Cascada 'El Monstruo de Millares' y Castillo de Millares
near Millares, Valencia (España)
Viewed 367 times, downloaded 10 times
Trail photos
Itinerary description
El Chorrador del Bosque o "El Monstruo", la segunda cascada más grande de la Comunidad Valenciana, un salto vertical de más de 60 metros de altura. Solo está superada por los Chorradores de Otonel, de alrededor de 70 metros, que se encuentran también bastante cerca.
El Monstruo de Millares recibe ese apodo por el gran rugido que emite tras fuertes lluvias, escuchándose incluso desde el pueblo.
Aparte de visitar esta espectacular cascada, durante nuestro recorrido pasamos además por el idílico rincón de la Fuente de las Donas y el Castillet, uno de los tres castillos medievales de la población.
Y de vuelta a Millares, aprovechamos para dar un pequeño paseo por este pintoresco pueblo, rebosante de agua que recorre sus calles por las acequias.
Un pueblo que tiene mucho que ofrecer y nos queda por explorar con más detalle en otra ocasión: castillos medievales, pinturas rupestres, cuevas y yacimientos con huellas de dinosaurios.
Ojo, a pesar de ser una ruta corta y sin demasiado desnivel, esto no es una ruta fácil. Hasta el Castillet es un paseo familiar, pero para llegar a la cascada el descenso se realiza por una pedrera con una pendiente muy pronunciada y con alguna destrepada por las rocas en el tramo final, un terreno no apto para todo el mundo.
Para evitar hacer este tramo por la pedrera de bajada, hemos realizado el recorrido a la inversa, en sentido antihorario, siendo así más fácil. Para senderistas experimentados no supondrá un problema, pero no es una ruta recomendable para hacerla con niños o para personas inexpertas.
DESCRIPCIÓN DE LA RUTA:
Aparcamos a la salida de Millares en la carretera principal por la zona de los contenedores, a la altura de un paso de cebra.
Tras unos metros por la carretera, nos desviamos por un camino que desciende entre las huertas de la población por el Barranco del Nacimiento a la Fuente de las Donas.
Un bonito rincón fresco y sombrío, con una pequeña área recreativa y una cascada. Al fondo de una gruta sale el manantial de agua de la Fuente de las Donas, que alimenta con su agua cristalina un pequeño estanque, buen lugar para refrescarse. El mismo nombre de la fuente ya nos sugiere su carácter mágico y especial.Tanto si el origen de las Donas son los dones que posee, como si se refiere a las hadas que en ella habitarían.
Desde la fuente el sendero sigue el curso del barranco, pasando por un azud y al lado de la acequia, hasta llegar a un puente arqueado que cruza el Barranco del Nacimiento.
Bajando una escalera después de atravesar el puente, encontramos la Fuente de los Escalones. Aquí se forma una bonita cascada si el arroyo lleva suficiente caudal, y al otro lado del barranco vemos los restos del Molino de Diego, uno de los muchos molinos situados a orillas del barranco.
Remontamos los escalones para continuar por una preciosa senda acondicionada con cuerdas a modo de barandillas, que nos conduce hasta el Castillet.
El Castillet, o Castillo de Abajo, se alza majestuoso desde un promontorio de roca sobre la huerta de Millares, dominando el cauce del Júcar al este del término municipal.
Es la mejor conservada de las tres fortalezas medievales que se encuentran en Millares. Se suman a la larga lista de castillos que vigilan el río Júcar en su tramo medio y que lo convierten en una de las zonas con mayor densidad de fortalezas islámicas del este peninsular.
Del Castillet se conserva todo el recinto amurallado, así como la torre principal, de planta cuadrada.
Tras visitar el castillo y disfrutar de unas vistas panorámicas privilegiadas desde allí, seguimos nuestro recorrido en búsqueda del Monstruo.
Al salir del recinto del castillo no tomamos el sendero señalizado hacia la cascada a la izquierda, que nos conduciría por la senda de Sansón en un tramo con fuerte pendiente y en parte por una pedrera por terreno inestable, no exento de riesgo. Preferimos hacer este tramo a la vuelta de subida, siendo así más fácil.
