| O Pequeno Tíbet Portugués-Val do Vez-Aldea de Sistelo (Portugal)

Sábado, 22 de mayo de 2021. http://www.senderismogalicia.gal/ (ENLACE DE RUTEA)
Este sábado hemos tenido una bonita experiencia de senderismo por un espacio natural único.
Participamos en una actividad organizada por Rutea, guías de Senderismo y otras muchas actividades de ocio (montaña, fotografía, aventura). En estos momentos tienen salidas por Galicia, Asturias, Picos Europa leoneses, Pirineos, etc.
Quedamos super/contentos por la organización de la ruta y la atención recibida. Muy recomendable Rutea.
De la mano de Rutea, hicimos un recorrido circular por Sistelo. Un trazado mix compuesto de varios Trilhos representativos de este lugar, que es el ganador nacional de las “Siete Maravillas de Portugal”, en la categoría de Pueblo Rural, por su originalidad y encanto.
El pueblo de Sistelo, llamado “pequeño Tíbet portugués”, tiene una marca de identidad única en las terrazas de todo el país. Las terrazas, moldeadas durante cientos de años por la fuerza del hombre con el fin de transformar una tierra montañosa y hostil en tierra cultivable para la producción de cereales y pastos para razas de vacas autóctonas, guían las aguas a través de un sistema de riego específico, transformando un territorio montañoso e inhóspito en un enclave eco-sostenible para la agricultura y la ganadería.
Visto desde lo alto de la montaña, el pueblo parece un rompecabezas, donde las casas encajan sobre el terreno hostil. Las tradicionales casas de granito, los molinos y los hórreos pierden su dimensión debido a la grandiosidad de ese valle inclinado y empotrado, al que acompaña el río Vez y otros muchos regatos y riachuelos.
El Paisaje Cultural de Sistelo, en el municipio de Arcos de Valdevez, engloba los parajes de Iglesia, Padrão y Porta Cova, enclavados entre el tramo inicial del río Vez y la sierra de la Peneda, y rodeado por las icónicas terrazas del valle del río y en la montaña las brandas (algo semejante a las brañas leonesas).
La profunda relación entre las poblaciones de esta región y su territorio, con un marcado carácter agrícola, ganadero y familiar de la economía local, propició la estructuración de un paisaje único, caracterizado no solo por el mosaico de formas de ocupación de la tierra, sino también por el dominio de una arquitectura vernácula centrada en el uso del granito, que dio forma a las casas, templos, puentes y aceras.
Desde un remoto origen medieval, Sistelo tuvo su territorio organizado por la acción humana desde una edad temprana. Así, las zonas con mejor sol se reservaron para los hórreos; la orilla del río para el establecimiento de molinos; las diferentes altitudes de las montañas para las angostas terrazas y levadas donde se cultiva maíz desde el siglo XVI; y, ya cerca de la cima de la montaña, las llanuras de pastos y cultivos para la práctica del pastoreo trashumante en los niveles más altos, aún salpicados de peculiares refugios y corrales. Una simbiosis entre el hombre y la naturaleza conviviendo en armonía desde tiempos pretéritos.
El Paisaje Cultural de Sistelo está, por tanto, compuesto por un espacio natural de superior calidad paisajística, natural y ambiental, al que se suma un notable patrimonio etnográfico e histórico cuya preservación y autenticidad es imprescindible garantizar, especialmente cuando las amenazas a las que se enfrentan son reconocibles. Salvar las economías tradicionales y la organización del mundo rural.
Sistelo está restaurado, respetando la arquitectura rural (plaza, cementerio, iglesia) es la partida de nuestra actividad. Bajamos al río por unas escaleras de piedra muy antiguas y muy pronunciadas. Transitamos por caminos de piedra y fincas amuralladas, subiendo entre los bancales, algunos de superficie muy reducida. El trabajo del hombre para allanar la verticalidad de los terraplenes, poco a poco hasta convertirlos en sembrados de maíz, huerta y pastoreo. Muchos ahora dedicados al pasto y de un verde intenso que igualmente favorece la belleza.
Llegamos a Padrao con sus hórreos (espigueiros), fuente de aguas cristalinas y canales de distribución del agua. Además, las vistas son de ensueño.
Abandonamos Padrao y bajamos por una calzada hasta el Peto das Almiñas; giramos a nuestra derecha en subida pronunciada por calzada de piedra muy irregular que los llevará hasta Porta da Cova. Nuestro guía de Rutea lo aconseja por las vistas panorámicas que se nos ofrecen desde el final de la aldea. Merece la pena visitar Porta da Cova.
Abandonamos el lugar retrocediendo sobre nuestros pasos hasta el Peto das Almiñas para girar a la derecha para descender hasta el río Vez para cruzarlo por un puente de piedra precioso y singular. A partir de este toca una subida pronunciada y continuada, siempre con vistas espectaculares a nuestra izquierda sobre los bancales y pueblos dispersos. Una vez alcanzada la cota más alta del recorrido, caminamos plácidamente hasta el lugar de Portela de Alvite para continuar hasta otro de nuestros puntos de referencia que era el mirador da Estrica. Un lugar para disfrutar de imágenes a vista de pájaro de la aldea de Sistelo y alrededores.
Tocaba reponer fuerzas del trayecto, algo exigente y disfrutar del lugar, con vistas y sentados al lado de la Ermita de la Estrica.
Solamente quedaba realizar un descenso muy pronunciado y con algunos tramos en zigzag en dirección al río Vez, tomando precauciones para evitar un resbalón. El organizador de Rutea, nos sugirió un pequeño recorrido de ida y vuelta por los pasadizos que forman parte de la Ecovía del Vez y regresar al inicio del recorrido.
