Juanar - Collados de Verdegraja, de la Viborilla y del Pozuelo - Puerto de Pula - Cerro Blanquicarejo.

Agradable paseo por la sierra Blanca en el que no pude completar el recorrido que había planificado y tuve que optar por el plan B. Salgo del aparcamiento del Juanar por el sendero que va paralelo al río, mucho más interesante que el carril "oficial" a la Concha; pronto llego al GR 243, sendero de Ojén a Istan, justo en su intersección hacia la Concha y subo por él hasta el puerto de Verdegraja o de Juan Graja, disfrutando de la hermosas vistas que se abren a la Cruz del Juanar y a los Tajos Negros. En el puerto cambio de ladera y se muestran el cerro de la Fulaneja y a lo lejos la sierra de las Nieves; pronto tomo un desvío por el que bajo hasta el llano del Arenal, que en su tiempo fue un gran campo de cereal y ahora está tomado por una espesa vegetación que impide el acceso a su interior. De hecho, me volví a detener para ver si encontraba una zona un poco más limpia para acceder a la falda de la Fulaneja, pero nuevamente sin resultado positivo.

Esta parte del Llano está cerrado por unas impresionantes paredes verticales que, al estar bastante erosionadas, permitieron labrar una empinada senda que sube hasta el puerto de la Viborilla, donde vuelvo a cambiar de ladera para entrar en la zona de influencia del cerro Gurapalo, al que pretendía ascender. Sigo hasta el puerto del Acebuche, donde me incorporo a la "ruta del Pozuelo" que circunvala al Gurapalo, pasando la cabecera del barranco del Infierno, a la que sigue la del barranco del Alta, encajonado contra la mole del picacho del Castillejo; una vez cruzado el breve pinsapar del Pozuelo llegamos al collado homónimo, desde donde pretendía emprender el ascenso al Gurapalo. Había visto varios tracks y todos atacan este cerro desde aquí, pero encontré una vegetación alta que se cerraba cada vez más, lo que me hizo desistir casi de inmediato. ¿Qué hacer ahora?, desde vuelta al collado podía dirigirme hacía el Castillejo, pero había estado allí hace pocas semanas, así que decidí seguir por la "ruta del Pozuelo" y continuar al cerro Nicolás.

De esta forma, se cruza la carretera y se circunvala mediante un amplio giro el cerro Blanquicarejo, hasta llegar al puerto de Pula, donde conecto con la "ruta de los Tres Picos" que sube desde Ojen (esta ruta es interesantísima, pasa por las cimas del Blanquicarejo, Tajos Negros y Cruz del Juanar, para después bajar por la senda de Mario Zumaquero y volver a Ojén). Aquí comienza un duro ascenso hacía la cruz que corona el cerro Blanquicarejo, donde también hay un cartel que lo nombra como el "mirador del cerro Nicolás". Efectivamente, las vistas son impresionantes, abarcan desde la Canucha al norte hasta el mar de Alborán al sur, de la sierra Alpujata al este hasta los picos de sierra Blanca al oeste, donde destaca un impactante primer plano del cerro Nicolás, que desde aquí aparenta ser un cono volcánico truncado. Tras contemplar pausadamente este bellísimo entorno, bajo directamente al refugio de Juanar a hidratarme con unas cervezas bien frías.