Circular silanes (picaza, el buey, verdina, cimero, cantoña, la maya) montes obarenes

Circular desde Silanes por los Montes Obarenes. Salgo desde Silanes, dirección norte, por una garganta que atraviesa el arroyo Silanes, que, una vez cruzada, me deja en frente todo el cresterío de montes que voy a recorrer. Sigo el Arroyo Silanes por un sendero bien marcado, hasta que lo cruzo y lo dejo a mi izquierda, continuando por un sendero bien marcado, hasta el Collado Picaza (a lo lejos un jabalí me iba siguiendo). Un pequeño escarpe entre brezos, y estoy en la Cima Picaza.

Vuelvo al collado, sigo la alambrada hasta cruzarla, hay una puerta, y seguir la senda que me conduce hasta el Monte el Buey. Un pequeño tramo antes de llegar a la cima, debo de cruzar una alambrada en la que hay un cartel que indica la dirección y la distancia a la Verdina, el Cantoña y el Buey. Debo decir que la altitud de este monte es 1.229 metros, no 1.292 metros.

Tomo dirección oeste y sigo la alambrada, que he cruzado antes, hasta cruzarla de nuevo, y seguir la senda (hay varios hitos de dirección) hasta el Collado de la Verdina. Desde éste collado ya veo la senda a recorrer perfectamente marcada, que va por el cordal, hasta el Monte la Verdina.

Por el camino marcado en el brezal, dirección oeste, bajo al Collado Cimero y, por el cordal, al Monte Cimero. Desde aquí me dirijo, por el brezal, al Alto del Mojón (así lo he llamado), por que es un gran mirador y merece la pena.

Ahora me dirijo, por el brezal, al Monte Cantoña. Cuidado en las rocas de acceso al buzón, sobre todo con humedad. Para bajar al Collado la Maya, lo hacemos pegados a la pared que hay por debajo del buzón del Monte Cantoña y siguiendo atentamente la senda, cruzo la alambrada y destrepe hasta el monte y el Collado la Maya. Desde aquí hasta el Monte la Maya, se sube siguiendo la senda y los hito que en ella hay.

Desde el Monte la Maya puedo ver el camino dirección Silanes. Para llegar a él, tengo que hacer un descenso de "baja como puedas y por donde puedas". Este camino va, por la cabecera de las fincas, a enlazar con otros caminos de servicio que utilizan los agricultores y por los que me dirijo a Silanes para acabar la marcha.