Cerro de Buenavista y Toriles-Cerro Pararrayos y Cerro del Pino Oscuro-Alto del Calabozo. P.N. Sierra de Huétor.

PARQUE NATURAL SIERRA DE HUÉTOR:

El Parque Natural Sierra de Huétor es un conjunto de sierras de media altura, donde se alternan estrechos barrancos, arroyos, tajos y calares que forman un relieve complejo debido a la naturaleza caliza del terreno que determina la abundancia de formaciones kársticas.


Uno de los principales atractivos de este parque natural es su facilidad de acceso, así como las numerosas pistas forestales que lo recorren, haciendo de él uno de los espacios naturales más visitados de la geografía granadina.


Pinares, encinares, quejigales, zonas de matorral y bosques de ribera componen un valioso mosaico donde encuentran abrigo una gran variedad de especies, muchas de ellas de un gran interés de conservación, como raros endemismos botánicos o especies emblemáticas y amenazadas como la cabra montés o el águila real.


El Parque Natural Sierra de Huétor cuenta con muchos otros alicientes aparte de su valiosa naturaleza, ya que es un lugar con un rico pasado histórico-cultural, especialmente gracias a su inestimable legado musulmán junto con el inconfundible sabor serrano de los pueblos de su entorno: Alfacar, Beas de Granada, Cogollos Vega, Diezma, Huétor Santillán, Nívar y Víznar.


De la cultura árabe se conservan legados como acequias, alquerías o los baños árabes de Cogollos Vega, mientras que en el pueblo de Víznar se puede visitar el neoclásico Palacio del Cuzco, declarado Monumento Nacional. Diezma es un estupendo mirador de Sierra Nevada. Este lugar permite el disfrute de los aficionados a la fotografía, ya que desde aquí se captan unas bellas panorámicas de la sierra vecina. También se podrán identificar en vuelo apareces como el águila real, cuyo majestuoso vuelo resulta inconfundible. Para reponer fuerzas, hay que degustar la gastronomía típica del lugar, desde el tradicional pan de Alfacar, el exquisito alimoje con bacalao o las famosas gachas con miel.


Vestigio de la historia reciente son las numerosas trincheras construidas durante la Guerra Civil española, auténticos miradores naturales desde donde se divisan las mejores panorámicas de este espacio.

CÓMO LLEGAR:

Para llegar al punto de inicio de esta ruta ,tomaremos la autovía A-92 y la abandonaremos en la salida 264 (Venta del Molinillo – Las Mimbres – Prado Negro). Si vamos desde Granada, sin cruzar el puente sobre la autovía nos desviamos por una pista asfaltada a la derecha que transcurre paralela a la A-92, para después internarse en un denso pinar. A unos 3 km , a la izquierda parte la pista de tierra que lleva hasta la Casa Forestal del Pozuelo y un poco más después y a la derecha, parte otra pista que va hasta el Cerro de Buenavista y Cerro Toriles. Donde arranca ésta segunda pista hay una explanada donde estacionar varios coches.

DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO:

En ésta ruta recorremos la zona más oriental del Parque Natural, la que está al Este de la autovía A-92, mucho más solitaria, intima y tranquila que la occidental.


Ascendemos a tres vértices geodésicos, el primero es el Buenavista (1.664 m)) y a la caseta de vigilantes del Cerro Toriles (1.676), el segundo es el Pararrayos (1.658 m) , fuera del Parque Natural y el tercero en el Alto del Calabozo (1.651 m). Por tanto la característica más destacable del recorrido es la de sus privilegiados balcones naturales, desde donde se nos abren excepcionales paisajes en todas direcciones, especialmente de las cercanas Sierra Nevada y Sierra Arana.


La ruta se hace dura debido a los continuos sube y baja, con tramos de campo a través de lapiaz y fuertes pendientes, pero sin excesivas dificultades técnicas.


