Can Casades, Secuoyas, Fabriqueta, Pantano Santa Fe, Haya, Acueducto, Dalt i Cal Ferrer, Salt i Bassa Corbera

Uno de los parajes del Vallés Oriental, mas espectaculares que se pueden hacer, es seguir el cauce de la Riera Santa Fè, empezando en Can Casades, el hostal en forma de castillo y la peculiar Ermita Santa Fe, transcurrir a través del río con sus pequeños saltos y balsas, "La Fabriqueta", el Pantano, la presa, los restos del acueducto ya mimetizados con el entorno, bosques tupidos y gigantescos de hayedos, castaños y robles que parecen surgir de una alfombra infinita de millones de hojas ocres, las rocas graníticas, formando formas geometricas, con planos paralelos, parecen talladas por el hombre con herramientas de precisión, diseminadas aleatoriamente.
Por si fuera poco, tres Secuoyas gigantescas, el tocón de una de ellas abatida por un rayo, una curiosa casa partida en la que los dueños no se pusieron de acuerdo, pero ante todo esto una gran decepción, el pantano está prácticamente vacío a un 15% de su capacidad, un broche que hubiera dejado este entorno como paradisiaco. Las hayas son unos árboles lisos y blanquecinos pero que sus raíces y ramas presentan unas típicas curvaturas enrevesadas de hojas pequeñas de un verde luminoso muy espectacular, encendido con los escasos rayos de sol que se cuelan entre la frondosidad, lo que unido al ocre dominante nos da unos contrastes absolutamente magníficos en lo que a color se refiere.
Si es la primera vez que vais, ir preparados porque se os quedará la boca abierta,
Una gran parte de este recorrido he utilizado un track de Oct'22 pero que la subida fue por un sendero bastante roto, GPS imprescindible Salt Corbera.

Lugares de interés:
Hostal Santa Fe
Ermita Santa Fe
Salt d'Aigua l'Estanyol
La Fabriqueta
Pantà Santa Fe
Tocones emergidos del fondo
Acueducto
Central eléctrica de Dalt i Cal Ferrer
Esquei gigante
Salt de Corbera
Bassa de la Corbera
Masía Figarolas
Empedrat Morou
Riera Santa Fe
Balsas y saltos de agua

Recorrido
El entorno ya nos maravilla durante el ascenso de unos 15 km desde Campins mientras abandonamos la población y tras el ascenso, la estrecha carretera, jalonada por hayedos a uno y otro lado, cambiando totalmente el entorno y la luz a medida que supera diversas alturas, alfombras ocres y árboles lisos y blanquecinos (hayas) a uno y otro lado por no hablar de rocas inmensas y pequeños túneles, con unas vistas proporcionales a la altura que vamos adquiriendo.
Una vez aparcamos en Can Casades y después de admirar las tres inmensas secuoyas en la entrada, pasaremos por un puente por encima del arroyo de Santa Fe.
A partir de aquí bordeamos el pantano por la izquierda, unas pasarelas de madera evitan que nos mojemos ante las múltiples pequeñas aportaciones de agua a la riera provenientes de la montaña, una vez en el pantano en fase terminal, podemos ver casi toda la obra que permanecía sumergida y unos curiosos tocones en la orilla, se atraviesa el pantano, visitamos la haya del Pantà Gran y bajamos por la pista ancha que está en la parte opuesta al pantano.
A partir de aquí tenemos un descenso tendido entre bosques de hayas, robles y castaños de altura inmensa, una experiencia muy agradable es el propio sonido en soledad, una imperceptible racha de viento en las copas provoca la caída las castañas (verdes) sucesivas golpeando entre las hojas, para que te caigan en los pies, en una parte del descenso se vuelve un pedregal al lado de unos acueductos dobles, uno de ellos parece de carbono pero que van dibujando el perfil del descenso y salvando las alturas, en la parte baja del camino llegamos a la Central elèctrica de Dalt i Cal Ferrer, hay un pequeño estanque, con un desbordamiento de agua y un puente, se sigue por alli en un sendero ascendente, en este caso probé un desvío a la izquierda que me llevó a un esquei, grimpando un poco se llega al punto de intersección a la izquierda encontraremos un desvío para el Salt de Corbera, hay una parte del camino rota, por un pedregal, la cascada en un entorno idílico baja con un hilillo de agua a pesar de la regulación del caudal de la riera de santa Fe (a través del pantano).
Para la vuelta renuncio al ascenso por el camino estrecho al ir solo, pues se complica bastante, de modo que bajo por el camino oficial hasta la Central Eléctrica y desde allí repetir la pista ascendente, se pierden los 60 metros de ascenso, pero se gana en tranquilidad.
Tomamos la izquierda hasta llegar otra vez a la presa, la volveremos a atravesar para volver a Can Casades por la izquierda, pues es un sendero que pasa a la misma altura que el rio, para disfrutar de sus espacios bucólicos, gorgs, rocas muy lisas y hayas, al final del camino se puede cruzar el río sin dificultad (el caudal de hoy en día nos lo permite) y salimos a la altura del parking y volvemos al lugar de origen.

No te pierdas:
Secuoyas, Fageda, Esquei i Empedrat Morou

PD Botas resistentes, abstenerse en caso de lluvia, el tramo después del Salt de Corbera requiere GPS en buen estado y buena tracción en las piernas.
Mejor subir y bajar por el tramo de bajada.