Ruta del río Borosa

Ruta lineal hasta el nacimiento del Río Borosa pasando por la Cerrada de Elías.
Preciosa ruta de ida y vuelta por la sierra de Cazorla.
La ruta comienza en el parking, de pago, del centro de visitantes del Río Borosa. Por la carretera al llegar a Torre del Vinagre, dejamos la carretera y y giramos a la derecha por un camino de tierra que nos lleva al parking. Dejamos el coche y comenazamos la ruta desde las piscifactorías del Borosa.
Desde aquí un camino de tierra que desde este momento va a subir y subir.
Al comienzo vamos a ir pegados al lado del río, que comienza a tener sus primeras cascadas, tras unos kilómetros, se nos presenta la posibilidad de hacer La Cerrada de Elías, sendero que nos lleva a las pasarelas para atravesar la garganta del Borosa. Son unos doscientos metros de pasarelas que nos llevan en altura sobre las cristalinas aguas del río. Al terminarlas, el sendero nos llevará nuevamente a la pista que continuamos a la derecha hasta llegar a la central eléctrica, aquí tenemos una fuente que para el verano con el calor se hace una delicia refrescarse con su agua tan fresca.
Aqui termina la pista y se comienza a subir por el sendero, hay que tener cuidado porque en toda la subida hay fuertes desniveles y muchas veces tienen piedrecilla suelta que puede resbalar.
A lo largo de la subida nos vamos a encontrar con grandes paredones, cascadas y charcas de distintos tamaños. Entre las cascadas están las de los Organos y la Calavera.
Pasadas estas, llegaremos a los túneles donde acompañamos al tubo de agua que luego baja a la central eléctrica. Para pasar los túneles es conveniente llevar una linternita aunque hay algún ventanuco que ayuda.
Pasados los túneles el desnivel se hace menor, la pendiente desaparece y hay que seguir la sendita que nos llevará a la presa del primer pantano, el embalse de Aguas Negras.
Si queremos ir directamente al Nacimiento del Borosa, no tendremos que cruzar la presa, llegado a este punto habrá que tomar la sendita que sale a la izquierda.
Nosotros queremos primero ir un poco más allá hasta pasar todo el embalse y llegar a la Laguna de Valdeazores.
No merece mucho la pena pues es una pista entre pinares y no se ve mucho agua.
Desde este punto, retomamos la vuelta, antes nos asomamos a ver el nacimiento del Borosa, es un manadero de agua en un espacio muy reducido, en verano está lleno de gente. Si se toca el agua, se verá que incluso en los días más calurosos, está helada.
La vuelta, sin misterio alguno, desandar lo subido antes y ver el entorno que dejábamos antes a nuestra espalda. Hay zonas en las que se pueden ver buitres y también hay muchas cabras.