Comenzaremos la andanza inmersos en un frondoso pinar de reforestación y a trescientos metros del inicio tomaremos la izquierda en una intersección. El itinerario va por una amplia pista de tierra que asciende de forma intensa pero cómoda. Después tomaremos un atajo a la derecha para evitar un rodeo que da la pista; pero poco después la retomamos algo más arriba.

Aproximadamente en el 2,5 km llegaremos al COLLADO DEL LOBO; aquí nos desviaremos momentáneamente a la derecha por un camino que asciende radicalmente hasta el CERRO BUENVISTA 1664 m. Primer VÉRTICE GEODÉSICO del día sobre una ancha plataforma cimera. Junto a una solitaria pinácea disfrutamos de unas vistas de privilegio. A nuestra derecha la localidad de Béas de Granada a la que pertenece esta alta cumbre. Esta cumbre es la de mayor altura del municipio, y que junto a otros cerros colindantes como Cerro Oscuro, La Canasta, Los Enebrales, Cerro de la Cruz (1.457 m.), Retamar, Pararrayos (1.658 m.), Cuerda de los Pelados y Calabozo (1.650 m.), forman parte de esta emblemática sierra ubicada dentro del Parque Natural de la Sierra de Huétor.

El nombre de este cerro ya lo dice todo BUENAVISTA; desde donde podremos ver, si la meteorología lo permite: Al norte Sierra Arana o Harana y el Toriles, casi a tiro de piedra, que es nuestro próximo objetivo. Al noreste el Jabalcón, La Sagra, la Hoya de Guadix y Baza formando parte de la Depresión Intrabética (pasillo existente entre la cordillera Penibética y la Subbética), sierra de Baza incluida.


Destacando aquí el gran valor paisajístico de este Parque Natural (bastante maltrecho por las numerosas canteras existentes) en donde abunda mayoritariamente el pinar de repoblación, el bosque más generalizado, compuesto por pinos carrascos, salgareño, resinero y albar.

Y hacia el este-sudeste el Calar de Güéjar Sierra, Cuerda del Alguacil y Alto de los Califas, Trevenque, Alayos, Silleta del Padul y las altas cumbres de Sierra Nevada, con una soberbia panorámica de Sierra Nevada, desde el Picón de Jérez hasta el Caballo.

Por debajo del Vértice Geodésico se encuentran los restos de las Trincheras del bando republicano y una pequeña cueva que sirvió como polvorín y como refugio de pastores. Junto a los restos de las trincheras sale un pequeño sendero que desciende nuevamente al COLLADO DEL LOBO.

Ya en la pista continuaremos con el ascenso hasta el vecino CERRO DE TORILES 1676 m. donde se ubica una CASETA DE VIGILANCIA CONTRAINCENDIOS. Aquí, nuevamente, las vistas son formidables si el día lo permite. Cambiamos de horizonte cardinal, con la cuerda principal de la Sierra Arana, con el Orduña/Telégrafo, la Peña de la Cruz, con esa caída hacia la izquierda, formando el collado del Agua con el Orduña, la Cabeza del Caballo y el Jinestral, Sierra de Baza y La Sagra. ¡¡¡Todo un espectáculo!!!

Comenzaremos con el descenso caminando unas decenas de metros por la pista para después desviarnos a la derecha, junto a un hito de piedra con un punto rojo, por un intrincado, estrecho y pedregoso sendero, que en ocasiones es algo difuso, pero una serie de pequeños hitos de piedra nos ayudan a seguirlo. Si durante el tránsito por este y otros senderos hacemos un pequeño alto en el camino para construir y restaurar algún hito de piedras, seguramente será muy agradecido por futuros transeúntes.

Este sendero desciende por el COLLADO DEL MUCHACHO hasta enlazar con el CAMINO DE LA CERRADA, que tomaremos a la izquierda. Continuaremos con el descenso ahora mucho más cómodo por una amplia pista y en el PARAJE DELOS TRANQUILOS, nos toparemos con una bifurcación tomando la pista de la izquierda. Un poco más adelante, y en otra bifurcación que también tomaremos a la izquierda, veremos a la derecha una Cantera de las muchas que abundan en esta sierra y que tanto deterioran el entorno.

