Ludiente - Castillo del Buey Negro - Ventana de Ludiente - La Muela - Ludiente

Estupenda ruta desde Ludiente para ascender al Castillo del Buey Negro y recorrer la Muela. Importante recalcar que todo el tramo de la Muela no hay senda homologada , ( TRAMO CON MUCHO ARBUSTO Y ZARZALES - CAMPO A TRAVES ) (leer waypoint correspondiente), y convierte la ruta en difícil para personas no acostumbradas a determinadas prácticas en la montaña.

En la CV-194, a un km aprox antes de llegar a Ludiente, veremos un desvío a la derecha con dos paneles de color naranja, en uno pone polideportivo, y en el otro actividades deportivas, zona de baño, senderistas, etc, lo cogeremos.
Aunque para llegar a nuestro destino haya que recorrer un tramo de pista de tierra, vale la pena, nos deja al lado del Río Villahermosa junto a la Poza la Mula, y así nos evitamos tener que llegar hasta aquí atravesando Ludiente con el vehículo.

Empezaremos atravesando Ludiente, recorriendo sus tranquilas calles hasta llegar al otro lado del puente nuevo que salva el río Villahermosa. Desde aquí cogeremos el camino de la Fuente de la Higuera, una senda al principio algo exigente que nos hará entrar en calor, y que nos ha de llevar al Mas de Fuente la Higuera (masía abandonada y en ruinas que, hasta hace unas décadas estaba habitada).
Decir que este tramo es transitable actualmente, aunque no sea un camino/senda homologado, de hecho sube mayormente en alguna de sus partes por unos bancales, pero no tiene mayor problema en seguirse.

Después de un corto tramo por el Camí del Collado enlazaremos con la senda del Buey Negro hasta que lleguemos al collado donde encontraremos el corral de las Matildas, y que une con la pista y después senda de Argelita a la Muela, con la base de la Muela y que nos llevará en subida a la base del castillo.

Llegaremos hasta la parte alta y nos encontraremos los restos de la Masía del Buey Negro en plena reforma (en el siglo XIX, el lugar donde se hallaba el castillo es reocupado por dos masías para tareas agrícolas. Y para su construcción, se utilizaron restos del castillo).
Por lo tanto, del castillo sólo quedan restos de lienzos de muralla y una torre que defiende la entrada. Dada su ubicación se trató de una fortaleza de grandes dimensiones.

A mitad de muralla podremos observar un pasillo que da a una senda delimitada con unas piedras, es la senda de la Ventanica de Ludiente, al final de la misma llegaremos a la curiosa formación rocosa con forma de ventana que hace de estupendo mirador con vistas privilegiadas de Ludiente. Para el regreso desandaremos la senda hasta la muralla.

A partir de aquí, será opcional o volver al collado y seguir con la circular, o continuar el tramo aventurero que hemos realizado, siguiendo las trochas de las cabras y recorriendo los cortados de la Muela. Si se tiene experiencia e intuición tampoco es tan complicado, pero requiere también destrepar, trepar un poco y seguir los rastros de las sendas dejadas por las cabras.
El recorrido por la Muela no tiene desperdicio ya que las vistas son impagables, el omnipresente Penyagolosa, el cañón del río Villahermosa, parte del conjunto de la sierra del Cabezo, y Ludiente.
Para la bajada también seguiremos una pseudosenda, pero esta vez encontraremos hitos por el camino.

Una vez en el collado, a pocos metros veremos una senda a nuestra izquierda, la utilizada en el trail de Argelita. Esta nos llevará a una de las pistas que unen Argelita con Ludiente. Será el tramo menos atractivo del recorrido, unos cuatro km. El premio al final de todo este tramo es la senda del Camino del Rebollar; tramos de senda de herradura y mucha vegetación, hasta llegar a la Rambla de Sta Ana la cuál cruzaremos para llegar a la pasarela del río y llegar al punto de inicio y final del recorrido de hoy.

Pues una vez hecho hincapié en las dos opciones desde la Muela, decir que tanto se realice una como otra, el recorrido es muy recomendable. Es una variante distinta de subida al Castillo del Buey Negro y la Muela desde Ludiente. Lo único que desluce un poco es el regreso con la pista, pero aún así vale la pena.