Lineal Sendero río Verde, Cascada Árboles Petrificados, Barranco Chortales y Cascada de Funes (Sierra Almijara)
near Lentegí, Andalucía (España)
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Trail photos
Itinerary description
Ruta lineal (ida y vuelta por el mismo sitio), que recorre el sendero de la cabecera de río Verde, pasando bajo la Cascadad e los Árboles Petrificados y con un corto, pero muy entretenido (y totalmente acuático), remonte del barranco de Chortales hasta alcanzar la Cascada de Funes.
La idea era seguir por la verea que baja hasta la cascada doble del barranco de río Verde, pero el calor que amenaza hoy nos hace desistir, y una vez tocamos agua, decidimos recortar la ruta y quedarnos en remojo un buen rato. La poza a medio camino de la chorrera es espectacular, con un salto de unos 6 mts.
Primero, para llegar hasta el aparcamiento junto a la entrada del sendero, desde Granda y por la autovía de Motril, nos desviamos hacia la carretera que baja hacia Almuñecar (pasado el puerto del Suspiro del Moro). Carretera en muy buen estado que nos adentra en los límites del Parque Natural de las Sierras de Alhama, Tejeda y Almijara. Una vez pasamos el mesón de los Prados (a la vuelta toca cervesita fresca), la carretera pasa a ser de montaña, pegada a la ladera y con la cabecera del barranco de Chortales bajo el quitamiedos. Pasamos un pequeño túnel excavado en la roca y cuando la carretera discurre por el collado que separa las dos vertientes tenemos a nuestra izquierda una buena zona de aparcamiento. Desde aquí, si seguimos la cerretera, tendremos el cartel de inicio del sendero río Verde a unos 50 mts a la derecha.
Comenzamos el sendero, sinuoso y con un continuo, pero leve, sube y baja. Con este paseo alcanzamos el mirador natural antes de una fuerte bajada. Desde aquí tenemos bajo nosotros la rambla y cabecera del Chortales y a nuestra izquierda se abre la entrada al barranco de río Verde. Al frente domina el pico Lopera (con su caseta en la cima), seguido de Sierra Blanquilla, el pico Cabañeros (próxima expedición por la zona) y culminando en la mole pelada del Navachica.
Ahora comenzamos a bajar hacia el fondo del barranco, primero el sendero coge inclinación y se encajona hasta encontrarnos el último tramo formado por grandes escalones de piedra. Esta bajada nos planta justo en la caída de la Cascada de los Árboles Petrificados. Primero visitamos la pequeña cueva y sus extrañas formaciones situada tras la cascada. Para ello cogemos un pequeño sendero a la derecha de la cascada, según la miramos, y descubrimos un pequeño hueco que da paso a la cueva. Desandamos y nos colocamos bajo la cascada, en estas fechas con muy poca agua, estando la poza bastante menguada.
Dejamos atrás la cascada y por un senderillo enlazamos con la pista de tierra que también baja desde la carretera (por la que bajan los barranquistas). Seguimos avanzando por a pista, dejamos atrás la agotada Fuente de las Cabrerizas y el carril que sube hacia el embalse de Funes. Desde este punto está permitido el descenso del barranco Chortales y enlazar con río Verde, eso sí, con la PREVIA AUTORIZACIÓN DEL PARQUE. Aunque comprobamos que lleva poza agua a esta altura, hasta que no vierta en el cauce la chorrera de Funes. Por la pista, luego sendero, alcanzamos el punto donde cruza el río, punto de partida del barranco integral de río Verde, por lo que en fin de semana, lo normal será encontrarnos a grupos de barranquistas que inician el recorrido.
Para seguir la verea hacia la zona baja de río Verde, sólo tenemos que cruzar el río y subir por el sendero que gira a la izquierda y que tenemos en la ladera frente a nosotros.
Opción de partida, pero que aparcamos por el calor que hace ya a estas horas de la mañana.
Aquí decidimos meter los pies en remojo y remontar el barranco de Chortales hasta la chorrera de Funes (no es necesario equipo). Avance muy entretenido, sin abandonar el lecho del barranco, aunque perece haber un pequeño sendero que sube estos primeros metros. En pocos metros nos encontramos con la junta del barranco de Chortales (derecha) y Madroñales (izquierda). Justo cuando retomamos la marcha nos encontramos una espectacular y solitaria poza con su cascadita (con pinta "salvaje"). A la derecha, tras una pequeña trepada, tenemos un salto de unos 5 metros, lo que nos llevó un rato movernos de aquí, entre saltos y baños. Con esto compensa gratamente el viaje de hoy.
Decidimos hacer "un esfuerzo" y abandonar este pequeño paraíso. Para sobrepasar la cascada, hemos subido y rodeado la gran roca desde la que hemos saltado, que sin dificultad alguna, nos devuelve al agua justo sobre la cascada.
Seguimos el avance por el agua hasta que se nos aparece la chorrera de Funes. De momento nos situamos bajo la caída de la chorrera, lo que nos lleva otro buen rato de baño, fotos y lugar perfecto para la parada técnica.