En las inmediaciones del BARRANCO DE TORILES, tomaremos un desvío a la derecha que nos conducirá hasta el PARAJE HAZA DEL ESPINO. Aquí hay que estar atentos para desviarnos a la derecha, sin sendero definido, por un radical y duro ascenso por la cuerda del CERRO PARARRAYOS, que nos conducirá tras un último cresteo, evidentemente, hasta la tercera cumbre del día EL CERRO PARARRAYOS 1658 m. Llegamos hasta su huidizo vértice geodésico, desde donde las panorámicas son de diez, una verdadera maravilla. Aquí decidimos hacer una parada y comernos el bocata, algo deprisa pues la temperatura comenzó a bajar y el viento soplaba que casi cortaba.

Continuamos con el divertido y funambulesco cresteo, ahora en descenso, hasta llegar al collado que separa el Pararrayos del cercano Cerro Oscuro. Desde aquí un corto y exigente ascenso, sin sendero claro, nos conduce a la cumbre del CERRO OSCURO 1591 m. sin vértice geodésico pero coronado con unos magníficos ejemplares de Pinos. Las panorámicas siguen siendo formidables.

Ahora comenzaremos el descenso por un pinar; sorprendiéndonos multitud de florecillas que salpican el terreno: las llamativas téticas de doncella, nazarenos, piornos morados o cojón de monja, Oso-uva, romeros….

Tras el descenso cruzaremos el BARRACO DE LOS REVENTONES y tras un leve ascenso de una loma encontraremos el BARRANCO DEL POTRO, por el que continuaremos con el descenso, sin sendero claro; dejando a la derecha el CERRO DE LAS CALAVERAS 1555 m. Este largo descenso por el Barranco del Potro enlaza con una pista, que seguiremos durante poco tiempo, ya que la abandonaremos para seguir por el cauce del mismo barranco. Al final enlazaremos con una pista que tomaremos a la derecha; posteriormente dejaremos el Barranco de Toriles a la derecha y comenzaremos un suave ascenso en paralelo al BARRANCO DE CARBONALES. Esta parte del recorrido es la que más nos gustó, ya que discurre inmersa en frondosos bosques con enormes cedros, robles, grandes encinas y varias especies de pinos, salpicadas de numerosas peonías y por donde revolotean y canturrean multitud de pajarillos.

Posteriormente estaremos atentos para tomar un desvío a la derecha por una senda que atraviesa el PARAJE DE HOYO ORÓN u Hoya del Hurón. Después un extenuante ascenso sin claro sendero nos conducirá hasta los ALTOS DEL CALABOZO 1652 m.que presenta una morfología del terreno que en su meseta de cumbres es de naturaleza típicamente caliza con un lapiaz bastante desarrollado y una gran dolina cercana a su vértice geodésico. Y además presenta una gran variedad de fauna y flora muy interesante y frecuentada por grupos de cabrás montés. Las vistas son espectaculares, sobre todo de la Sierra de Huétor, Arana y Sierra Nevada. El Negratín, Jabalcón y la Sierra de Baza también parecen estar al alcance de la mano.

TRINCHERAS EN EL CERRO DEL CALABOZO.


Una línea de trincheras pertenecientes al bando republicano y situadas en la Sierra de Huétor Santillán construidas durante la Guerra Civil Española. En la Provincia de Granada y tras el alzamiento militar, ya en los primeros meses quedó definido un frente de guerra que se mantendría intacto hasta el final de la contienda. las Sierras de Huétor y de la Alfaguara marcarían esa línea divisoria entre ambos bandos.

El frente republicano se organizó para defender la carretera que unía Granada con Murcia y Almería a través de la Sierra de Huétor, hemos de recordar que no existía la actual A-92. Era una carretera sinuosa que penetraba en la Sierra y la atravesaba bordeando todos sus salientes rocosos y sus elevaciones. Precisamente son en esos puntos donde el ejercito Republicano situó sus defensas.

