Ascensión al Pico Teide y bajada por Montaña Blanca hasta el Portillo

Una ruta bastante dura, y que no debemos de menospreciar porque sea de bajada.
Empezamos con la ascensión al Pico de El Teide, una dura subida de unos 600m que pondrá a prueba nuestra resistencia. Una subida que además hay que tener en cuenta la falta de oxígeno por la altitud, por lo que hay que controlar al máximo el esfuerzo.
La subida nos va dejando unas vistas increíbles de 360° de toda la Isla. Además podemos apreciar el olor fétido a azufre y las numerosas fumarolas que evidencian que ahí debajo todavía "hay algo".
Desde el punto más alto y disfrutando del cráter, tenemos las mejores vistas de toda la Isla.

ATENCION: PARA SUBIR AL PICO DE EL TEIDE FUERA DE HORA, HAY QUE GESTIONAR UN PERMISO, SIN EL CUAL ESTÁ COMPLETAMENTE PROHIBIDO.

La bajada de hace por el mismo sendero de subida hasta La Rambleta, donde tomaremos el sendero de descenso hasta Montaña Blanca.
La primera parte del descenso es un duro zigzag con bastantes piedras sueltas y que nos llevarán junto a un auténtico paisaje volcánico hasta la primera para; el refugio de Altavista.

A partir de este momento el desnivel es brutal, ladera abajo por un sendero que continúa en zigzag y que nos llevará a bajar hasta la pista de Montaña Blanca.
Está bajada se hace interminable, y pese a que no es mucha distancia, es un verdadero examen para las rodillas.
Una vez en la pista de Montaña Blanca, el terreno ya se suaviza un poco más. Las vistas de todo el volcán, con sus lavas y el contraste del negro con los materiales del Montaña Blanca hacen un paisaje impresionante, con lo más característico como son los famosos "huevos del Teide"

Después de bajar por la pista, tenemos que abandonarla, para tomar el sendero que nos llevará hasta el Portillo Bajo; un sendero por laderas de zahorra, ya con menos pendientes y donde la vegetación empieza a aparecer con retamas, codesos, rosalillos de cumbre...
Una ultima parte que se hace bastante larga hasta llegar al Portillo, pero que tampoco tiene mas complicación, porque al ser un sendero homologado, está muy bien señalizado.

Una ruta de las que hacen afición y que hay que tener en cuenta que el desnivel negativo es una burrada, por lo que antes de lanzarse a hacer esta ruta, hay que comprobar que estamos preparados.

Importante es llevar bastante provisión de agua, ya que no hay absolutamente nada para poder beber. Además hay que llevar protección solar y gorro, porque suele hacer un sol de justicia en toda la ruta.

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