Circular desde Lentegí a la Venta de la Lata por el Cerro del Muerto y el Barranco de la Arroba

Hora Inicio: 7:48 20 jun. 2020
Hora Fin: 19:55 20 jun. 2020
Distancia recorrida: 21,8 km (12:06)
Tiempo en movimiento: 07:13
Velocidad media: 1,8 km/h
Vel. en Mov.: 3,02 km/h
Velocidad Máxima: 6,66 km/h
Altura Mínima: 672 m
Altura Máxima: 1357 m
Velocidad Ascenso: 240,8 m/h
Velocidad Descenso: -180,1 m/h
Ganancia Altitud: 1240 m
Pérdida Altitud: -1248 m
Tiempo Ascenso: 05:09
Tiempo Descenso: 06:55

Una ruta de especial belleza paisajística. A lo lejos hacia el Este se divisa Sierra Nevada y la Contraviesa, en medio plano la Sierra de los Guájares. Hacia el Oeste se ve todo el panorama de Sierra Almijara y parte de Sierra Tejeda desde la Cabeza del Caballo y el Pico del Cielo pasando por Navachica hasta la Sierra de Játar y la Maroma, y delante los promontorios Pico Lopera y Cerro Cabañeros. En la cercanía se presenta desde varias perspectivas el paisaje del mismo recorrido, la Sierra de Entresierras, el Cordel de la Lata y los varios barrancos que bajan al Río de LentegÍ con sus tajos y formaciones rocosas extravagantes. Impresiona la vista a la Carretera de la Cabra, que al principio de la bajada desde la Venta de la Lata parece estar justamente debajo de los pies a unos 170 m de profundidad.

El recorrido empieza en el aparcamiento delante de la piscina pública de Lentegí y sigue el Sendero de Entresierras, un camino señalizado con postes y algunas flechas indicativas. Donde este sendero baja al valle de Lentegí, se sigue recto por un cortafuegos que lleva al primer objetivo, el Cerro del Muerto o de las Tres Lindes con su vértice geodésico y torre de vigilancia anti incendios. En este cortafuegos se encuentran dos formaciones rocosas como barreras, que desde lejos no lo dejan claro, por donde superarlas. Pero desde cerca se ofrece sin dudas el trayecto que hay que seguir.

Desde el Cerro del Muerto hacia el Oeste se puede observar muy bien el sendero que sube al Cordel de la Lata, y se puede intuir el recorrido describiendo una larga curva hacia la derecha para acercarse al Alto de los Bojes.

Lo que está menos claro, es la bajada del Cerro del Muerto. Aquí, lo que podía haber sido un sendero, ha desaperecido casi totalmente excepto por unos pocos y cortos tramos. Practicamente se va campo a través por un terreno empinado y resbaladizo con unos escalones rocosos que obligan a buscar, cómo rodearlos.

Una vez llegado a lo alto del Cordel de la Lata, se ve con más claridad cómo seguir hasta el Alto de los Bojes, dejando éste a la derecha y pasándolo a media ladera para enlazar con el cortafuegos amplio y limpio que sigue en dirección Oeste. Este tramo se encuentra cómodo en forma de sendero facilmente reconocible y marcado con algunos mojones de piedras.

El Cerro Oscuro lo dejamos a la izquierda aunque prometa vistas expectaculares hacia el Valle del Río Lentegí. Se queda para otra ocasión.

El cortafuegos pasando el Alto de los Bojes lo tomamos hacia el Oeste y después de poco más de un km llegamos a la ruina de la Venta de la Lata a la derecha.

La bajada a la Carretera de la Cabra empieza en el lado opuesto más o menos enfrente de la Venta de la Lata. El inicio un poco escondido está marcado con un mojón de piedras, y se encuentra al lado de una placa de la linde del Parque Natural. Después de unos metros, se abre una vista vertiginosa a la Carretera de la Cabra, que parece, como ya dicho, estar justamente debajo de nuestros pies a unos 170 m de profundidad. El camino de la bajada, que muy probablemente estaba destinado al uso con caballerizas, es amplio y poco empinado por lo cual describe una serie de curvas. En algunos puntos del camino, invadidos por la vegetación, hay que prestar atención para no salir de él.

Desde la Carretera de la Cabra se toma el carril que entra en el terreno hacia la izquierda. Después de poco rato se llega a una curva hacia la derecha donde se encuentra la chatarra de un coche. Por ser un objeto móvil, esto no es un punto de orientación muy fiable, por otra parte el estado de esta chatarra parece indicar que ya no se va a retirar. Aquí empieza la bajada por el Barranco de la Arroba, marcado con hitos de piedras. Este tramo presenta dificultades y peligros por las muchas piedras que se encuentran en él y por varios escalones / cascadas donde hay que usar la ayuda de las manos. En su parte baja, el cauce del río, en esta temporada seco, se amplía y permite un avance más cómodo, hasta llegar pronto a una presa. Se puede intuir el sendero que rodea la presa por la derecha. Cubierto por la densa vegetación, hay que buscarlo y luego hacerse una brecha entre la zarzamora.

Desde la presa ya se ve el carril que lleva a Lentegí. Lo que queda es una marcha de unos 7 km hasta llegar al punto de partida.

Definiendo la actividad de senderismo, hay que valorarla de técnicamente difícil. Como dicho, la bajada del Cerro del Muerto va campo a través por terreno empinado y resbaladizo. Igual en la bajada por el Barranco de la Arroba, por la cantidad de piedras por el suelo irregular, hay que extremar la precaución para evitar torceduras, tropiezos y caídas. Además, en varios puntos hay que servirse de la ayuda de las manos.

La ruta requiere una buena forma física. Los meros datos técnicos como distancia, desnivel o indice ibp engañan un poco porque no tienen en cuenta el tipo de terreno. La dificultad de la bajada del Cerro del Muerto y por el Barranco de la Arroba frenan el avance y cuestan concentración y esfuerzo. Además, en nuestro caso, las temperaturas relativamente altas nos castigaron en el tramo del cortafuegos entre el Alto de los Bojes y la Venta de la Lata, lo que resultó en un cierto cansancio, y en el avance más lento de lo habitual.