La república al contrario que el bando nacional estableció dos fuertes líneas de defensa, una primera Línea enfrentada directamente y visualmente al enemigo, más fortificada y defendida, y una segunda Línea a retaguardia, sin embargo las tropas nacionales establecieron un sistema con tres líneas defensivas. Entre ambas líneas había pequeñas fortificaciones intermedias.

Las posiciones de las que vamos a hablar hoy estarían en esa segunda Línea del frente republicano en el lugar conocido como Alto del Calabozo o dientes de la Vieja, justo a pie de la antigua carretera Granada-Murcia, hoy A-92 a su paso por el Puerto de la Mora.

El Alto del Calabozo es una elevación a 1400 metros sobre el nivel del mar, en ella encontramos en primer lugar una gran línea de parapeto a la que se le adosan varias casamatas, y galerías de tirador, que suponen la defensa de este punto y que articulan todo el sistema de trincheras.

Todo está hecho con mampostería en seco y sin apenas usar ningún tipo de argamasa o cemento, sino piedra sobre piedra, se hacen dos hileras y se rellenas de material más pequeño de chinos y pequeñas piedras, pero con carencia total de ningún tipo de material que amarre y fortalezca la estructura. La línea se va adaptando a los accidentes geográficos, y al sentido de la carretera y de los diferentes caminos, para cubrir todo el espacio y no dejar ningún punto ciego. Desde el punto más cercano a la carretera, la línea defensiva asciende hacia lo alto del monte cubriendo todos los espacios, hay varios refugios, que en su día estarían tapados con algún tipo de rollizo o incluso uralita.

Hay varias casamatas que estarían dispuestas y pensadas para albergar algún tipo de arma medio pesada como ametralladoras. También encontramos una galería de tiro adosada al parapeto.

Una vez coronado el Alto del Calabozo y en el otro lado de la elevación controlando el barranco de Carbonales, encontramos la segunda línea de parapetos de esta posición, se piensa que es de construcción posterior, una vez controlada la Carretera de Murcia y estabilizado el frente, en temor de una posible incursión a través de la Sierra por el Cortijo del Pozuelo o el Barranco de los Carbonales.

No se han encontrado en estas posiciones cuarteles o centro de mando, según la documentación consultada, puede ser debido bien a que usaran los cercanos cortijos a esta posición para tal fin, como el del Pozuelo, Carbonales o Rinconada o bien, que una vez estabilizado el frente, se centraran más en la primera línea de resistencia y que estas posiciones relegadas a un segundo plano quedaran algo más abandonadas.

Tras un buen rato recorriendo el Alto del Calabozo, comenzamos el tortuoso descenso, con las piernas algo tontas y torpes después de tanta subida y bajada, una total montaña rusa.

Retomamos la encantadora y pintoresca pista de Carbonales, que ahora después de tanto esfuerzo y mal camino, nos parece aún más bonita y cómoda. Carril que anda flanqueado por altivos ejemplares de robinias-las falsas acacias-, olmos de repoblación y otras especies arbóreas. Llegaremos en breve a la CASA FORESTAL DEL POZUELO . Antiguo cortijo que anda, en la actualidad, en un lamentable estado de abandono, por cierto, y que entró a formar parte, como casi todos los del conjunto de esta zona, de la red de Casas Forestales, tales como las de Bolones, Los Peñoncillos, Las Minas, Carialfaquí, Las Mimbres, Carbonales, Cueva del Gato…La curiosa veleta hace honor al nombre del Cortijo…el Pozuelo. Casa forestal que tiene una zona contigua-aneja, completamente alambrada, habilitada para la cría del ganado equino, pero mayormente caprino y lanar, y que andaba por aquí de lo más agusto.

Seguiremos por la pista de Carbonales hasta llegar a la carretera asfaltada, la tomaremos a la izquierda y a unos 300 metros llegaremos al punto final y de partida de esta exigente pero muy recomendable ruta.

La parte de la descripción que describe las trincheras del Alto del calabozo ha sido extraída de Lugares de Granada con Encanto que podéis encontrar en: