Castell de Cabres: Circular hasta Coratxà

Impresionante excursión por las montañas de la despoblada comarca de la Tinença de Benifassà entre las poblaciones de Castell de Cabres y Coratxà recorriendo montañas, valles y prados.
La ruta comienza en el núcleo de Castell de Cabres (1.140 m.) a donde llegamos por la CV-105 desde el puerto de Torre Miró después de pasar Morella en dirección Zaragoza.
En el mismo pueblo, junto al Ayuntamiento, encontramos un panel con los diversos senderos de la zona. Nosotros vamos a seguir, en principio el PR-CV 75.9 en dirección al barrranco de la Saltadora. Abandonamos la población en dirección norte rodeando por la izquierda la pequeña muela que hay tras el pueblo y legamos a un pequeño collado (1.160 m.) desde donde comenzamos a bajar entre un espeso pinar. Al poco llegamos a un poste que marca el inicio de la senda que rodea el Tossal del Masset y se une después. Podríamos coger cualquiera de las dos direcciones pero elegimos la de la izquierda para bajar junto al cauce del barranco.
Seguimos bajando y empezamos a oír el rumor del agua corriendo por el barranco junto al cual pasa la senda y lo cruza en un par de ocasiones (ojo en época de fuertes lluvias). Salimos a un terreno un poco más abierto y al barranco se le une por la derecha otro con más caudal.
Decidimos ahora hacer un recorrido de ida y vuelta hasta las ruinas de un viejo molino que se sitúa unos pocos de cientos de metros más adelante siguiendo el cauce del río ya con el caudal de los dos arroyos anteriores.
Nos dirigimos pues hacia el molino por una desdibujada senda por el río y llegamos a él para ver lo que queda de la construcción y una gran chimenea que sobresale de los pinos. Desandamos la senda junto al río y llegamos al rellano anterior. Seguimos ahora en subida una pista que sale a la izquierda (según venimos del molino) durante unos cuantos zig-zags hasta llegar a un poste con flechas de madera. En ese punto abandonamos la pista y seguimos una senda a la izquierda.
La senda va subiendo entre pinos hasta llegar a cruzar el barranc Fondo que, en el día de hoy, era un rincón idílico de pequeñas cascadas de agua entre espesa vegetación de pinos y caducifolios.
Abandonamos el cauce y seguimos la senda en un tramo de fuerte subida que nos llevará hasta el Mas de Vilalta pasando antes por el abrigo de Caputxeres. Desde el Mas de Vilalta (1.140 m.) ya las vistas se van ampliando hacia los extensos pinares de los barrancos que acabamos de pasar.
Justo antes del mas un desvencijado poste de madera nos indica la dirección hacia la ermita de Sant Cristòfol que se encuentra unos 100 metros más arriba. Después de hacer unas fotos en el mas de Vilalta nos encaramamos por el último tramo de subida hasta llegar a las ruinas de la ermita de Sant Cristófol (1.250 m.) desde donde se contemplan unas extensas vistas en 360º de toda la comarca y de las cercanas tierras aragonesas.
Seguimos ahora camino por la misma cresta donde está la ermita en dirección Este hasta encontrar una pista (en realidad esta pista sale de detrás de la ermita) y la seguimos subiendo suavemente hasta llegar a un collado (1.295 m.) desde donde ya se ve Coratxà muy a lo lejos.
Avanzamos rápidamente por la pista por una zona llana de pastos hacia Coratxà al que llegamos sin más problemas.
Visitamos el pequeño pueblo (1.235 m. el segundo más alto de la provincia de Castellón) y subimos hasta la ermita de Sant Jaume (siglo XIII) para tener mejores panorámicas. Antes de la ermita hay que estar muy atentos porque las marcas blancas y amarillas del PR están bastante difíciles de ver.
Una vez encontramos las marcas las seguimos por un tramo paralelo a la carretera hasta llegar al Pont del Quinto (1.160 m.) en una revuelta en herradura de la carretera de acceso al pueblo. Junto al puente sale una pista a la derecha que enseguida se ramifica en dos. El PR CV 75.10 sigue hacia la izquierda por el cauce de un pequeño arroyo que sigue un assagador de ganado con un montón de vacas y terneros pastando (ojo de no molestarlos).
A unos doscientos metros hay que abandonar el assagador hacia la derecha tras pasar una portera. Comienza ahora una subida por una pelada cresta en dirección hacia una zona de pastos superior junto al Mas Nou (1.250 m.). Por esta zona la senda se desdibuja bastante pero el trazado es evidente a poco que se sepa de orientación. A la derecha del Mas Nou se divisa un collado a unos doscientos metros que es hacia donde hay que ir pasando antes junto a una balsa.
Una vez llegados al collado (1.260 m.) ya vemos cerca el Mas d'En Segures y al fondo Castell de Cabres aún lejos. Bajamos este collado por una senda evidente y marcada hasta llegar al semiabandonado Mas d'En Segures (1.190 m.). Seguimos ahora las marcas por un breve tramo de pista hasta que las marcas se desvían por senda a la izquierda.
Bajamos ahora por una descompuesta senda de piedras sueltas al carasol hasta que volvemos a circular de nuevo por un fresco pinar de umbría y sin perder las marcas llegamos a una zona baja (en el día de hoy corría un arroyo) donde las marcas amarillas y blancas llegan a una pista (hay que estar atentos por esta zona) que está a la derecha.
Siguiendo la pista llegamos a un cruce y las marcas amarillas y blancas siguen por un empedrado camino pasando junto a unos impresionantes pinos,.
Sin más titubeos llegamos a Castell de Cabres afrontando una última subida entre verdes prados.
En resumen.....una impresionante ruta de senderismo por las desoladas montañas de la Tinença de Benifassà donde ya se unen a la zona de Els Ports entre impresionantes bosques de pinos, enebros, encinas, robles, acebos, arces....mezclados con zonas más despejadas de prados y peladas crestas calizas. Sevisitan dos de los pueblos más pequeños y altos de la provincia como son Castell de Cabres y Coratxà que si nadie lo remedia acabarán siendo pueblos fantasma para pasar las vacaciones o los fines de semana. La señalética es bastante antigua, aún con postes de madera, aunque no resulta difícil seguirla. No obstante recomiendo llevar mapa de la zona porque ayuda mucho si surge alguna duda. Recorrido recomendable sobre todo en primavera y otoño, En verano puede resultar muy caluroso en las zonas más despejadas (aunque como circula por zonas a mucha altura no creo que sea asfixiante) y en invierno puede ser gélido y aún perdedor si la nieve tapa las marcas en el suelo.