El Escorial- La Herrería y la Silla de Felipe II

Volvemos a realizar un por el entorno de El Escorial para dar una vuelta por La Herrería y sus alrededores y visitar, como no, la Silla de Felipe II. Aparcamos en las calles de la localidad y atravesamos las vías del tren por un túnel bajo las mismas. Enseguida nos adentramos por la puerta Este en el Parque y Jardines de la Casita del Príncipe. Bordeamos la casita y seguimos avanzando por el Paseo de los Nogales. Atravesamos el parque y llegamos al muro del otro extremo y nos encontramos con que la puerta está cerrada. Nos toca pues ir dirección norte durante unos quinientos metros hasta llegar a otra puerta en la esquina superior de la valla. Atravesamos la puerta y tomamos dirección sur por una pista asfaltada que nos adentra en el Bosque de la Herrería. A nuestra derecha vemos la entrada al Club de Golf de la Herrería. 

Seguimos avanzando hasta que llegamos a la M-505, justo después de encontrarnos con el Arroyo del Batán. Atravesamos la carretera por el paso de cebra. Al otro lado, tomamos la pista de la derecha. Pasamos por la Ermita de la Virgen de Gracia. La pista termina justo antes de la entrada a la finca de El Castañar. Unos cincuenta metros antes, nosotros tomamos un pequeño sendero que sale a la derecha de la pista. Ahora nos encontramos solos y el entorno es totalmente bucólico. 

Sorpresivamente, nos encontramos con una inesperada subida que nos lleva a un claro desde el que podemos disfrutar de la primera panorámica del día. Después, continuamos ascendiendo unos pocos metros hasta que salimos a una pista asfaltada. Giramos a la izquierda y seguimos dirección sur. El camino llega hasta el muro de El Castañar. La pista hace una curva justo en el lugar donde se encuentra la Fuente de la Reina. 

Un poco más allá nos encontramos con una curiosa aglomeración de rocas: la Cueva del Oso. Un centenar de metros más allá nos encontramos con orto conglomerado de rocas que forman un hermoso mirador. 

Ya no nos queda nada para llegar al Canto Gordo, en donde se halla la famosa Silla de Felipe II. Antes de llegar a la misma, hacemos una parada en el chiringuito que hay justo al lado. Iba a ser una pequeña parada, que al final se convierte en un descanso de casi una hora. Nos viene muy bien para refrescarnos y también para vigilar cuando la Silla se queda sin gente. Aprovechamos para subir a la Silla de Felipe II cuando no hay nadie y podemos hacernos unas fotos en solitario. 

Descendemos de las rocas hasta la zona de aparcamiento al lado de la carretera por un sendero GR. Desde la carretera, lo único que tenemos que hacer es desandar lo andado previamente, con la única excepción de que al entrar en el parque vamos directos por la parte norte hasta que llegamos a la puerta este. Volvemos a atravesar por debajo de las vías hasta llegar de nuevo al coche. 

Bonito paseo, a evitar en época calurosa.  

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Época recomendada: primavera, otoño e invierno.