Ermita de San Felices - Cerro de la Villa- Monasterio de Santa María de Herrera

Esta es una sencilla ruta por los alrededores de Haro. Partimos de la ermita de San Felices de Bilibio y pasando por el Cerro de la Villa llegamos hasta el monasterio camaldulense de Santa María de Herrera y desde allí, por el GR-99 hasta la ermita de nuevo.
Comenzamos la ruta en la zona de picnic de la ermita de San Felices, que se encuentra en lo alto de la peña. Para ascender a ella hay dos formas, por los tramos de escaleras o por la rampa. Nosotros optamos por subir por las escaleras y bajar por la rampa para continuar nuestra ruta. El ascenso no es difícil y según subimos la panorámica se va ampliamos. A un lado toda el valle del Ebro con los viñedos y a otro una gran cantera entre los riscos de Bilibio.
Después de descender por la rampa cruzamos la autopista por un paso superior y desde allí ascender al cerro de la Villa. En su cima había un pequeño monumento con dos antiguos nacimientos navideños y una cafetera. Como el día de la caminata había algo de neblina las fotos de los riscos y peñas fueron muy llamativas.
Desde aquí continuamos por una pista hasta una desviación que nos condujo a través del Bosque de las Campas y el del Rellano hasta el monasterio de Santa María de Herrera. En sus inicios. Fue fundado por Alfonso VIII como monasterio cisterciense, pero actualmente es un cenobio camaldulense.
Tomamos el GR-99 y nos paramos un momento en los restos de las salinas de Herrera, de donde los lugareños obtenían sal.
Desde allí tomamos el camino de vuelta hacia San Felices y terminamos la ruta en la zona de picnic.
Se trata de una ruta sencilla, que discurre casi en su totalidad por pistas y caminos bien señalizados. No tiene grandes desniveles y debido a su longitud se puede hacer en una mañana y volver a comer a casa con toda la familia.