Cerro Cabeza de León

Aventura al norte del estado de Nuevo León, en el municipio de Bustamante ubicado a 2 horas de distancia de la ciudad de Monterrey, se trata de uno de los 3 pueblos mágicos que se pueden encontrar en Nuevo León. Para llegar a Bustamante es necesario tomar la carretera con rumbo a Nuevo Laredo en un tramo de aproximadamente 100 kilómetros verticales en una vía que ofrece vistas espectaculares a la Sierra de Minas Viejas, donde está ubicada la cumbre de La Tía Chena, o la imponente Sierra de Gomas en un escenario que parece teletransportarte al viejo y lejano oeste por la zona tan remota que yace en medio del desierto cubierto de nopales y cactáceas.

Una vez atravesada la inmensa carretera, que por cierto es muy segura y completamente gratuita, nos encontraremos en las inmediaciones del municipio de Villaldama y del municipio de Bustamante en una zona que es conocida como "el jardín de Nuevo León", debido a que de transitar en un desierto árido y agreste, se pasa a caminar entre secciones verticales de árboles gigantes en lo que viene siendo un saludo de bienvenida al bello y mágico pueblo de Bustamante.

Debido a la lejanía de este lugar, decidimos quedarnos en una casa en las afueras del pueblo todo el fin de semana, sí así lo deseas existen opciones muy interesantes como el Hotel "Ancira" o el Hotel "La Patrona", ubicados en el centro del pueblo y que además cuentan con un restaurante lleno de deliciosas opciones locales.

Una de las cosas que más llaman la atención en este pueblo es la sensación de seguridad que se vive en el mismo, observando a gente caminando prácticamente a todas horas del día, con las puertas de sus casas abiertas y saludándote para darte los buenos días.

El inicio de la aventura tomó lugar el domingo por la mañana, un poco antes de las 5AM, cuando decidimos emprender la caminata desde el pueblo para realizar este recorrido tan espectacular que en esta ocasión me gustaría dividirlo por segmentos:

1er Segmento: Salida del pueblo y aproximación a la base de la sierra.
Se caminan alrededor de 3 kilómetros hasta la base de la montaña, donde se transita inicialmente por un camino bastante amplio tipo terracería hasta adentrarte en un camino tipo single track donde al menos a la hora en la que caminamos por ahí se percibía un alto nivel de humedad en algo así como una burbuja de vegetación que elevaba mucho la temperatura y servía para ir calentando motores.

2do Segmento: Inicio del desnivel y mirador asombroso.
Una vez atravesada la burbuja de vegetación del inicio, se camina por una vereda que cuenta con un nivel de inclinación de 35-40 grados alternando entre un terreno tipo tierroso y rocas sueltas sin llegar a ser un chorreadero, esta parte del recorrido se prolonga por alrededor de 2.5 kilómetros hasta llegar a una base donde el camino se aplana y donde si se mira hacía la izquierda se observa un inmenso chorreadero y a la derecha una formación rocosa muy llamativa donde está ubicado el mirador. OJO para llegar al mirador se tiene que incursionar en un campo traviesa y escalar distintas rocas no muy técnicas pero sí muy sueltas rodeadas de espinas y ramas, se recomienda ser cauteloso al visitar el mirador debido a la inestabilidad del terreno y nunca está de más decir que no hay que tomar riesgos innecesarios.

3er Segmento: Subida empinada hasta una base con vista a cumbre.
La mayor parte del ascenso se realiza sin poder visualizar la cumbre, sin embargo, se toma una subida algo empinada y prolongada hasta llegar a una tipo base sin tanta vegetación donde se puede visualizar la cumbre con su característica cresta, dándote una sensación de cercanía. Justamente por este punto uno se empieza a deleitar con las vistas espectaculares que otorga el inmenso escenario, con una vista asombrosa del valle, de Bustamante, de la Sierra Morena y del Cerro del Imán.

4to Segmento: Inmersión en bosque enorme que rodea la cresta y sube por detrás a un chorreadero.
Justo de después de pasar el punto despejado se comienza a transitar por un bosque muy hermoso lleno de árboles sin tanta vegetación entre ellos, dando la posibilidad de caminar por donde se guste e incluso se llega a vislumbrar un pico aledaño muy cercano a nuestra ubicación por el cual se podría llegar caminando en dirección contraria a la cumbre. Una vez transitado el bosque se llega a un chorreadero en el que hay que caminar con precaución debido a la inmensa cantidad de rocas que se pueden desprender, este camino continúa hasta llegar a la cresta.

5to Segmento: Cresta y cumbre.
Sin lugar a dudas se trata de la parte más escénica de todo el recorrido, se camina en una cresta, bastante segura, es decir, sin precipicios ni pasos muy arriesgados, pero bastante hermosa con vistas espectaculares a La Sierra de enmedio, La Sierra de Minas Viejas, La Sierra Morena, a el Cerro del Imán y una postal asombrosa de la inmensidad y belleza de la Sierra de Gomas. Esta cresta continua por alrededor de 1.5 kilómetros hasta llegar a una cumbre que trae consigo una paz bastante denotada por el sonido del viento proveniente del sur, y los picos impresionantes de la misma Sierra, en está cumbre podrás encontrar un diario de cumbres para anotar tu nombre y algunos pensamiento que se te venga a la mente, así como un nacimiento con figuras religiosas muy bonito.

En términos generales, se trata de una ruta que se debe hacer únicamente durante el mes de invierno o durante la entrada de algún frente frío debido a la exposición solar que se acentúa conforme se sube la montaña y llega a su máxima exposición en la cresta y la cumbre. Se trata de un recorrido no apto para principiantes, inicialmente por la prolongación de la ruta y el constante crecimiento de la vegetación que afecta el trazo de la vereda. Aún así, se recomienda visitarla con la debida preparación y ánimos para emprender esta aventura. Esperamos que esta reseña te sirva para planificar mejor tus aventuras y para que disfrutes de la naturaleza. GRACIAS:)