P. N. de las BREÑAS. De Barbate a Caños de Meca pasando por Torre y mirador del Tajo. (Nocturna)

Paseo en la tarde noche por el Parque Natural de las Breñas. Saliendo desde las afueras de Barbate hasta llegar a Caños de Meca. En el recorrido se pasa por la Torre Vigía del Tajo y nos acercamos en las inmediaciones a su expectacular mirador a los acantilados. La zona del Tajo es especialmente interesante. Se han colocado unas vallas en el acantilado y desde esa altura se puede observar toda la inmensidad del mar, los arrecifes bajo los precipicios, la costa de Barbate y Zahara, y , en los días claros, es posible divisar la costa del norte de África, desde Tánger hasta el Yebel Musa.

El sendero se encuentra bien definido, si bien es verdad que en algunas zonas nos podemos encontrar varios caminos, siguiendo la dirección van coincidiendo, además hay balizas y marcas en los pinos. En las zonas cercanas a los acantilados hay que extremar las precauciones y no fiarse de las vallas por lo que pudiera pasar. Hay muchos tramos de los que pisamos que son de arena suelta, en ocasiones, dificulta un tanto el andar.

El Parque natural de acantilados y pinar de Barbate es el autentico tesoro ecológico de la zona. Es un bosque artificial ya que nació gracias a una reforestación realizada a finales del siglo XIX con el fin de retener unas tierras arenosas y secas.

En el regreso, sobretodo si este se hace de noche, hay que tener en cuenta la última intersección. Si no te das cuenta, puedes seguir por el sendero de los acantilados de la parte de arriba en vez de regresar al aparcamiento. No está indicado con WP en el track.

Se podría calificar como "FACIL", no presenta mayor dificultad, pero un poco por la longitud del recorrido y por el andar por la arena suelta, la califico como "MODERADA".

*Desde el entorno de Barbate a Caños de Meca y tierra adentro hasta Vejer de la Frontera se extiende uno de los parques naturales menos extensos de Andalucía con unas 5.000 hectáreas, el Parque Natural de la Breña y Marismas del Barbate. En él se distinguen hasta cinco ecosistemas diferentes: marino, acantilado, pinar, marismas y sistemas dunares. Destaca el impresionante Tajo de Barbate que, con más de 100 metros de altura, constituye el acantilado más notorio del Atlántico andaluz.

Para contemplar de cerca este espectáculo y deleitar los sentidos, lo ideal es realizar un paseo en barco desde el puerto de Barbate por sus cristalinas aguas turquesas, en las que también se practican submarinismo y snorkel. Se distinguen en sus acantilados, aún erosionados por el agua y el viento, manantiales de agua potable que vierten en pequeñas caletas, son los conocidos caños. Junto a zarzas e higueras crecen plantas típicas de ambientes salinos como almajos, barrillas o siemprevivas. En los huecos de la piedra crían numerosas garcillas bueyeras, grajillas, y la gaviotapatiamarilla, halcón peregrino, vuelvepiedras y zarapito trinador. Entre las rapaces, destacan el águila pescadora, la lechuza y el cernícalo vulgar. Los aficionados al parapente y ala-delta disponen en este espacio de lugares ideales para la práctica de estos deportes, incluso una escuela de vuelo libre en Vejer.

Otro paisaje característico es el pinar de La Breña. Su intensa repoblación para frenar las dunas móviles lo han convertido en el mayor pinar de Cádiz, del que se aprovechan piñas y piñones. En este lugar, el aroma a pino se mezcla con el de romero y lavanda que, junto con palmito, espino negro e, incluso retama o lentisco, forman el matorral mediterráneo existente. El pinar se extiende hasta bordear el acantilado, donde el pino carrasco convive con bosquetes de sabinas y abundantes enebros. Destaca el sendero Torre del Tajo que culmina en una hermosa panorámica. Ésta es una de las torres vigías que en los siglos XV y XVI alertaban sobre naves piratas y que, posteriormente, presenciaron la Batalla de Trafalgar.

Pero ya desde los fenicios, el papel del mar era fundamental, con la pesca del atún en almadraba y la salazón. Barbate sigue siendo un gran centro pesquero, con su puerto comercial y gran afición a la pesca con caña. En el estuario se pescan lisas y anguilas; y en la marisma, doradas y lenguados. De esta forma, el visitante adquirirá in situ productos de la salazón de atún, la mojama y huevas curadas.

*(Ventana del visitante)

La catalogación del área como parque natural supone el establecimiento de una serie de restricciones dentro de los limites protegidos. Así, se prohíben acciones tan comunes como encender fuegos en sitios no autorizados, acampar fuera de las zonas permitidas y en general todo tipo de actividades que atenten contra la conservación de los habitats naturales o alteren el normal desenvolvimiento de la fauna en el interior del espacio. El incumplimiento de los preceptos legales podría dar lugar a sanción administrativa y, en casos de especial gravedad , a responsabilidad civil y penal.

El parque alberga mamíferos menores como conejos, liebres y otros roedores. El principal depredador observado es el zorro.
Existen también poblaciones de camaleón, lagarto ocelado y varias especies de lagartijas.

Especial mención al ENEBRO MARÍTIMO.

**Es un arbolillo diocio (con pies masculinos y femeninos separados), resinoso, de hasta 10 metros de altura. Presenta un crecimiento lento y se mantiene verde todo el año. Cuando es joven tiene una copa más o menos piramidal, que se vuelve irregular en los ejemplares viejos y dependiendo de las condiciones ambientales (p.ej., fuertes vientos en primera línea de la costa). Son características sus pequeñas hojas punzantes con dos franjas blancas que las recorren a lo largo. Sus frutos redondeados (gálbulos) son de color verde y se tornan pardos en la madurez.

Es una planta nativa de las costas mediterráneas que en Andalucía se distribuye exclusivamente por el litoral Atlántico. Forma bosquetes o pies dispersos en los cordones de dunas, o bordes de acantilados costeros y arenales interiores bajo pinares de Pinus pinea de repoblación, en una estrecha franja del litoral atlántico andaluz. En Andalucía se estima una población de unos 24.000 ejemplares en el litoral de Huelva y Cádiz. Representan la vegetación natural de porte arbustivo, junto con Juniperus phoenicea subsp turbinata de los sistemas dunares, en el litoral atlántico, y en conjunto se consideran un Hábitat de Interés comunitario de carácter prioritario para la conservación. Son especies de alto valor ecológico creando formaciones vegetales con gran diversidad de flora y fauna.

Se encuentra en el Catálogo Andaluz de Especies Silvestres en Régimen de Protección (Decreto 23/2012), con la categoría “VULNERABLE”.

**(Internet)