La Presa del Gasco (Canal de Guadarrama)

💜💚 En época de lluvia suele haber charcos y barrizales. Evitar en los meses de verano y otoño porque es un horno.

Esta es una de esas rutas que va de menos a más, creciendo en espectacularidad, de una belleza paisajística que sorprende.

Para llegar a la urbanización de Las Matas, lugar desde el que parte la ruta, tomaremos la A6, carretera de A Coruña hasta la salida 26 Las Matas/Los Peñascales. Tomar la calle Monte Abantos, donde ya podemos dejar el coche antes de llegar a la siguiente rotonda que es la entrada al Sendero Presa del Gasco.

El camino por el que avanzamos tiene varias alturas, cualquiera de ellas es válida. A la ida elegí la más alta y menos transitada (sendero que desemboca más adelante en la pista ancha y más baja, y por la que a la vuelta decidí tomar). Esta pista está completada con información de cada uno de los árboles y arbustos que nos iremos encontrando y si miramos bien, hasta un manojo de espárragos verdes te puedes llevar a casa para la cena.

El camino empieza a tomar altura (ligera) y acompañados de vaya metálica a nuestra izquierda primero y a derecha después, nos enlaza con el Camino del Canal del Gasco. Sabemos que es el canal porque el sendero por el que circulamos está en altura y con forma de U invertida. A partir de aquí empieza la magia y las sorpresas que nos irá regalando lo que nos rodea. Pequeñas chorreras con un hilillo de agua, puentes de madera, vegetación que te transporta a otras latitudes del planeta, y el encanto del paraje a la altura del arroyo de la Isabela. Con el remate final de la Presa del Gasco. ESPECTACULAR.

Esta presa de 150 metros de largo por 70 de alto tiene su historia, y por su aspecto no hace falta decir que no llegó a buen puerto.

El ingeniero Carlos Lemaur diseñó esta obra faraónica que empezó a levantarse en el año 1785. Se pretendía hacer un canal navegable de 771 km y que partiría de esta presa a la altura de Torrelodones y que enlazaría las cuencas de los ríos Guadarrama, Manzanares, Jarama, Tajo, Riansares, Záncara, Jabalón, Guarrizas, Guadalén, Guadalimar y Guadalquivir. En 1799 una tormenta dio al traste con la presa desmoronándose parte de ella.

Una vez salgamos del sendero del canal que termina a la altura del paraje donde el arroyo de la Isabela hace presencia, arribaremos a un cruce de caminos (nos encontramos una escalera de piedra de tres peldaños solitaria) iremos a la izquierda y en descenso e inmediatamente llanea (aquí sale otro sendero que sigue bajando pero no lo tomamos), nosotros seguimos a la derecha. En breve estaremos divisando la estructura y caminando por encima de ella. Tanto para el que tenga vértigo, como para el que no, es todo un chute de adrenalina.

Vuelta por el mismo camino.