Islas Eolias: Stromboli, circular a la Sciara del Fuoco hasta cota 300

Stromboli será la isla emblemática y más conocida del Archipiélago de las Islas Eolias o de Lípari, por una parte por albergar uno de los volcanes más activos del mundo y por otra parte por la película "Stromboli Terra di Dio" de Roberto Rossellini que a más de medio siglo después de su rodaje en el 1949 mantiene su atractivo y popularidad. Los dos aspectos despiertan la curiosidad algo morbosa de los muchos visitantes.

Las erupciones importantes del 2019 destruyeron parte de los accesos al margen del cráter de más de 900 m de altura. Hoy está prohibido traspasar la cota de 400 m en excursiones guiadas y la de 300 m para excursiones libres, por lo cual ahora tampoco se puede ir andando del pueblo de Stromboli en el Este de la isla a Ginostra en el Oeste.
Se dice que por una parte las autoridades quieren proteger a las empresas de los guías que forman un cierto factor económico para la isla.
Por otra parte la medida parece justificada porque las erupciones casi continuas son incontrolables, sea en cuanto al momento de ocurrir, sea en cuanto al alcance de lava y piedras arrojadas por el volcán. No hay un esquema. Una erupción puede seguir a otra después de minutos o de horas. Ya ha habido por lo menos un accidente mortal porque excursionistas pensaban llegar al margen del crater poniéndose en movimiento desde una cierta altura inmediatamente después de una erupción, y fueron alcanzados por el material arrojado por el volcán.

Por las mencionadas restricciones practicamente queda solo el recorrido de esta excursión para los visitantes interesados en acercarse al volcán. El trayecto lo recorrimos de tal manera que cogimos un taxi desde el embarcadero hasta el final del poblado de Piscità encima de Punta Restuccia. Por la Mulattiera Salvatore Rosa llegamos al Observatorio Geofísico con el restaurante (actualmente cerrado). Desde aquí subimos al mirador a cota 290 - 300, omitiendo el mirador a cota 170.

Desde el mirador hay buenas vistas hacia el cráter y a la rampa de la Sciara del Fuoco. En los momentos de las erupciones se puede observar muy bien, como salen las piedras volando del cráter y bajan rodando hasta caer en el agua del mar. Durante la subida, ya antes de tener vista hacia la cima, nos acompañó el impresionante rugido del volcán.

Para la vuelta cogimos el sendero por la falda del monte para entrar en el pueblo desde ESE hacia la iglesia de San Vincenzo para dirigirnos al punto de partida en el muelle del embarcadero.
Al coger el taxi hubo un pequeño malentendido que el chofer pensaba que queríamos hacer el recorrido al revés. Por esto distancia, desnivel acumulado y tiempo son un poco más de lo que serían sin esta falta. El indice ibp sería alrededor de 50, lo que equivale a poco esfuerzo.

La ruta parece tecnicamente fácil. Tampoco la orientación presenta dificultades. Hasta hay señalización, no demasiado generosa, pero en total suficiente. Aparte de los peligros específicos del volcán, que son casi idénticos en toda la isla, los peligros del recorrido son caídas por resbalones y tropezones, como en qualquier ruta de montaña. El deterioro del sendero por la falda del monte a consecuencia del incendio del mayo 2022 casi no se percibe más. La vegetación sigue recuperándose, y daños en el camino parecen reparados.