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Sábado, 22 de maio de 2021
Este sábado tivemos unha bonita experiencia de sendeirismo por un espazo natural único.
Participamos nunha actividade organizada por Rutea, guías de Sendeirismo e outras moitas actividades de lecer (montaña, fotografía, aventura). Nestes momentos teñen saídas por Galicia, Asturias, Picos Europa leoneses, Pireneos, etc.
Quedamos super/contentos pola organización do roteiro e a atención recibida. Moi recomendable Rutea.
Da man de Rutea, fixemos un percorrido circular por Sistelo. Un trazado mix composto de varios Trilhos representativos deste lugar, que é o gañador nacional das “Sete Marabillas de Portugal”, na categoría de Pobo Rural, pola súa orixinalidade e encanto.
O pobo de Sistelo, chamado “pequeno Tíbet portugués”, ten unha marca de identidade única nas terrazas de todo o país. As terrazas, moldeadas durante centos de anos pola forza do home co fin de transformar unha terra montañosa e hostil en terra cultivable para a produción de cereais e pastos para razas de vacas autóctonas, guían as augas a través dun sistema de rega específica, transformando un territorio montañoso e inhóspito nun enclave eco-sostible para a agricultura e a gandería.
Visto desde o alto da montaña, o pobo parece un crebacabezas, onde as casas encaixan sobre o terreo hostil. As tradicionais casas de granito, os muíños e os hórreos perden a súa dimensión debido á grandiosidade dese val inclinado e encaixado, ao que acompaña o río Vez e outros moitos regachos e regatos.
A Paisaxe Cultural de Sistelo, no municipio de Arcos de Valdevez, engloba as paraxes de Iglesia, Padrão e Porta Cova, situados entre o tramo inicial do río Vez e a serra da Peneda, e rodeado polas icónicas terrazas do val do río e na montaña as brandas (algo semellante ás brañas leonesas).
A profunda relación entre as poboacións desta rexión e o seu territorio, cun marcado carácter agrícola, gandeiro e familiar da economía local, propiciou a estruturación dunha paisaxe única, caracterizado non só polo mosaico de formas de ocupación da terra, senón tamén polo dominio dunha arquitectura vernácula centrada no uso do granito, que deu forma ás casas, templos, pontes e beirarrúas.
Desde unha remota orixe medieval, Sistelo tivo o seu territorio organizado pola acción humana desde unha idade temperá. Así, as zonas con mellor sol reserváronse para os hórreos; a beira do río para o establecemento de muíños; as diferentes altitudes das montañas para as angostas terrazas e levadas onde se cultiva millo desde o século XVI; e, xa preto da cima da montaña, as chairas de pastos e cultivos para a práctica do pastoreo trashumante nos niveis máis altos, aínda salpicados de peculiares refuxios e currais. Unha simbiose entre o home e a natureza convivindo en harmonía desde tempos pretéritos.
A Paisaxe Cultural de Sistelo está, por tanto, composto por un espazo natural de superior calidade paisaxística, natural e ambiental, ao que se suma un notable patrimonio etnográfico e histórico cuxa preservación e autenticidade é imprescindible garantir, especialmente cando as ameazas ás que se enfrontan son reconocibles. Salvar as economías tradicionais e a organización do mundo rural.
Sistelo está restaurado, respectando a arquitectura rural (praza, cemiterio, igrexa) é a partida da nosa actividade. Baixamos ao río por unhas escaleiras de pedra moi antigas e moi pronunciadas. Transitamos por camiños de pedra e leiras amuralladas, subindo entre os bancales, algúns de superficie moi reducida. O traballo do home para achandar a verticalidad dos terrapléns, aos poucos ata convertelos en sementados de millo, horta e pastoreo. Moitos agora dedicados ao pasto e dun verde intenso que igualmente favorece a beleza.
Chegamos a Padrao cos seus hórreos ( espigueiros), fonte de augas cristalinas e canles de distribución da auga. Ademais, as vistas son de ilusión.
Abandonamos Padrao e baixamos por unha calzada ata o Peto dás Almiñas; viramos á nosa dereita en subida pronunciada por calzada de pedra moi irregular que os levará ata Porta dá Cova. O noso guía de Rutea aconséllao polas vistas panorámicas que se nos ofrecen desde o final da aldea. Merece a pena visitar Porta dá Cova.
Abandonamos o lugar retrocedendo sobre os nosos pasos ata o Peto dás Almiñas para virar á dereita para descender ata o río Vez para cruzalo por unha ponte de pedra precioso e singular. A partir deste toca unha subida pronunciada e continuada, sempre con vistas espectaculares á nosa esquerda sobre os bancales e pobos dispersos. Unha vez alcanzada a cota máis alta do percorrido, camiñamos plácidamente ata o lugar de Portela de Alvite para continuar ata outro dos nosos puntos de referencia que era o miradoiro dá Estrica. Un lugar para gozar de imaxes desde o alto da aldea de Sistelo e arredores.
Tocaba repoñer forzas do traxecto, algo esixente e gozar do lugar, con vistas e sentados á beira da Ermida da Estrica.
Soamente quedaba realizar un descenso moi pronunciado e con algúns tramos en zigzag en dirección ao río Vez, tomando precaucións para evitar un resbalón. O organizador de Rutea, suxeriunos un pequeno percorrido de ida e volta polos pasadizos que forman parte da Ecovía do Vez e regresar ao comezo do percorrido.
http://www.senderismogalicia.gal/ (PÁGINA WEB DE RUTEA)