Día 1, excursión por las montañas del Sahgro, en Marruecos.

2018-01-25.
Comenzamos a caminar el la guite (un albergue) que se encontraba en Taglite.

Primeramente recorrimos por pista casi horizontal unos 5 kilómetros hasta la aproximación a la base de las montañas del Saghro.

Después comenzamos a ascender primero por el cauce de un río que se encontraba seco y sin gota de agua, y despues a medida que ascendíamos nos encontramos con varios campamentos rudimentarios de bereberes nómadas que se dedicaban al pastoreo de ovejas y cabras. El ascenso lo hicimos por la cara norte y en algunos tramos nos tocó pisar nieve (algo poco frecuente) hasta que pudimos coronar uno de los picos llamado Jbel Kouaouc (2.592 metros).

Cuando descendimos de este pico nos encontramos con que los dos muleros y sus mulas habían llegado hasta allí y nos habían preparado una suculenta comida al pie del pico (comida a base de ensalada y tajin, junto con los consabidos tes).

Un pequeño descanso después de la comida e iniciamos el descenso por la cara sur en compañía de nuestro guía, más los dos muleros, más las dos mulas. Una vez caminados unos 3 km, desde el lugar donde comimos, nos sorprendimos con unas formaciones rocosas gigantescas verticales (calculamos unos 100 metros de altura) que nos encontramos a nuestra izquierda y que además de ser preciosas en sus variadas formas se empezaron a iluminar con el sol del atardecer. El paisaje que nos rodeaba parecía mágico, el recorrido hasta llegar al lugar donde acampamos (justo debajo de una de esas formaciones rocosas por un lado y por el opuesto estábamos en un mirador que nos permitía divisar todo el valle que se encontraba a nuestros píes, justo encima del asentamiento bereber llamado Igli).

El lugar se llama Tassegdilt, allí cenamos, dormimos en tiendas de campaña y vimos amanecer al día siguiente con un sol rojizo en sus inicios y naranja a medida que clareaba, fue una vivencia inolvidable en mitad de de la vertiente sur de las montañas del Saghro.

Saghro significa en la lengua bereber Tamazight "sequía", de ahí que sea la cordillera en la que llueve menos de todo el sistema de montañas del Atlas: 300 mm/año en las cimas y 100 mm en la ladera S (debido al bloqueo de los vientos húmedos provenientes del océano). Es la tierra de los Aït Atta; aún hay muchos nómadas con sus rebaños y tiendas.

Recomendable en épocas de mal tiempo en el Alto Atlas, pero nunca en verano.