circular-faja formosa.prado-de-pineta-circo-de-la-larri-cascada-de-la-larri-circo-de-pineta-cascada-del-cinca-pr-

Desde el mismo refugio de Pineta tomaremos el sendero GR-11 en dirección al Collado de Añisclo (Señalizado), cruzando el río Cinca que en verano seguramente se nos presentará casi seco al filtrarse el agua por la grava. . Atravesaremos un prado desde el que contemplamos los impresionantes picos Pineta y Forcarral, en el mismo borde del Balcón de Pineta, y enseguida nos adentramos en el bosque de hayas y pinos, comenzando una fuerte subida.
Los coloridos hayedos y otros árboles contrastan fuertemente con las masas de pinar, regalando a la vista una exquisita gama de colores otoñales. Los pocos claros en realidad son las barranqueras por las que, en años de fuertes nevadas, se descuelgan poderosos aludes que arrasan los árboles impidiendo su desarrollo.
Iremos ganando altitud con gran rapidez, ya que por algo es una de las sendas más abruptas del valle, y en algún lugar hay pequeñas trepadas que no suponen mayor problema.

Cuando alcanzamos el cruce con la faja Tormosa, abandonamos el GR-11 y continuamos por el sendero horizontal . Al principio el sendero ó Faja Tormosa es ancho y horizontal, atravesando alguna que otra pradera. En ellas descubriremos pronto flores de Edelweiss, que adornan la senda. Multitud de otras plantas pueblan la ladera, convirtiéndolo en un punto de especial interés botánico.

El recorrido continúa pasando unas cuantas franjas rocosas por las que trepamos y destrepamos, barrancos que caen desde los picos Baudrimont u otros más pequeños. Debemos prestar atención ya que a principios de verano es fácil encontrar en ellos algún que otro nevero que pudiera hacer imposible el paso si no se llevan crampones.

Cerca ya del fondo del valle, iniciaremos un tramo de fuerte ascenso que luego tendremos que volver a descender. El deshielo del glaciar del Monte Perdido da lugar a un río que se descuelga por la pared tomando una gran velocidad. Se divide en varios chorros que luego se juntan en el mismo canal, caprichosamente.

Antes de llegar al pie de la cascada tenemos que destrepar una canal equipada con una cadena de seguridad. Aunque no suele ser un punto problemático, sí algunas personas pueden tener dificultad en caso de no hacer actividades de este tipo, y carecer de cierta agilidad en este aspecto.

Pasado este tramo técnico, tras una pared descubriremos la tremenda Cascada del Cinca. La furia del agua ha excavado un brutal agujero, y las aguas que se descuelgan desde el Balcón de Pineta no perderá su violenta velocidad hasta caer en el fondo del valle, salvando el desnivel en innumerables cascadas y pozas, y convirtiéndose en un espectáculo .
Por una especie de fajeta estrecha nos dirigimos al puente que cruza las violentas aguas del río, disfrutando del estruendo de las aguas en el fondo del cañón.
Continuaremos nuestro caminar desviándonos ligeramente a la derecha hasta llegar a un cruce donde encontraremos indicaciones que nos llevarán hasta los llanos de la larri. De ahí seguiremos en ligero ascenso, pasando por el refugio que lleva el mismo nombre, y podremos contemplar vistas con otra perspectiva . Bajando a posteriori por el mismo lugar en regreso a nuestro punto de partida. PAra ello cruzaremos el puente del Cinca , pasaremos por la zona de aparcamientos que deja a la derecha la ermita de Nuestra Señora de Pineta, y cruzando un puente más llegaremos al refugio de Pineta por el GR-11