Pico Ahíllos (Alcaudete)

Nueva ruta por la Sierra Sur de Jaén en esta ocasión para coronar el pico Ahíllos, en la sierra del mismo nombre (parte de la Sierra Sur de Jaén), considerada una de las cien montañas más prominentes de la península (precisamente la número 100).

Llego a Alcaudete por la Nacional 432, entrando en la localidad por la N-432a y continuando hacia el centro urbano y luego hacia la Ermita de la Fuensanta (por la JA-3307); pasado el desvío para el Santuario, ya en las afueras de Alcaudete, se encuentra una zona recreativa (con charca decorativa) junto a la Fuente Amuña (o de la Victoria), donde aparco e inicio ruta.

Fuente Amuña es una surgencia de agua al pie del Cerro de la Cal, que nunca se ha agotado y aún hoy riega las huertas alcaudeteñas (antiguamente además movía tres molinos) y que favoreció el asentamiento de los íberos turdetanos en dicho cerro, dada la abundancia de agua.

A los pocos metros abandono la Cañada Real de Fuente Amuña (por donde discurre el Camino Mozárabe a Granada) por un camino de tierra que sube hasta los depósitos de agua del Cerro de la Cal, junto a los cuales lo dejo para seguir por otro camino que sigue subiendo por el olivar, a la derecha del Barranco del Cerro de la Cal. Conforme voy ascendiendo, puedo disfrutar de unas bonitas vistas de Alcaudete (dominado por su castillo calatravo), de las Sierras Subbéticas…

Ya sin senda clara, me dirijo hacia la línea del pinar, llegando a otro carril de tierra, que sigo a la izquierda, caminando ahora sí cómodamente entre olivos. Más adelante este camino conecta con otro (junto a un cortijo), por el que continúo a la derecha (dejando a este lado el Cerro Morrón Borondo) hasta la siguiente bifurcación; subo ahora por el camino de la izquierda, junto a un murete de piedra, que se convierte en un sendero que entra en un pinar.

Salgo del pinar atravesando las Solanas del Fontanar por el
Camino de las Casillas de Juan Pérez, recorriendo la cara sur de la Sierra Ahíllos, con amplias vistas de la Sierra Sur. El camino llanea por un retamar hasta que, junto a un mojón de piedra, vuelve a entrar en un frondoso pinar, por el que va bajando suavemente. Hay que estar atento para no dejarse llevar por este sendero y saltarse la vereda que, cambiando de dirección, sube por la Loma del Gitano. Esta subida continua de aproximadamente un kilómetro es el tramo más exigente físicamente, salvando unos 130 metros de desnivel. Afortunadamente, la sombra acompaña durante toda esta ascensión por el pinar, donde también pueden verse encinas, majuelos, acebuches…

Salgo a la pista forestal, que sigo a la izquierda, llegando junto a la caseta de vigilancia; unos metros antes, arranca de la pista un sendero de piedra y cemento, que recorre la cuerda del Ahíllos, casi hasta el pie del pico. Queda un corto cresteo hasta alcanzar el vértice geodésico, a 1454 msnm, al que no puedo resistirme a subir (aunque no es indispensable para disfrutar de una magnífica panorámica de 360 grados, pudiendo ver las Sierras Subbéticas, la Pandera, el Jabalcuz, la Peña de Martos… incluso Sierra Nevada).

La vuelta la realizo por el mismo camino con una pequeña variación, llegado a la bifurcación junto al cortijo, continuando ahora recto. El camino, en acusado descenso, llega hasta la JA-3307, a aproximadamente 1 kilómetro de Fuente Amuña, aunque yo (en las cercanías de la Cueva del Monstruo) intenté atrochar por el olivar (no creo que merezca la pena). Ya en la carretera, bajo por ella hasta conectar con la Cañada Real de Fuente Amuña, ya llegando al final de esta ruta. Las aguas del milenario manantial son muy de agradecer tras el esfuerzo realizado (especialmente con las altas temperaturas que, afortunadamente, me han cogido ya bajando, de vuelta).