LAS VEGUILLAS - ESPUMAREDAS - LAS HUELGAS - COLLADO SALIDO - CANALEJAS - CENTENARES - CORTIJO CAYETANO

RUTA SIN DIFICULTADES RESEÑABLES.

Ruta que discurre por algunas de las aldeas expropiadas de la zona de Pontones. Comenzamos caminata en la barrera que hay debajo de Las Veguillas para descender cómodamente hasta las Espumaredas de Arriba. Tras visitar las ruinas, seguimos hacia las Espumaredas de Abajo. Ahora, ya por senda bajamos hasta las Huelgas disfrutando del paseo y de los tremendos paredones de los miradores que llegan hasta Juan León. También vemos varios ciervos disfrutando de su comida en las lomas sobre las aldeas.

Al llegar a las Huelgas, vadeamos el arroyo para subir por el antiguo camino de herradura hasta Collado Salido, donde pronto enlazaremos con la pista que nos lleva a Las Canalejas. Primero visitamos su cementerio, restaurado y cuidado por los descendientes de las gentes que vivieron allí antaño. Después nos acercamos por las ruinas hasta la iglesia, pasando por el precioso lavadero, también limpio y acondicionada la zona para poder sentarse y descansar.

De vuelta hacia arriba, cogemos el sendero que sale desde el cementerio y que nos va a llevar de forma directa a los Centenares. Si bonito es el enclave de Las Canalejas, el de Los Centenares, bajo las paredes de Juan León y la Umbría de Parra es algo espectacular, se mire en la dirección que se mire. Todo alrededor del pueblo es un manto de hierba y flores rodeado de montañas y rematado por un cielo azul de película. Visitamos también el hermoso lavadero que al igual que en Las Canalejas, lleva un caño generoso. Tras tomar un refrigerio en la mesa junto a la última casa expropiada bajo la sombra de un nogal, nos dirigimos por el Camino de la Tiná bajo los Poyos de las Lindes hacia el Cortijo de Cayetano, y desde este, tras vadear el arroyo por la Cerrada de las Huelgas hasta la misma aldea, donde completamos círculo y tomamos camino de ascenso hacia el inicio.

Preciosa ruta que disfrutamos con unas temperaturas óptimas y un entorno en plena eclosión de la primavera. Casi 18 km y medio y 800 metros de desnivel para una ruta sencilla, de puro disfrute.