Bastante satisfechos del buen rato acuático, y aunque nos duela, tenemos que desandar el barranco, por donde hemos remontado y volver enlace con el sendero de río Verde. Ya nos queda la ardua y calurosa subida hasta el punto de partida. Con un poco menos de calor hubiera sido agradable, pero la inusual ola de calor que nos invade a primeros de septiembre hace la subida algo tortuosa....pero totalmente recomendable.
Nos vemos en las montañas.
La idea era seguir por la verea que baja hasta la cascada doble del barranco de río Verde, pero el calor que amenaza hoy nos hace desistir, y una vez tocamos agua, decidimos recortar la ruta y quedarnos en remojo un buen rato. La poza a medio camino de la chorrera es espectacular, con un salto de unos 6 mts.
Primero, para llegar hasta el aparcamiento junto a la entrada del sendero, desde Granda y por la autovía de Motril, nos desviamos hacia la carretera que baja hacia Almuñecar (pasado el puerto del Suspiro del Moro). Carretera en muy buen estado que nos adentra en los límites del Parque Natural de las Sierras de Alhama, Tejeda y Almijara. Una vez pasamos el mesón de los Prados (a la vuelta toca cervesita fresca), la carretera pasa a ser de montaña, pegada a la ladera y con la cabecera del barranco de Chortales bajo el quitamiedos. Pasamos un pequeño túnel excavado en la roca y cuando la carretera discurre por el collado que separa las dos vertientes tenemos a nuestra izquierda una buena zona de aparcamiento. Desde aquí, si seguimos la cerretera, tendremos el cartel de inicio del sendero río Verde a unos 50 mts a la derecha.
Comenzamos el sendero, sinuoso y con un continuo, pero leve, sube y baja. Con este paseo alcanzamos el mirador natural antes de una fuerte bajada. Desde aquí tenemos bajo nosotros la rambla y cabecera del Chortales y a nuestra izquierda se abre la entrada al barranco de río Verde. Al frente domina el pico Lopera (con su caseta en la cima), seguido de Sierra Blanquilla, el pico Cabañeros (próxima expedición por la zona) y culminando en la mole pelada del Navachica.
Ahora comenzamos a bajar hacia el fondo del barranco, primero el sendero coge inclinación y se encajona hasta encontrarnos el último tramo formado por grandes escalones de piedra. Esta bajada nos planta justo en la caída de la Cascada de los Árboles Petrificados. Primero visitamos la pequeña cueva y sus extrañas formaciones situada tras la cascada. Para ello cogemos un pequeño sendero a la derecha de la cascada, según la miramos, y descubrimos un pequeño hueco que da paso a la cueva. Desandamos y nos colocamos bajo la cascada, en estas fechas con muy poca agua, estando la poza bastante menguada.
Dejamos atrás la cascada y por un senderillo enlazamos con la pista de tierra que también baja desde la carretera (por la que bajan los barranquistas). Seguimos avanzando por a pista, dejamos atrás la agotada Fuente de las Cabrerizas y el carril que sube hacia el embalse de Funes. Desde este punto está permitido el descenso del barranco Chortales y enlazar con río Verde, eso sí, con la PREVIA AUTORIZACIÓN DEL PARQUE. Aunque comprobamos que lleva poza agua a esta altura, hasta que no vierta en el cauce la chorrera de Funes. Por la pista, luego sendero, alcanzamos el punto donde cruza el río, punto de partida del barranco integral de río Verde, por lo que en fin de semana, lo normal será encontrarnos a grupos de barranquistas que inician el recorrido.
Para seguir la verea hacia la zona baja de río Verde, sólo tenemos que cruzar el río y subir por el sendero que gira a la izquierda y que tenemos en la ladera frente a nosotros.
Opción de partida, pero que aparcamos por el calor que hace ya a estas horas de la mañana.
Aquí decidimos meter los pies en remojo y remontar el barranco de Chortales hasta la chorrera de Funes (no es necesario equipo). Avance muy entretenido, sin abandonar el lecho del barranco, aunque perece haber un pequeño sendero que sube estos primeros metros. En pocos metros nos encontramos con la junta del barranco de Chortales (derecha) y Madroñales (izquierda). Justo cuando retomamos la marcha nos encontramos una espectacular y solitaria poza con su cascadita (con pinta "salvaje"). A la derecha, tras una pequeña trepada, tenemos un salto de unos 5 metros, lo que nos llevó un rato movernos de aquí, entre saltos y baños. Con esto compensa gratamente el viaje de hoy.
Decidimos hacer "un esfuerzo" y abandonar este pequeño paraíso. Para sobrepasar la cascada, hemos subido y rodeado la gran roca desde la que hemos saltado, que sin dificultad alguna, nos devuelve al agua justo sobre la cascada.
Seguimos el avance por el agua hasta que se nos aparece la chorrera de Funes. De momento nos situamos bajo la caída de la chorrera, lo que nos lleva otro buen rato de baño, fotos y lugar perfecto para la parada técnica.
Bastante satisfechos del buen rato acuático, y aunque nos duela, tenemos que desandar el barranco, por donde hemos remontado y volver enlace con el sendero de río Verde. Ya nos queda la ardua y calurosa subida hasta el punto de partida. Con un poco menos de calor hubiera sido agradable, pero la inusual ola de calor que nos invade a primeros de septiembre hace la subida algo tortuosa....pero totalmente recomendable.
Nos vemos en las montañas.
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