Málaga ruta periurbana (VIII): Gibralfaro - 'Bosque Mágico' del arroyo Calvario - Monte Victoria.

Precioso paseo vespertino en el que comienzo por Sierra del Co hasta enganchar la subida al Parador por Calvo Sotelo. En primer lugar llego al mirador de Gibralfaro donde me detengo a sacar las primeras fotos de la caminata, con una panorámica privilegiada de la Malagueta y el Puerto. Después tomo el camino terrizo que bordea el castillo de Gibralfaro por su cara noroeste hasta llegar a la calle Mundo Nuevo, desde donde hay unas maravillosas vistas de la Catedral. Llego a la Alcazaba y paso por túnel hacía el vértice sureste, por el que asciendo bordeando nuevamente las murallas del Castillo, hasta encontrar un nuevo mirador, el de la Coracha, con vistas más amplias que el anterior, ya que también incluyen parte de Málaga Este bañada con la luz de la caída del sol. Continúo con la ronda por la muralla del Castillo hasta llegar a la cima de Gibralfaro, donde se encuentra la entrada principal y de allí me dirijo a un carril terrizo que me llevará a un nuevo mirador, el de la Costa, cuyas vistas están parcialmente tapadas por la espesa vegetación. En este alto había una torre de vigilancia cuyos restos todavía pueden verse.

Tomo un atajo para bajar a la calle Ferrándiz y buscar la calle Amargura, al final de la que empieza el "bosque mágico" del arroyo Calvario, llamado así por un vecino que ha "abierto" una galería de arte al aire libre con sus creaciones esculpidas en los tocones de eucaliptos; la verdad es que se trata de un maravilloso trabajo que bien merece una visita pausada. Este camino me lleva hasta la carretera del Seminario, donde me desvío hacia un sendero que la bordea, para pronto iniciar el ascenso al monte Victoria por uno de los muchos senderos que han ido dibujando en su ladera los senderistas y las bicicletas de montaña. Llego a la cima con la puesta de sol ya avanzada, de la que ya solo quedan los colores anaranjados en el horizonte; como siempre hay una buena cantidad de jóvenes, principalmente erasmus, haciendo botellón y disfrutando del maravilloso espectáculo que ofrece está atalaya privilegiada sobre Málaga. Me resta bajar por los Pinos del Limonar hasta llegar a casa.