Monleón - Ollas de la Sapa - Casas de Monleón - Monleón

A 62 kilómetros de Salamanca ciudad, enclavado en la subcomarca de Entresierras y muy próximo a Linares, encontramos una de los pueblos más antiguos de la provincia. Encaramado a casi 900 metros de altura, Monleón destaca por el magnífico porte de la torre del homenaje de lo que fue un castillo. Cuenta con 37 metros de altura, y está rematada por ocho cubos voladizos. Pese a haber constancia de haber sido poblado desde muchos siglos antes, la villa no alcanza su mayor esplendor hasta al siglo XII, cuando se convierte en puesto fortificado. A través una gran puerta con arco de medio punto, protegida por dos cubos con saeteras, accedemos a su interior. Un recinto amurallado de trazado irregular alberga el entramado urbano medieval de la villa.
Para comenzar el paseo, caminaremos por sus calles hasta salir por los restos de la Puerta del Sol que se abre en un recodo del muro, y avanzaremos hacia el frente por la calle que rodea el pueblo hasta tomar un desvío a la derecha. Allí desciende un camino encementado que posteriormente pasa a ser de tierra y donde encontraremos dos indicaciones que nos marcan la dirección a seguir, una nos avisa de que tomamos el camino de gran recorrido GR 181, dentro de la denominada Ruta de los Caminos Históricos de Entresierras en dirección hacia Casas de Monleón o hacia El Tornadizo y enfrente, otra que señala la presencia del poblado altomedieval Monte El Alcaide, que es hacia donde nos dirigimos antes de alcanzar el paraje de las Ollas de la Sapa.
El recorrido trascurre por una pista, bien señalizada, siguiendo el recorrido paralelo al curso del Alagón. Tras pasar un pequeño pontón llegaremos a una disyuntiva donde a nuestra izquierda nos separan tres kilómetros de Casas de Monleón, y al frente señala en dirección El Tornadizo. Esta es la que vamos a elegir mientras el recinto almenado de Monleón se enseñorea a nuestra derecha.
Esta ruta también se denominaba Ruta del Agua, y transcurre entre robles y castaños, así como alisos y algunos chopos que crecen junto a la ribera del Río Alagón y el Arroyo de Santa María. Pasaremos junto a una antigua fuente lavadero denominada La Poza. Varias son las porteras con pasos canadienses que hemos de atravesar para adentrarnos en la dehesa municipal, donde caminaremos entre ganado que nos observa a veces con curiosidad y otras con indiferencia, pero sin suponer peligro alguno si respetamos su espacio y caminamos con tranquilidad. Al pasar junto a un corral surge un camino a nuestra izquierda que es por donde regresaremos de nuestra ruta circular, pero por el momento continuaremos de frente por una suave pendiente que asciende entre las sombras que nos brindan los robles. Cuando el camino comience a descender, observaremos que se abre un claro a nuestra derecha con unos paneles explicativos algo desvaídos por la acción del sol y el paso del tiempo. Los paneles nos avisan de que allí estuvo emplazado el poblado alto medieval Monte El Alcaide.
El municipio de Monleón registra asentamientos humanos desde época prerromana, como lo atestiguan los fragmentos cerámicos que se hallaron en la base de la muralla, el berraco procedente del castro vetón que se emplazaba donde ahora está la villa o los restos encontrados en las excavaciones de Monte El Alcaide, datado entre los siglos VII y IX y ubicado en un cerro elevado para permitir un dominio visual del entorno, y a poca distancia del río Alagón para abastecerse de agua.
Podremos observar tres estancias habitacionales, cerca de las cuales se encontraron diversas inscripciones grabadas en pizarra.
Si descendemos nuevamente hacia nuestra izquierda dejando el castro a nuestra espalda, encontraremos un chozo de pastores que ha sido reconstruido con piedra y techado con escobas, en cuyo entorno se disponen varias tumbas antropomorfas y de bañera de una necrópolis visigoda, así como las lagaretas excavadas en los berrocales graníticos que nos refieren al cultivo de la vid que se practicaba en tiempos remotos.
Regresamos entonces al camino desde donde nos desviamos para dirigirnos hacia el paraje de las Ollas de la Sapa. El monte de la Honfría nos saluda desde un claro del camino a nuestra derecha. Al llegar a una bifurcación del camino, allí donde este termina su pendiente, un pequeño sendero que surge justo enfrente custodiado por un panel de la Ruta de los Caminos Históricos de Entresierras, nos dirige hacia el valle despejado de las Ollas.
Avanzando con cuidado, observando los canchales, descubriremos a nuestra izquierda una nueva tumba excavada que nos habla del posible carácter sagrado del lugar y de la supuesta existencia de una ermita para el culto de la que no queda resto alguno. De frente, descendiendo entre los afloramientos de granito, el paraje donde el río Alagón ha ido modelando un fantástico conjunto escultórico natural, horadando en las lanchas de granito enormes huecos con forma de marmitas gigantes donde se remansa el agua a la solana, invitándonos al baño. Estas son las sorprendentes Ollas de la Sapa.
Regresaremos de nuevo al camino de donde surgió el pequeño sendero y tomaremos el desvío que nos sale a la derecha, junto al mencionado panel informativo. Toparemos con una portera de alambre de espino que hemos de atravesar cuidándonos de dejarla nuevamente cerrada para que no escape el ganado que pudiera estar en la zona y continuamos por la umbría de los robles melojos que nos llevará a Casas de Monleón en nuestra ruta circular. Haciendo caso omiso de los desvíos que nos salen a la derecha, avanzaremos pasando junto algunas manchas de pinos durante una ascensión prolongada que nos lleva a uno de los puntos más elevados de la ruta: dos nuevas porteras entre las cuales se conforma un apartadero donde no es difícil ver vacas recién paridas. Continuaremos siempre por el camino principal, obviando ahora, durante el descenso, la opción que surge a nuestra izquierda, y atravesaremos un paso canadiense entre muros de piedra y algo más allá el campo de fútbol de Casas de Monleón.
Este es un anejo de Endrinal que fue fundado en el siglo XVIII. La toponimia de su entorno nos recuerda las antiguas creencias mitológicas que abundaban en la zona, tanto de deidades vinculadas al mundo del agua - Santana, Donana, La Malena… - como las ruinas de la denominada Casa del cura donde vivía un ermitaño, mitad místico, mitad hechicero. Junto al arroyo de Santa María, se construyeron batanes donde se desapelmazaban los tejidos y también dos molinos.
Una vez aquí cabría la posibilidad de continuar por la pequeña carretera sin apenas tráfico que nos lleva a Endrinal, disfrutando de un bonito paisaje y comer en alguno de los afamados mesones que hay allí. Sin embargo, nosotros optaremos por atravesar Las Casas por la calle principal, pasando junto al lavadero donde con dos ruedas de molino han creado un recoleto merendero. Al alcanzar la parte alta del pueblo, divisamos a nuestra izquierda la antigua iglesia abandonada de San Fabián y San Sebastián, ahora en ruinas y tomada completamente por las higueras.
Esa es la dirección que debemos tomar, sin desviarnos de la pista de tierra por la que avanzamos, aunque haya otras opciones a ambos lados. Llegamos entonces al corral que ya vimos cuando entramos en la dehesa municipal, al comienzo de nuestra ruta. En seguida atisbaremos la silueta de la torre del homenaje dándonos la bienvenida y podremos tomar un refrigerio en el bar que hay extramuros, junto a la entrada principal de la villa.
Existe al menos una alternativa a esta ruta que hemos realizado, puesto que desde el mismo Monleón hay otra vía señalizada que discurre en la orilla opuesta del río y que podemos divisar si nos asomamos al mirador donde está emplazado el berraco. Así mismo, podemos acceder al pasaje de las Ollas de La Sapa desde la vecina localidad de El Tornadizo, en otro paseo memorable.

Servicios: bar, restaurante.
Otros puntos de interés: Torre y murallas defensivas, yacimiento arqueológico, marmitas de gigante.

Si quieres descargarte el libro 26 Paseos Inesperados por las Sierras de Salamanca:
https://adriss.net/wp-content/uploads/2022/04/Guia-26-PASEOS-INESPERADOS.pdf

Otras propuestas en la revista Sierras de Salamanca: https://www.sierrasdesalamanca.es/revistas-electronicas/

Y para saber más de las Sierras de Salamanca: https://www.sierrasdesalamanca.es/