Así que tomamos ahora una senda no señalizada pero bastante evidente, que atraviesa en suave descenso una zona de antiguos bancales, discurriendo casi paralela a un tendido eléctrico.
Al cabo de 300 metros enlazamos con un camino más ancho, por el que continuamos la bajada. Tras un giro del sendero seguimos paralelo al Cañón del rió Jucar, obteniendo unas fabulosas panorámicas del río en su recorrido encajonado entre montañas, y más adelante del castillo y de la cascada desde lejos. A ratos la bajada es bastante pronunciada y hay que avanzar con cuidado, pero aún así es preferible a la bajada por la pedrera.
Finalmente llegamos al cruce con la Senda de Sansón, la senda que baja de forma más directa a la cascada y por la que emprenderemos luego a la vuelta la subida. Lleva su nombre en memoria del perro que acompañaba a quien recuperó dicha senda.
Desde el cruce se realizan los últimos 100 metros de bajada al "Monstruo", durante los que tendremos que realizar algún destrepe sencillo por las rocas. Tras cruzar el arroyo del Barranco del Nacimiento sobre piedras, nos encontramos delante de la impresionante cascada, "El Monstruo" de Millares o el Chorrador del Bosque.
Las palabras se quedan cortas para describir esta maravilla de la naturaleza. Es la segunda cascada más grande de la Comunidad Valenciana, un salto vertical de más de 60 metros de altura.
Cae con una fuerza tremenda y un ruido atronador, sobre todo tras época de fuertes lluvias. Es un sitio popular para practicar barranquismo y no es raro encontrarse a gente descolgandose por la cascada.
La densidad de la vegetación que rodea la cascada recrea un ambiente casi tropical. Un lugar grandioso donde disfrutamos a la sombra de unas higueras de la belleza de este salto espectacular, y nos refrescamos en la poza que se forma en la base de la cascada.
Después de haber disfrutado debidamente del paraje, toca el regreso. Refrescados iniciamos la subida. Tras una corta trepada volvemos al cruce, donde seguimos por la derecha las indicaciones de la Senda de Sansón, recorrido perfectamente señalizado con unas paletas de madera muy monas con las huellas del perro Sansón (o acaso del monstruo?). Al poco rato llegamos a la pedrera que rodeamos por su margen izquierda, en parte por terreno bastante inestable con piedras sueltas y una pendiente muy empinada. Desde luego es más seguro hacer este tramo de subida. Al cabo de 40 metros la Senda de Sansón continua ya por terreno más estable.
La senda original se había construido con 114 escalones de cemento, aunque gran parte de ellos están demasiado deteriorados como para usarlos y es mejor usar la senda paralela a ellos. Tras un tramo final por unos escalones aún en buenas condiciones, llegamos a la ruinas del Molino de los Moros con un pino casi derribado junto a él, que lo cruza por delante.
Desde el molino ascendemos un poco más y llegamos a la parte alta de la cascada del Salto del Monstruo, con un pequeño puente de madera y un mirador que ofrece estupendas vistas del barranco y desde el que se observan los restos de otro molino.
Tras regresar por el puente desde el mirador, nos encontramos en un cruce en el que confluyen tres sendas: a la izquierda la Senda de Sansón, por la que acabamos de subir, en medio una senda señalizada que sube al Castillet, que descartamos, y a la derecha una senda en la orilla izquierda del barranco, cuya salida está algo escondida entre la vegetación y que vamos a tomar ahora.
Esta senda remonta el Barranco del Nacimiento a orillas de su pequeño arroyo, que tendremos que cruzar en varias ocasiones sobre piedras. La senda no está señalizada pero se sigue perfectamente y el entorno del barranco es muy bonito y recién desbrozado de vegetación. Durante este tramo por el barranco nos encontramos con los restos de dos molinos, el Molí del Señor Pere y más adelante el Molí de Diego, ejemplos de como se aprovechaba la fuerza del agua para instalaciones hidráulicas.
Después de pasar el segundo molino enseguida llegamos al puente de la Fuente de los Escalones, punto a partir del que nuestro recorrido se solapa con el tramo inicial.
