El Almendrón

Esta ruta reafirma mi convicción, por experiencia propia, de que no hace falta ir a Pirineos para alcanzar cotas de nivel semejantes. Sólo con recorrer la mágica sierra de Málaga se pueden conseguir desniveles acumulados iguales o incluso superiores a Pirineos.

En algo más de 5 kilómetros, esta ruta, supera los 1.200 metros de desnivel, con porcentajes que alcanzan, en algunos tramos, el 60 %. Y para comenzar tomamos el carril que sale desde la misma entrada de las Cuevas de Nerja (que por cierto no sé por qué se llaman "las Cuevas de Nerja" cuando están en Maro...). Y avanzamos por este carril que recorre todo el Barranco de la Coladilla. Superamos el área recreativa de El Pinarillo y continuamos hasta llegar a la misma confluencia de los barrancos de Coladilla, Cazadores y de las Higueras. En esta curva que forma el carril a la izquierda dejamos el vehículo y comenzamos nuestra aventura.

Recorremos este camino con dirección de la Fuente del Esparto, pero apenas unos 240 metros más adelante, hay un cruce que tomamos a la derecha para seguir ascendiendo por este camino con dirección del Barranco de Cazadores. Pero 340 metros más adelante aparece otro cruce que tomaremos a nuestra izquierda para seguir subiendo otros 940 metros más. Y aquí sí hay que estar muy atentos porque comienza el sendero de Los Galgos, aunque en realidad se llama la Vereda de las Minas y Cómpeta. Pero todo el mundo lo conoce como el sendero de Los Galgos.

A partir de aquí no volveremos a caminar por ninguna pista, pues todo el recorrido discurre por senderos que dejan ver paisajes y barrancos profundos que nos dejan sorprendidos. El sendero de Los Galgos se empina abruptamente y comenzamos a superar altura con unos porcentajes dignos de la alta montaña. No nos dará ni un solo respiro hasta llegar a un collado que nos deja ver todo el Barranco de Cazadores. La vegetación mediterránea, llena de arbustos, romeros, enebros y pinos, nos acompañan hasta la misma falda del Almendrón.

Desde este collado el sendero continúa a nuestra izquierda sin dejar de subir en ningún momento hasta llegar a la cuerda que le da forma a la cordillera entre el Collado de los Apretaderos y los Tajos del Sol, donde se encuentra nuestro destino "El Almendrón". Esta inmensa mole le da forma por la izquierda al río Chillar y por la derecha al Barranco de Cazadores. Los valles que se forman son inmensos y profundos, lo que hace que estas cumbres se eleven hacia el cielo en muy pocos kilómetros. Pero nuestro esfuerzo se ve recompensado cuando aparecen ante nosotros El Almendrón junto con su hermano gemelo (al que cariñosamente mi compañero Andrés le ha bautizado como "La Pipa").

Quiero puntualizar aquí que para poder contemplar esta imagen, la subida al Almendrón, tiene que hacerse por el sendero de Los Galgos. Si decidís subir por el Barranco de Cazadores nunca veréis esta panorámica. Las fotografías hablan por sí solas. Después de superar "La Pipa" nos dirigimos a la base del Almendrón, esta parte es bastante suave y el sendero está muy bien marcado. Pero cuando llegamos a la base del Almendrón el terreno cambia bruscamente. Si he calificado la ruta como "difícil", desde aquí hasta hacer cumbre tengo que calificarla como "solo expertos". La cresta que hay que superar hasta llegar a la cima ensombrece al mismísimo Paso de Mahoma en el Aneto. Lo pasos que hay que superar están muy expuestos. Son filos de roca limpia tan estrechos que encogen el corazón del más osado. Porque a cada lado se precipitan saltos de varios cientos de metros en una caída casi vertical.

Tuvimos la oportunidad de ver cómo algunos montañeros se daban la vuelta. Pero nosotros seguimos y entendimos, más adelante, la razón de porqué la mayoría de la gente se queda en las primeras rocas del Almendrón. Si no se está acostumbrado a trepar grandes rocas, si nunca se han hecho aristas o espolones de alta montaña, es mejor desistir de hacer cumbre aquí o lo pasaréis francamente mal.

Después de tan excitante experiencia descendemos hasta la base donde el sendero continúa con dirección del Barranco de Cazadores. El descenso es fuerte y pronunciado hasta llegar al mismo barranco. Y si creíamos que la ruta, prácticamente, había terminado nos encontramos con el sorprendente y maravilloso Barranco de Cazadores. Un sitio imponente y sobrecogedor donde el sendero serpentea para superar caídas del barranco que (con agua) debe ser impresionante. Y estoy convencido de que este barranco es mucho más hermoso si se baja que si se sube, por eso vuelvo a insistir en que esta ruta debe hacerse desde el sendero de Los Galgos y bajar por el Barranco de Cazadores.

Cuando llegamos al coche teníamos la sensación de haber recorrido una distancia de más de 20 km. Fue extenuante, no solo por el esfuerzo, sino por la carga de emociones que nos había producido.