Camino de Santiago Francés. Etapa 19: Carrión de los Condes - Ledigos

Última etapa de este año, el que viene espero poder rematar el Camino Francés. 492 kilómetros caminados en diecinueve días, más de la mitad del recorrido hasta Santiago de Compostela, aunque mi idea será llegar a Finisterre (cuando hice la Vía de la Plata, en 2019, no llegué hasta Fisterra). Pero eso, por ahora, no son más que planes.

La jornada de hoy es, para muchos, de las más costosas de realizar, no por exigencia física sino mental. Y es que entre Carrión de los Condes y Calzadilla de la Cueza hay una interminable recta de quince kilómetros de pura monotonía que ponía a prueba la resistencia del peregrino. Hoy ese reto queda roto debido a la instalación de un bar a mitad de camino.

La salida de Carrión se hace junto al Monasterio de San Zoilo, y al llegar a la N-120 tenemos la opción de tomar una variante junto a ella, algo más larga y que pasa por Calzada de los Molinos. Fuera de eso, no tiene pinta de que haya ningún otro aliciente para escoger dicha variante, así que tiro recto, como casi todo el mundo, y me mentalizo para atacar los quince kilómetros que tengo por delante.

Y lo cierto es que los he pasado bastante bien. Mentalmente lo tenía asimilado, y físicamente he puesto el piloto automático, imponiendo un ritmo constante que sólo cesaba cuando paraba a hacer alguna foto.

Con todo, se hace larga la dichosa recta, cuyo final adivinamos con casi tres kilómetros de antelación, al divisar la torre campanario del cementerio de Calzadilla de la Cueza. Aun así, desde que la vemos hasta que llegamos pasará media hora fácilmente.

El pueblo nos recibe con un par de albergues con bar, cuya parada es inevitable si, como yo, pasaste de largo el puesto de mitad de la recta.

A la derecha podemos acercarnos a la Iglesia de San Martín, y como el cementerio está ahí mismo se me ha ocurrido acercarme y me he llevado la sorpresa de poder subir a la entrada del campanario.

De vuelta al Camino, encaramos el último tramo, circulando por un andadero junto a la N-120, que vuelve a cruzarse en nuestro camino.

A la izquierda señala un cartel Santa María de las Tiendas, antiguo monasterio y hospital del siglo XI, cuyo estado ruinoso obligó a sus propietarios a derrumbarlo, ya que ni ellos ni los estamentos públicos aportaron dinero para su cuidado. Nada queda hoy, otro tesoro perdido para siempre.

Poco queda para llegar a Ledigos, punto final de esta primera parte de mi Camino Francés desde Aragón. Y qué mejor lugar para cerrar la etapa que la Iglesia de Santiago, arriba a la derecha al entrar al pueblo. La iglesia está abierta y se nota que necesita un buen lavado de cara. A la entrada hay una caja en la que podemos dejar una moneda y contribuir a su arreglo.

Me recoge un taxi (Mª Victoria, puntual y eficiente) y me lleva a Sahagún, donde por la tarde un autobús me traerá a Burgos, desde donde mañana tomaré otro para regresar a Murcia, pensando ya en el próximo año.