Cerrada del Río Castril

En la Sierra de Castril cerca del Cortijo del Nacimiento podemos encontrar el nacimiento del Río Castril, paraje donde impresiona la fuerza con la que emergen las aguas desde los acuíferos a gran profundidad para formar este caudaloso río que desemboca en el río Guadiana Menor a los pies del Cerro Jabalcón. A su paso por la localidad de Castril el río se encajona bajo la Peña de Castril y forma esta bonita cerrada que el río ha ido horadando con el paso del tiempo y que esta jalonada de rincones de gran espectacularidad y belleza.Ruta asequible y sencilla donde disfrutar del entorno que es la premisa básica para realizarla.
Recorrido de la ruta:
Área Recreativa de Castril-La Arboleda Perdida-Cerrada del Río Castril-Rivera del Río Castril-Camino rural-Cerrada del Río Castril-La Arboleda Perdida-Área Recreativa de Castril.
Estacionamos el vehículo junto al área recreativa en un anchuron destinado para ello, tendremos que caminar un tramo por asfalto y atravesar la zona de aparcamiento antes de adentrarnos por la Arboleda Perdida. Para conectar con el sendero nos adentramos por la Arboleda Perdida donde podemos leer las palabras que José Saramago dedicó a sus abuelos y que nos sirven para adentrarnos por este paraje de exuberante vegetación y que invita a la tranquilidad y reflexión.
Dejamos atrás este mágico rincón para adentrarnos por el Sendero de la Cerra, este comienza a los pies de la Peña de Castril justo por debajo del pueblo y se adentra por este cañón labrado por la fuerza del agua del Río Castril. Antes pasamos por la Central Hidroeléctrica la cual esta excavada en la roca y que aprovechaba la fuerza de la aguas para proporcionar electricidad, en la actualidad las instalaciones son utilizadas por el ayuntamiento de Castril para exposiciones.
Nos encontramos con el inicio del Sendero de la Cerrada, si llegamos antes de la 10:00 h no tendremos que pagar los 2,5 € que si tendremos que abonar por llegar después.
Iniciamos el recorrido por las pasarelas que están ancladas a la roca y que van en paralelo al cauce del río, la fuerza con la que el agua corre bajo nuestros pies y el volado de la pasarela nos da una vertiginosa sensación, mas no es nada complicado el avanzar. Disfrutamos de la perspectiva de las paredes de la cerrada como erosionadas se levantan hacia el cielo, la pasarela desciende levemente hasta que llegamos a un punto donde el propio río se remansa y se calma para pasar encañonado por dos paredes justo por debajo de la Peña de Castril. Nosotros vamos a sortear el puente colgante que nos separa de la otra vertiente y una vez superada nos adentramos por un túnel excavado en la roca el cual se divide y nos muestra en un mirador un espectacular salto de agua, volvemos sobre nuestros pasos y continuamos unos metros mas por el túnel para desembocar ya en una zona abierta y sombreada junto a una acequia. Desde este punto nos quedaría acercarnos hasta el Molino de la Cerra para terminar la ruta pero optamos por alargarla un poco mas para seguir disfrutando del Río Castril.
Continuamos junto a la acequia para enlazar con un camino por el que avanzaremos unos metros hasta llegar junto a una cadena que cierra el desvío que vamos a tomar, nos adentramos por una zona de bancales de olivos hasta conectar con un camino que va en paralelo a la rivera del Río Castril y que nos hará disfrutar de ella y de sus rincones escondidos. El camino discurre junto al río y a una zona de viveros de Chopos lo que le da un encanto especial al caminar, también el rumor de las aguas y el canto de los pájaros en su trepidante ir y venir. El río nos conduce hasta un cruce de caminos donde nos llevamos la sorpresa de que el puente que nos debería dar el acceso a la otra orilla no esta, ha sido arrastrado por la fuerza de las aguas en las últimas lluvias y encontramos los restos del mismo en la orilla opuesta. Sin opciones de poder cruzar el río optamos por continuar por el camino rural que detrás de nosotros recorre parte de las choperas y que asciende un poco para a la altura del Cortijo del Escribano desviarse y descender para enlazar de nuevo con el camino que traíamos desde la cerrada. Volvemos a conectar con la acequia y nos desviamos para saltar de nuevo el Río Castril por un puente que nos conduce al Molino de la Cerra, alojamiento rural en un enclave único junto a la rivera del río.
Ya solo nos queda volver sobre nuestros pasos y disfrutar de nuevo de cada uno de los rincones que atesora la Cerrada del Río Castril, recorrer la Arboleda Perdida con la tranquilidad que nos da el acercarnos al final de ruta.
Recordar que este track es solo orientativo, antes de salir de ruta es aconsejable preparar bien el recorrido y ayudarse de gps/mapa para realizar la misma. El espacio natural está en continuo cambio.