Circular- paseo fotográfico desde Casillas al Collado de Las Vacas

Iniciamos nuestra anual visita a Casillas para disfrutar del espectáculo de los castaños ya amarillentos. Este año el otoño iba retrasado pero en apenas una semana se ha recuperado y, cuando hemos querido ir, ya era algo tarde; gajes del oficio. Esta vez volveremos a seguir un tramo que ya recorrimos el año pasado (https://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=15499780) y que nos llevará por bosques umbríos, lejos de las rutas habituales, hasta el Collado de Las Vacas. Es una marcha-paseo con fines fotográficos, así que la longitud y la dificultad se adaptan a esta finalidad.

Aparcamos, como siempre, en lo alto del pueblo y junto al campo de fútbol. Nos echamos a andar, también como siempre, por la pista asfaltada que sale paralela a la pista de tenis y recorreremos por ella unos quinientos metros hasta llegar a una curva a la derecha. De seguirla llegaríamos al área de descanso de Las Eras del Prado, pero nosotros continuamos de frente por una pista de tierra que nos lleva al Arroyo de Majalobos y que cruzaremos. Luego dejamos el camino por el que veníamos y que gira a la izquierda y tomaremos otro que sale de frente y un poco a la derecha (wpt001) para internarnos en un camino que no viene en los mapas y que aparte de los lugareños pocos conocen . Iremos entre castaños y cercas de piedra totalmente alfombrado de hojas, lo que hace que a veces cueste un poco reconocerlo pero no habrá problemas sobre todo si seguís el track. Al final se sale a un camino, casi pista estrecha situado en el wpt002, que tampoco aparece en el mapa pero que recorriéndolo hacia la izquierda nos lleva al sendero que viene del camino del arroyo que antes cruzamos.

Ya no tenemos más que seguirlo hacia la derecha para llegar al centro de educación de El Borbollón y la Fuente Miles, pasando luego por la Fuente Fría y llegando al Collado de Las Vacas. Aquí veremos que hay varios caminos (el año anterior tomamos el que va al puerto) y nosotros cogeremos el que baja otra vez a Casillas (unos tres kilómetros). La ruta es preciosa en otoño y la variante de subida es más umbría y solitaria que las demás. Muy recomendable. La dificultad la califico de fácil, así que no tenéis excusa para no hacerla.


Gracias y hasta otra.