CASA LLUÍS VILAPLANA - ALTO DE PERET - CASERÍO FERMOSAS - ALTO DE CASTALLA - ALTO DEL BUBO - CASA DE LA COSTA (CIRCULAR)

Desde el pasado mes de enero, tras hacer una ruta que nos condujo hasta el Alto de Castalla y el Alto del Bubo (entre otros), teníamos pensado hacer una ruta que compartía el tránsito por ambos altos pero subiendo también al Alto de Peret, siguiendo el track de pausalamandra. Ni cortos ni perezosos nos decidimos a realizarla en este primero de mayo, pero el GPS de nuestro coche nos confunde y, en vez de llevarnos directamente a la Partida Caprala, nos lleva a la Rambla de Puça. Conscientes del error intentamos acercarnos lo más posible hasta la Partida Caprala, pero, tras un tramo de pista sin asfaltar, decidimos aparcar el coche en un cruce de cuatro caminos enmedio de la Partida Esquinal y comenzar a caminar en busca de la parte final del track de pausalamandra. Es una fría mañana con mucho viento, así que empezamos a caminar con bastante velocidad hasta que, tras cruzar el Barranco de Mariano, enseguida alcanzamos la Casa de Lluís Vilaplana, ya en la parte final del track de pausalamandra. Seguimos hacia adelante en busca de la pista que viene desde el Albergue El Avaiol y recorremos el sorprendente Barranco de Quixal para enseguida llegar a la zona de chalets de la Partida de Caprala, donde realmente comienza el track de pausalamandra. Girando a la derecha remontamos la empinada pista asfaltada, para darnos cuenta de que el lugar por el que pausalamandra giró a la izquierda se encuentra vallado en la actualidad. Seguimos un poco hacia adelante para finalmente poder rodear la valla y enganchar de nuevo el track que rápidamente empieza a subir por una zona con mucha piedra y mucha pendiente. Ésta es, sin lugar a dudas, la parte de más exigencia física de la ruta, ya que la subida es constante y el desnivel es considerable. Poco a poco, sin prisa, pero sin pausa, vamos ascendiendo, disfrutando de las vistas de la Sierra del Cid a nuestra derecha, de Sax a nuestra espalda y del Chocolate a nuestra izquierda. A veces no queda muy claro por donde hay que continuar, pero en fin, está claro que hacia arriba recto llegaremos a buen puerto. Por fin, no sin esfuerzo, la pendiente se relaja un poco y finalmente llegamos al Alto de Peret (981 msnm), cuyo monolito de piedras casi nos perdemos ya que hay que desviarse un poco a la derecha de la senda para visitarlo. Enseguida regresamos a la senda y, tras pasar bajo los cables de alta tensión, cruzamos una cadena y comenzamos a seguir una pista muy bien definida que se introduce en el interior de una finca particular (el tránsito para vehículos está prohibido, asumimos que para los peatones no). Tras un leve descenso, la pista va ascendiento tenuemente, de forma casi imperceptible, hasta que un nuevo descenso pronunciado, obviando el atajo de pausalamandra, nos conduce a una pista que cogemos a la derecha y que pronto nos conduce a las ruínas del Caserío Fermosas, lugar que ya visitamos hace unos 4 años en la decimocuarta ruta del reto 20/20, pero en aquella ocasión partiendo desde los alrededores de Castalla. Continuamos recto, y tras parar unos cortos minutos (hace bastante viento y la sensación térmica es muy baja) para recuperar unas pocas fuerzas, cruzamos otra cadena (abandonando por fin la finca particular) hasta alcanzar el Collado Roque, lugar que también visitamos en la ruta del pasado mes de enero. Giramos a la derecha e iniciamos el corto pero intenso ascenso hasta la bifurcación que, girando a la izquierda, nos conduce al Alto de Castalla (1107 msnm), lugar que tambien visitamos el pasado mes de enero (de hecho recorrimos el mismo camino hasta el Collado Roque pero en sentido inverso). Después volvemos sobre nuestros pasos mientras comienza a llover tenuemente y el viento cada vez sopla con más fuerza y una vez en la bifurcación cogemos el sendero de la izquierda que tras un largo trayecto (acelerando el paso para intentar acercarnos cuanto antes al final de la ruta ya que la lluvia más que cesar se intensifica) con tenues subidas y bajadas nos permitirá recorrer todo el cordal de la Sierra de Castalla y que finalmente engancha con la pista por la que ascendimos el pasado mes de enero. Unos cientos de metros más adelante, tras sortear numerosos árboles talados, alcanzamos por fin el Alto del Bubo o de las Hermosas (1067 msnm). La lluvia y el viento siguen acompañándonos mientras continuamos hacia abajo, siguiendo exactamente el mismo trayecto que en nuestra ruta del pasado mes de enero. La bajada presenta mucha pendiente y es muy pedregosa, por lo cual hay que tomársela con calma para no resbalar, más incluso teniendo en cuenta que ahora empieza a llover con cierta intensidad y el viento sigue soplando muy fuerte. Poco a poco, tras poco más de un kilómetro, enganchamos a la izquierda una pedregosa pista con mucho menos desnivel, justo cuando deja de llover y el viento amaina bastante. Dicha pedregosa pista engancha con otra y enseguida giramos a la derecha (aquí abandonamos ya la parte de la ruta compartida con nuestra ruta del pasado mes de enero) para seguir el track de pausalamandra y alcanzar la Casa de la Costa. Una vez en la misma giramos a la izquierda, abandonando ya el track de pausalamandra y, tras atravesar de nuevo el Barranco de Mariano, seguir recto y superar un tramo con cierta pendiente, nos acercamos, en poco más de un kilómetro, hasta el cruce de los cuatro caminos junto al cual hemos dejado aparcado el coche. Transitando por parajes realmente cautivadoras, este complemento de nuestra ruta del paasado mes de enero, nos ha cautivado sobremanera, si bien la subida inicial al Alto del Peret es bastante exigente y luego la lluvia y el viento han conseguido minar nuestro moral, además del descenso final desde el Alto del Bubo que no es apto para todos los públicos y que hay que tomarse con mucha calma. En cualquier caso una experiencia más que recomendable, a ser posible con mejor tiempo, por estos parajes cercanos entre Petrel y Castalla. Con Sonia (01-05-2024).