CRÁTER DEL VOLCÁN HVERFELL (HVERFJALL)-JUNTO AL LAGO MYVATN-NORTE DE ISLANDIA

Marcha realizada el jueves 7 de agosto de 2014
AVISO: Se entiende, que todo aquel que quiera realizar esta misma ruta, asume la responsabilidad que conlleva una actividad no exenta de posibles riesgos o incidentes, en un entorno en el que el sentido común y las circunstancias pueden marcar la diferencia entre pasar un buen día o todo lo contrario.
Nos encontramos en la zona del lago Myvatn, y muy cerca y ligeramente al sureste de éste se encuentra la impresionante caldera y cono volcánico del Hverfell, que cuenta su historia desde hace poco más de dos mil trescientos años.
Tras dejar la N 1 Route o Ring Road, como también se la conoce en la isla, hemos cogido una de las múltiples carreteras de tierra, que no pasaría de ser en tantos otros lugares como una simple pista de tierra, que nos lleva hasta un pequeño aparcamiento en batería, que se encuentra en la misma base del volcán Hverfell. Ya desde abajo uno se puede hacer una ligera idea de las dimensiones del volcán y de la perfecta geometría, que más bien pareciera haber sido trazada sobre una lámina de dibujo. Pero no, nos encontramos en uno más de los varios cientos de volcanes que esta isla tiene, y en la que bastantes de ellos permanecen en plena actividad, con erupciones que suelen distar no más de cinco años entre sí. Desde el aparcamiento y con rumbo sur, hemos subido algo más de ciento cincuenta metros de desnivel en unos seiscientos metros de recorrido, que poco a poco se va acercando a un cono volcánico casi perfecto, con apenas irregularidades, ni en lo ancho, ni en lo alto; y con un diámetro de un kilómetro que lo convierte en un modelo que bien podría servir como perfecto modelo y ejemplo de cualquier libro de texto. Al llegar al borde del cono, podemos observar que erupciones posteriores han elevado ligeramente el centro de la caldera justo en el mismo centro de su interior, y aún así son más de ciento cuarenta metros los que tiene de profundidad su cráter. El viento racheado no deja de soplar, a ratos con cierta intensidad, pero con el paso de los días nos vamos habituando a tener como inseparable compañero a un elemento meteorológico que marca y condiciona no sólo el paisaje y la vegetación de una isla tan bella. Sólo un grupo más de personas recorren como nosotros el perímetro del cono, y al llegar a ellos podemos seguir comprobando como este destino es uno de los favoritos de muchos españoles, sobre todo vascos y catalanes, que deciden acercarse hasta aquí, para disfrutar de la naturaleza en su máxima expresión. Al medio kilómetro de subida y bajada hasta y desde el cono del Hverfell hay que añadir los tres kilómetros y pico de recorrido, que nosotros hemos hecho en sentido contrario a las agujas del reloj, y que permiten tener unas vistas inigualables de buena parte del entorno del lago Myvatn, incluidas las piscinas de aguas termales, de las que la noche anterior pudimos disfrutar hasta bien entrada la noche. No podemos quedarnos más tiempo, pues tras visitar la gran grieta de Grjótagja con sus cuevas de aguas termales (aquí el baño no está recomendado), nos queremos acercar para dar un paseo por la zona de los seudocráteres, junto al lago Myvatn.