Etapa 1ª-Camino Uclés-Madrid(Iglesia Santiago)-Morata de Tajuña

Ruta muy bien señalizada que empieza en la Iglesia de Santiago y San Juan Bautista en el centro de Madrid.
Vemos la primera flecha en la fachada,en la esquina superior izquierda que nos indica la direccion.Seguidamente cruzamos el Palacio Real y atravesando enseguida por detras de la Catedral de la Almudena para acceder en poco tiempo a Madrid Rio,que continuaremos sin dejarlo pegado al rio por el carril bici y que en unos km más adelante accederemos al parque lineal del Manzanares,un paseo pegado al Río y tranquilo,comenzaremos a ver flechas rojas del Ucles para seguir que sin perdida nos llevara a Rivas,La Poveda y Arganda para coger el anillo verde ciclista hasta Morata.

UN POCO DE HISTORIA DEL CAMINO UCLÉS

Esta ruta es de peregrinación y Hacia el Monasterio de Uclés y que puede continuar por el camino de la lana una vez llegado a Cuenca.
En el caso de este camino que comunica el centro mismo de Madrid, con el Monasterio de Santiago, conocido como Monasterio de Uclés, en la provincia de Cuenca. Se trata del segundo lugar de peregrinación en honor a Santiago el Mayor, a menudo pierde importancia por la Catedral compostelana en Galicia.
Comenzar el Camino de Uclés desde Madrid puede darte una manera distinta de lo que es la peregrinación, ya que se trata de una ruta que progresa hacia el Este y va penetrando en La Mancha,aportando una perspectiva completamente diferente a tu experiencia personal y espiritual.
Tras la conquista de estas tierras por el ejército cristiano del rey Alfonso VII, este cedió la fortaleza a la Orden de Santiago, convirtiéndose en su base central dentro del territorio español. Poco a poco, la construcción fue aumentando en tamaño al ser añadidas varias dependencias para que todos los miembros de la orden tuviesen cabida.
Dicha orden fue creada, en el siglo XII, con el objetivo militar de proteger a los peregrinos del Camino de Santiago y luchar contra los musulmanes.
Una vez conquistada toda la península, y haber puesto fin al dominio musulmán, la fortificación de Uclés tuvo una remodelación importante. Sus elementos defensivos ya no se precisaban y fueron derribados. Todos menos las murallas, las cuales se conservan hasta día de hoy.
No fue hasta el año 1529 cuando, bajo el reinado de Carlos I,se comenzó a construir el monasterio de Uclés que podemos observar en nuestros tiempos. Además, se le añade una iglesia contigua que, sumado con varias obras a mayores, provocaron que el fin de sus obras se postergase hasta el reinado de Felipe V, en el año 173 .
Tras ser dañado por el ejército napoleónico durante la Batalla de Uclés, en el siglo XIX, y debido a varios cambios que afectaron a todo el país, en el año 1836 la Orden de Santiago perdió la posesión de esta edificación. Este momento fue clave en el declive de esta construcción ya que, a partir de ahí, pasó a desempeñar otras funciones.
A comienzos del siglo XX se convirtió en un colegio de enseñanza hasta que, en el año 1936, en plena Guerra Civil española, el lugar fue saqueado y su interior, destrozado, pasando a ser, provisionalmente, un hospital.
Una vez finalizada la Guerra Civil, el monasterio pasó por sus tiempos más oscuros, ya que se convirtió en una prisión destinada a los presos políticos republicanos, siendo el lugar de fallecimiento para muchos de ellos (se estima que fueron casi 300 los fallecidos).
En el año 1943, la prisión se cerró y pasados los años, con una remodelación de por medio, en el año 1949 el monasterio volvió a desempeñar la función cristiana para la que fue creado, pasando a formar parte del seminario menor del obispado de Cuenca
La reaparición de la ruta que llevaba hasta el monasterio tuvo lugar hace muy poco tiempo. Tras haber sido olvidada durante muchos años, Manuel Rossi, un apasionado del Camino de Santiago, conoció esta ruta a través del sacerdote Julián de Cuenca en el año 2010.
Tras un año de intensas investigaciones sobre su origen y la orden de Santiago, el Camino de Uclés se recupera oficialmente en el año 2011. Desde este momento, Manuel Rossi ha continuado con la promoción de esta ruta hasta el punto de crear con sus propias manos las señales que caracterizan esta ruta, las flechas rojas con la cruz de la Orden de Santiago.
Ruta sencilla y bonita apta para todos los que tengan un mínimo de forma física de entrenamiento. Se recomienda llevar agua y gorra por las altas temperaturas en verano