Durante la subida al pueblo volvemos a pasar por la Fuente de las Donas, un muy buen lugar para descansar un poco, disfrutando de la compañía del agua en su recorrido por el barranco.
Después de la ruta aprovechamos para visitar en un corto paseo parte del pueblo por sus calles serpenteantes, con sus casas blancas y el sonido del agua que recorre el pueblo por las acequias, pasando por la iglesia y el lavadero morisco.
En resumen, esta es una ruta corta en kilómetros pero con imágenes inolvidables, donde la naturaleza se muestra especialmente deslumbrante. Como hemos dicho, no es una ruta apta para todos y conviene leer bien la descripción y mirar las imágenes, para hacerse una idea del tipo de recorrido que es. Senderistas con experiencia en la montaña lo van a disfrutar mucho☺️
Si te ha gustado la ruta y mi descripción, no olvides de dejar un comentario y valoración con estrellas, que siempre se agradece un feed-back🤗
Waypoints
Fuente de las Donas
Fuente de las Donas EI mismo nombre de esta fuente ya nos alerta de su carácter mágico, expecial. Tanto si el origen de Donas son los "dones" que posee o si se refiere a las Hadas que en ella habitarían, la Fuente de las Donas posee un poder de atracción irresistible para cualquiera que la visite en cualquier momento del año. El agua, con sus aportes calcareos inapreciables, pero constantes ha moldeado la fuente, le ha dado la forma con que la admiramos. La continua precipitación de carbonato cálcico, de cal, sobre las hojas caidas, sobre otras piedras va formando las capas de piedra tosca, o travertino, de apariencia leve y retorcida. ¿Sabias que, por sus caracteristicas, la piedra tosca ha sido utilizada desde antiguo en la construcción de edificios como, por ejemplo, el Coliseo de Roma?
Fuente de los Escalones con cascada y vistas Molino de Diego. Volver al camino arriba
Izquierda al castillo
El Castillet o Castillo de Abajo de Millares
El Castillet Es el castillo mejor conservado de la localidad y ejercía una importante labor de control sobre el estratégico camino que discurria junto al cauce del río, comunicando Castilla con Xátiva, motivo por el que todo el territorio presenta torres de vigía y castillos. El Rey Jaime I en 1256 donó en Tarazona a Ato de Foces las villas y castillos de Madrona, Millares y Dos Aguas. En estos castillos y sus términos tiene su señor toda jurisdicción que el rey don Pedro otorgó a don Ramón Castellá en 1349 y Otrosí le vendió el castillo de Madrona en 1353. Giner Rabasa de Perellós, compró Dos Aguas y Madrona en 1496. Millares fue una población importante en época musulmana, como se desprende del hecho de que en 1257, conquistada por Jaime 1, tributara a la Corona con 200 besantes. La mayoría de sus habitantes eran moriscos, quienes contaban con 53 casas en 1563 y con 80 casas en 1609, año que fue decretada su expulsión. Muchos se negaron a acatar el decreto y, junto con los moriscos de las poblaciones vecinas, se refugiaron en la Muela de Cortés, donde resistieron a las tropas reales, pero fueron derrotados finalmente. El pueblo quedó casi deshabitado y la corona hubo de indemnizar al Señor de la baronía por los perjuicios ocasionados al privarle de mano de obra que trabajase sus tierras. El castillo de Abajo se encuentra en las proximidades de la población de Millares, sobre un promontorio, que domina el cauce del Júcar al este del término municipal. Se conserva todo el recinto amurallado, así como la torre principal, de planta cuadrada, asentado sobre un macizo de roca. Su fábrica es de tapial de piedra.
NO tomar senda izquierda de bajada señalizada, sino seguir recto por senda entre antiguos bancales
Puente y mirador del Molino. Luego volvemos para continuar por orilla izquierda del barranco.
