Embalse de La Encantada (Las Jaras)

Cómoda ruta, que se inicia en la avenida de Juan Cano de la urbanización de Las Jaras. Desde aquí voy bordeando por las calles de la urbanización el embalse de La Encantada, hasta llegar al puente junto a la estación depuradora. Cruzado el mismo, comienza un sendero (que luego sigue en dirección sur) rodeado de cantuesos, jaras y jaguarzos, en flor en esta época del año, que, junto al amarillo de la genista, dan un espectacular colorido al campo, además del aroma de los aceites vegetales.

La especie que más abunda a lo largo de la senda es la jara pringosa o pegajosa (como se puede comprobar tocando su tallo, rico en ládano, como indica su epíteto latino “ladanifer”=que tiene ládano). Antiguamente, el ládano se recogía peinando las barbas y el pelaje de las cabras y ovejas que pastaban en los arbustos de estos cistus y esa resina -obtenida hirviendo hojas y ramas- se utilizaba como ingrediente para el incienso, y medicinalmente como jarabe para resfriados, tos, problemas menstruales y reumatismo. Hoy se produce principalmente para perfumería, muy
valorado debido a su semejanza con el ámbar gris (prohibido en muchos países porque proviene del cachalote, especie en peligro de extinción), con un olor dulce, que recuerda al cuero, a maderas y al almizcle seco (se utiliza como una alternativa al perfume del ciervo almizclero, uno de los productos animales más caros del mundo). Incluso el extracto de ládano también se emplea como aditivo al aroma del líquido del cigarrillo electrónico.

La senda termina en un camino, en Altopaso (su casa matriz es ahora un Centro de Desarrollo Personal y una Granja Escuela de Educación Ambiental, que se llama L'Aljara); hay que seguir en sentido opuesto, a la izquierda, por el camino de El Chaparral, que lleva entre parcelas a la carretera. Antes se puede ver la cortijada abandonada del antiguo lagar del Naranjo; el cortijo data del año 1927.

Tras cruzar la carretera CO-3405, hay que subir unos metros para enlazar con el GR-48, que sigo de vuelta en dirección a Las Jaras, junto a la carretera, pero apenas unos 200 metros; entonces vuelvo a cruzar la CO-3405, para continuar por otra senda también cuajada de vegetación mediterránea, que llega a la urbanización junto al restaurante Las Jaras-Casa Pepe, cerca del punto de inicio de la ruta. Recomiendo encarecidamente realizarla en estas fechas del año.

PD: brindo esta ruta a mi más reciente seguidor, Adolfito H.F.