Canteras de Serpentina-Cortijo del Hoyo-Loma del muerto-Loma de Cabañas Viejas-Cortijo del Hornillo. Nocturna. PN Sierra Nevada.

Llegamos hasta el Parking del Rinconcillo al Barranco de San Juan para llegar hasta las abandonadas Canteras de Serpentina o de San Juan. Yacimientos, de extracción al aire libre, que se mantuvieron activos hasta finales de los años sesenta. La serpentina es un mineral compuesto por silicato de magnesio hidratado y se denomina así por las bandas verdes que tienen. De ellas se sacó piedra para decorar numerosos edificios de Granada pero también de El Escorial y de las Salesas, en Madrid. De esta serpentina son, por ejemplo, los medallones que hay en los pilares de la fachada de la Chancillería.

Para ilustrar la explicación y pasar por gramático he buscado la definición de serpentina pero me he encontrado una cosas geológicas complicadísimas e incomprensibles. Me parece más clara la que hace el diccionario de la Real Academia en su acepción tercera: "Piedra de color verdoso, con manchas o venas más o menos oscuras, casi tan dura como el mármol, tenaz, que admite hermoso pulimento y tiene mucha aplicación en las artes decorativas." Aquí en el campo, en basto, entre la tierra y el barro, hay que fijarse mucho para encontrarle el encanto pero cuando se limpia y pule es bonita y de aspecto noble parecida, en efecto, al mármol.

Pasadas las canteras de Serpentina o de San Juán nos disponemos a subir la Loma de las Rascas, una larga cuesta zigzagueante sube atravesando el robledal que hay que tomársela con calma y más si vas cargado como nosotros.

En el Cortijo del Hoyo encontraremos un cartel informativo sobre la vida en la sierra que nos describe como los primeros pobladores trabajaban la tierra y vivían en unas condiciones muy duras cultivando entre otras cosas la patata copo de nieve. Patata autóctona de Güéjar Sierra Realmente, merece la pena parar un momento a leerlo, porque sin duda le da sentido a la gran cantidad de cortijos abandonados que solemos encontrar. Vivieron una vida comprensiblemente durísima, sin más compañía que ellos mismos y el ganado, sin más comunicación y transporte que los mulos y las malas veredas. Estas sierras que a nosotros nos parecen tan hermosas, fueron el áspero lugar donde mucha gente gastó su pobre vida. Sorprende comprobar como aprovechaban cualquier llanete, cualquier sitio que no fuese un puro despeñadero, para arañar bancales mínimos en los que obtenían cosechas casi de pura supervivencia.

Un poco más arriba, tras culturizarnos con la lectura y disfrutar de las vistas, encontraremos un cruce perfectamente señalizado en el que se indica el camino a seguir hacia el Cortijo del Hornillo. Desde aquí sólo hay que seguir la Loma del Muerto, la cual es muy clara y fácil de andar, puesto que no presenta casi ninguna subida. Como dato de interés comentaros que llegado a este punto os encontraréis cruzando el bosque de roble Melojo situado a mayor altitud en la Península Ibérica donde este sendero nos llevará sin perdida ninguna hasta Cabañas Viejas, donde esté refugio hemos pasado las mejores noches en mis inicios como montañero, pero la visita de Cabañas Viejas la hemos dejado para otro dia y bordeamos la Loma de Cabañas Viejas. Tan sólo un pequeño repecho al final, justo antes de llegar al Mirador del Hornillo.

La vereda es bastante agradable, por su facilidad y por cruzar tantisimos robles. Sobre el roble melojo también encontraremos un cartel explicativo que nos cuenta sus características y la importancia de su conservación.

Seguimos caminando hasta el Mirador del Hornillo donde encontraremos otro cartel explicando la panorámica de los tresmiles que contemplamos desde tan privilegiado lugar. Para mí y para muchos el mejor visor de las Nortes de Sierra Nevada. Desde aquí ya divisamos nuestro proximo destino que se encuentra a tan sólo unos metros más adelante. Decir del cortijo del Hornillo lo mismo que del anterior, el del Hoyo. Este está en pie y muy conservado, con sus techos de pizarra sirviendo de refugio para montañeros y para los trabajadores forestales. En sus cercanías se ha recuperado una vieja alberca, cercada para proteger a la población de anfibios que aloja y en la que se refleja boca abajo de la Cara Norte del Sulayr. Aquí finalizamos la ruta donde hemos pasado una noche a lo grande a la vera de la chimenea y con grandes personas como son mis amigos. Desde aqui les doy las gracias por una noche inolvidable. Una noche para enmarcar.

EN LA MONTAÑA NO HAY QUE DEJAR HUELLA, AL NO SER QUE SE LA DE TUS BOTAS.

Salud y montaña y que los Yetis nos sigan protegiendo.

_____________________________


TODO LO DESCRITO EN MIS TRACK SON OPINIONES PERSONALES SUBJETIVAS Y NO IMPLICAN NINGUNA GARANTÍA. LA RUTA PROPORCIONADA ES UNA ORIENTACIÓN APROXIMADA Y NUNCA UNA VERDAD ABSOLUTA. ES RESPONSABILIDAD DE CADA UNO TOMAR LAS PRECAUCIONES NECESARIAS Y VALORAR SU CAPACIDAD PARA AFRONTAR LOS RIESGOS DE LA MONTAÑA.

LA DIFICULTAD CON LA QUE CATALOGO MIS RUTAS ESTÁ REFERIDA PARA MONTAÑEROS HABITUADOS A CAMINAR, QUE SE DESENVUELVEN CON SOLTURA POR TODOS LOS TERRENOS, NO PARA SENDERISTAS OCASIONALES. SI TIENES POCA EXPERIENCIA, AÑÁDELE UN GRADO MÁS A LA DIFICULTAD DE MIS RUTAS PARA NO LLEVARTE SORPRESAS.

Utilizo Wikiloc como copia de seguridad: algunas rutas están incompletas, otras son de investigación o contienen errores. Si usas el track, la responsabilidad es solo tuya.