De Alarcón a su pantano

Ruta que comienza en al aparcamiento que hay junto al Parador de Alarcón. Nuestro objetivo inicial era llegar hasta la presa del embalse de Alarcón siguiendo el curso del río Júcar desde el pueblo que le da nombre, pero se nos hizo imposible por la densidad de la vegetación y dificultad de encontrar un sendero por la orilla norte del río a pesar de los intentos, por lo que finalmente decidimos simplemente llegar hasta el pantano, más arriba de la presa.
Desde el parking del Parador se atraviesa el bonito pueblo de Alarcón hacia el este pasando por la plaza del Ayuntamiento, para salir de él y descender hacia el “puente de Tébar”, que está al norte del pueblo. En el descenso dejamos a la izquierda y al otro lado del río la “torre de Cañavate” y pasamos la muralla por la “puerta del río”. Unos metros después de la muralla veremos a la izquierda el puente y tras él y en un promontorio la “torre de los Alarconcillos”. Pasamos de largo dejando el puente a la izquierda y llegamos a una represa que embalsa el río. Seguimos adelante por el mismo camino que rodea este embalse y veremos que han colocado una valla de madera en el lado del río. Podemos aprovechar para disfrutar de magníficas vistas hacia el castillo, el recinto amurallado y la torre, que también se reflejarán en el agua. Este camino pronto comienza a subir para salir del barranco, pero nosotros nos salimos del camino un poco antes de este ascenso, aprovechando que vimos unos senderos marcados que seguían por la orilla norte. Intentamos seguir este sendero, pero aproximadamente a un poco más de 500 metros desaparece y la vegetación hace prácticamente imposible seguir. Puede que en otra época del año se pueda pasar, pero cuando lo hicimos nosotros (octubre), no lo conseguimos. La decisión fue salir de la hoz del Júcar por el camino ascendente hacia el norte e intentar llegar al pantano por otra ruta. En el ascenso, el camino sigue con valla de madera a un lado y permite buenas vistas sobre Alarcón. Al llegar arriba, seguimos un camino paralelo a la carretera hacia el norte hasta llegar al comienzo de una pista que va hacia el noroeste y que rodea unos viñedos. Las vistas sobre Alarcón y los viñedos merecen la pena. Siguiendo el camino se llega a la carretera N-III, seguimos hacia el oeste unos 500 metros por la carretera, hasta llegar a una curva donde comienza hacia nuestra derecha una pista que desciende hasta el pantano de Alarcón y que tomamos tras cruzar la carretera con cuidado. La pista llega hasta el agua en un entrante del pantano que hay bajo el albergue de Alarcón. Estuvimos siguiendo la orilla hasta lograr ver la presa y también intentamos llegar hasta ella a través del abandonado Albergue de Alarcón para ver si se podía descender al río aguas abajo de la presa, pero no pudimos por encontrar una valla en el camino asfaltado que seguíamos. Emprendimos el regreso por el mismo camino y tras abandonar la N-III, esta vez hacia el sureste, decidimos seguir una pista que habíamos visto en la ida para ver si se podía llegar hasta un meandro que el río que hace hacia el norte. Desgraciadamente, a poco menos de 1 kilómetro la pista desaparecía en un campo arado y se hizo imposible de seguir. El resto del regreso lo hicimos por el mismo camino, hasta al parking del Parador, aunque las calles que seguimos dentro de Alarcón para atravesarlo fueron distintas.