Las Correderas - Castro Ferral - Huerta de Juan Santos

Recorrido realizado en grupo numeroso con motivo de la jornada del programa Paseando por los Senderos.

Ruta que disfrutamos mucho por su enorme belleza, tanto por las vistas como por el paisaje de ribera. Si bien es verdad que el tiempo no acompaño mucho. Hizo lluvia, mucho frio, algo de aire y hasta nos nevó en las cotas más altas de la ruta. Debido a esto no pude marcar algunos puntos interesantes de la ruta.

Este recorrido seguramente lo encontraréis igual o similar en otros usuarios de wikiloc.

Partimos de las antiguas casas de Las Correderas, que tienen una pequeña zona para aparcar los coches. Cruzamos una puerta y tomamos la pista forestal a la derecha que nos sube hasta el cerro de Las Correderas, casi 6 km. en subida suave durante practicamente todo el recorrido.
Llegamos al cruce de varios caminos y cogemos el de la izquierda que es un cortafuegos que nos llevará hasta el antiguo castillo de Castro Ferral. Dejamos las ruinas y continuamos por el cortafuegos ya en bajada. Llegamos hasta otro cruce de caminos, continuando por el cortafuegos, que es el camino del puerto del muradal y que ahora nos lleva junto al collado de las matanzas y el cerro de las calaveras. Una vez llegado a este cerro, dejamos el camino del muradal para coger otro camino a la izquierda, para posteriormente coger otro cortafuegos, y que nos llevara a un cruce de caminos, todo ello en bajada.
Cuando llegamos a este cruce de caminos, cogemos el que hay a la izquierda, y que nos llevará en bajada hasta las ruinas de la Huerta de Juan Santos, lugar que en su día estuvo habitado con huertas aprovechando la recogida de aguas de varios arroyos que se unen en ese lugar, destacando un enorme horno de leña junto a la casa que ha sido reformado.
Dejamos este lugar para ir en sentido este yendo paralelos por el arroyo del vivero, que al haber llovido algo en los días previos llevaba algo de agua, pero que no supuso ningún problema ya que lo tuvimos que ir cruzando en algunas ocasiones. Durante este trayecto del recorrido, encontramos algunas variedades de setas muy hermosas.
Una vez que el arroyo cambia de sentido, tenemos que ir yendo paralelos pero cada vez algo más alejados, ya que su tránsito se hacía más complejo, cogiendo algunas sendas poco definidas marcadas seguramente por el paso de animales.
Sin abandonar el arroyo, encontramos un vallado abandonado y caido, fruto seguramente de algún proyecto de conservacion o reforestación. Lo traspasamos y continuamos hasta que nos encontramos la autovía, habiendo un cruce con un cortafuegos. Giramos a la izquierda tomando ese cortafuegos que nos llevará directamente hasta la puerta de entrada junto a las casas de las Correderas, finalizando nuestra ruta.

Recordar que este recorrido se encuentra dentro de un parque natural, por lo que no se puede transitar por cualquier lugar del mismo, especialmente las zonas de ribera, salvo que hayas solicitado permiso.