Madeira: Levada do Moihno - Levada Nova 08112022

La ruta comienza en Lombada da Ponta do Sol y recorreremos dos levadas casi paralelas pero a diferente altitud, partimos por la de Moihno (la mas antigua) a menor altura y regresaremos por la Nova a cotas mas altas.
Iniciamos la ruta cerca de la capela do Espírito Santo (iglesia), comenzamos a andar por la ladera de un profundo barranco formado por la ribeira da Ponta do Sol y lo que mas llama la atención es la colonización del paisaje por el hombre. A pesar de la aparente inaccesibilidad del terreno destacan las tierras de cultivo bien cuidadas, proporcionando una vista agradable en la andadura.
Es imprescindible andar con paso firme y sin titubeos, hay muchas zonas de la ruta sin barandillas y no podemos permitirnos el lujo de caminar admirando el paisaje, si queremos mirar a lo lejos, hay que pararse.
Todo el trayecto se hace por un sendero que transcurre paralelo a la Levada y rodeados de agua y verde deleitando las miradas. Llegamos a Cabo da Lavada y contemplando una cascada hicimos una parada para vaciar un poco la mochila y rellenar de nutrientes el estomago.
Iniciamos el regreso subiendo una escalera para contemplar el origen de la cascada y un rato después enfilamos la Levada Nova en dirección a Ponta do Sol. Un rato de andadura sin casi barandillas y con algo de congoja y llegamos al punto mas espectacular del día, una zona excavada en la pared de rocas y con una cascada que nos salpicará un poco al tener que pasar por detrás de ella, la cascada de Levada Nova. Sin duda, es una visión fascinante que merece unos momentos de contemplación antes de continuar.
Continuamos por Levada Nova con todo el cuidado del mundo, hay que parar para poder contemplar las vistas que tenemos a nuestra derecha, pasamos por un pequeño túnel excavado en la montaña para seguir paralelo a la levada y las vistas continuan impactando. Muchas paradas y muchas miradas después llegamos de nuevo a Ponta do Sol donde nos ubicamos en una pequeña tienda/bar a admirar el arte del fondero en prepararnos la típica poncha que después degustamos.