño de la propiedad, le advirtió a un montañero a la altura de la portilla, de la prohibición existente cuando ya descendía hacia Rodillazo.