Continuar por orilla izquierda del Barranc del Naixement. Habrá que cruzar el arroyo sobre piedras en varias ocasiones
Tras volver a atravesar el puente desde el mirador, nos encontramos en un cruce en el que confluyen tres sendas: a la izquierda la Senda de Sansón, por la que acabamos de subir, en medio una senda señalizada que sube al Castillet, que descartamos, y a la derecha una senda en la orilla izquierda del barranco, cuya salida está algo escondida entre la vegetación y que vamos a tomar ahora.
Vadear arroyo sobre piedras
El Molino de Diego
El Molino de Diego El agua que corre por el barranco, la misma que se había usado para el riego, para limpiar y para beber, tenia todavía una utilidad más como fuerza de tracción para mover las pesadas ruedas de piedra que habían de moler el grano para hacer la harina. A pesar del paso del tiempo, el abandono y el cambio de funcionalidad, el molino aun conserva la acequia, el pozo, la muela fija, el saetín y el cárcavo. El Molino de Diego, con su sistema de rueda horizontal, es un buen ejemplo de lo que ha sido la evolución general de los molinos en tierras valencianas. El edificio que aloja el molino pudo sufrir remodelaciones con el tiempo, pero es muy probable que al sistema hidráulico se remonte al periodo islámico. Ya en 1930 este molino sólo se utilizaba en momentos de fuerte demanda de harina. Por norma se utilizaba el Molino del Señor que se encontraba a los pies del Castillo de la plaza del pueblo del que, actualmente, tan sólo quedan los basamentos derruidos.
Derecha
Derecha a iglesia
Iglesia Transfiguración del Señor
IGLESIA TRANSFIGURACIÓN DEL SEÑOR La Iglesia de Millares se asienta sobre la precedente mezquita tras la repoblación cristiana en el siglo XIII. La Iglesia que hoy conocemos fue construida, probablemente utilizando alguna estructura anterior, en el siglo XVII, siendo remodelada y ampliada en 1789 para dar cabida al creciente número de fieles. La fachada de construcción sencilla posee sobre la puerta una hornacina con la imagen del sagrado corazón de Jesús. Y la torre campanario alberga las campanas, el reloj y el curioso acceso a la plaza por debajo de la misma, posiblemente elemento de protección y cerramiento de la población. En el interior encontramos en el altar mayor un sencillo retablo barroco de escayola policromada con la talla en madera de la imagen del Santísimo Cristo de la Salud, así como las imágenes correspondientes de San Roque, San Antón, San José y San Blas, patrono de Millares, todas ellas de escayola.
El Carcou. Seguir curso de acequia
El Carcou El cárcavo o carcou, como se conoce en Millares, es la galería, generalmente abovedada, situada bajo el suelo del molino y que albergaba el rodete, el árbol, el dado, la botana y el aliviador. Desde allí el agua volvía a la acequia. Siguiendo el recorrido del agua tras abandonar la fuente del Hinchidor, el caudal llega al molino y tras mover las piedras del molino, el agua se desviaba en dos acequias, una que se devolvía a la acequia de Las Forquetas y otra que, a su vez dividida, llegaba a las partidas de La Solana y El Llano.
Derecha subida
Abrevadero
ABREVADOR Esta construcción, común en casi todas las localidades, tenía como misión la de saciar la sed de las caballerías al finalizar la jornada de trabajos agrícolas. Sus aguas provienen del sobrante del caudal con el que, hace más de cincuenta años, se abastecía la población en la fuente del Hinchidor y se regaban las partidas de huerta. El agua se almacena en un embalse oculto hoy a la vista bajo el piso de la plaza del Hinchidor. El abrevador de Millares tiene tres vías de llenado: a la izquierda, el agua sobrante de la fuente; en el centro, el desagüe de fondo de la balsa que se regula con una válvula manual; y a la derecha, el agua que vierte el aliviadero de la balsa cuando ésta se ha llenado por completo. Todo el volumen de agua que vemos correr por el abrevador proviene del manantial de las fuentes del Nacimiento. Posteriormente la veremos de nuevo aparecer en el lavadero morisco del Clot. En otros tiempos, después de su uso en este lavadero, el caudal era utilizado para mover el molino harinero de la casa señorial y, finalmente, se utilizaba para el riego de las huertas.
You can add a comment or review this trail
Comments