Acercamiento al cerro de la Condesa. Paraje ganadero, megalítico y ¿mágico?

El Cerro Boticario, recogido en la cartografía como Cerro de la Condesa, se ubica en el término de Pegalajar, junto a la margen izquierda del río Guadalbullón y la antigua carretera N-323, al Sur del Puente Padilla, entre los puntos kilométricos 53 y 54. Tiene forma de meseta irregular con una altura máxima de 722 m. sobre el nivel del mar. Su extensión aproximada es de unas 100 hectáreas. La vegetación es variada, la mayor parte es bosque de pinos, chaparros, enebros, aceres, cornicabras, acebuches… alternando con zonas de matorral. Existen algunas plantaciones de olivar en la cumbre y pie del cerro. En la mayor parte del mismo afloran formaciones kársticas, originadas por meteorización química de la caliza, cuyas características han permitido utilizar como cantera algunas zonas del cerro, principalmente en las laderas Norte y Suroeste.
Es un cerro que pasa completamente desapercibido ante las formaciones montañosas que se encuentran tras él, principalmente el Pico Moroche, y a simple vista tiene una estructura más o menos redondeada, de poca elevación , si exceptuamos los “picachos” rocosos , tanto naturales como originadas por las actividades de cantería.


Su escasa extensión y el ser un elemento más o menos aislado, parecían no dar para mucho más que un complemento a rutas que incluyera el Moroche, lo cual no es decir mucho - https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/2018-01-31-moroche-y-cerro-de-la-condesa-boticario-canteras-yacimiento-y-santuario-neolitico-torre-22389296- hasta que este mismo compañero, indagando en las fuente documentales, dió con un estupendo artículo -
“En torno a la piedra, el dragón y la muerte. Una interpretación de la mitología neolítica del Cerro Boticario (Pegalajar-Jaén) junto al camino prehistórico del valle del Guadalbullón” de
Juan Antonio López Cordero y Enrique Escobedo Molinos- consecuencia de lo cual realizó una nueva ruta en exclusiva a este cerro - https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/2018-02-18-santuario-neolitico-y-cantera-oeste-cerro-de-la-condesa-o-boticario-22719104-.

Para mí, sus salientes rocosos siempre han supuesto un atractivo para dejarme caer por allí , pero nunca ha pasado de breves paseos en las zonas periféricas. Ante estos nuevos datos creo llegado el momento de dedicarle algo más de atención para lo cual, aprovechando un pequeño hueco despejado en este maravilloso marzo lluvioso, apoyándome en lo que conocía, con los dos track de Avhinojosa cargados en mi gps y dejándome llevar por lo que me he ido encontrando, este es el resultado, más que satisfactorio, y que invita a próximas andaduras.

En los mapas observamos que lo componen varias colinas -2 principalmente- con poco diferencia de altura de unas a otras y con unas curvas de nivel que denotan un relieve más o menos suave y con una cañada que las separa. Para la descripción de la ruta conviene diferenciar entre ambas dada la enorme diferencia morfológica que presentan:
La colina de la derecha – zona sureste del cerro- , es una preciosa pradera ondulada con un pequeño cerrete rocoso –que es donde más vegetación tipo matorral encontramos- donde predominan los enebros, acebuches, esparto, chaparros y otras especies de bosque mediterráneo, con un bosquecillo de pinos –además de un pequeño olivar circundado por una valla-, todo ello con pasos naturales y atravesado por gran cantidad de veredas que hacen su caminar fácil. En épocas húmedas, como ahora, es una magnífica zona para pasear y disfrutar de las vistas de los accidentes geográficos que nos rodean: cerro de la Cabeza, valle del Guadalbullón, Peña de los Buitres, Grajales, sierra de Carchel y Puerto Alto. Esta primera colina, no está exenta de formaciones rocosas, bastante dispersas, aunque la mayor parte se localiza en la cañada que nos ayuda a remontar entre ambas colinas y en la que también hallamos vestigios de su uso ganadero, como corrales naturales. ESTE PRIMER TRAMO TIENE UNA CATALOGACIÓN, EN CUANTO A DIFICULTAD TECNICA, DE FÁCIL.
Por otro lado, la colina noroeste, donde se encuentran las canteras en sus zona limítrofes, presenta una área central atravesada por un auténtico laberinto de callejones pétreos de altas paredes y múltiples formaciones, ventanas y oquedades, solo apto para senderistas con experiencia por el riesgo de caídas y la necesidad de hacer trepadas y destrepadas por encima de los grandes bloques. Si se sigue el track de Avhinojosa estas no son de mucha entidad aunque, como no está exento de cierta dificultad por lo pedregoso del terreno, es conveniente ir acompañado y poseer cierta experiencia en estos terrenos, evitando su visita con la piedra húmeda. Es en esta segunda colina donde encontraremos el santuario megalítico descrito en el artículo y donde los autores desarrollan su hipótesis de la figura del dragón. DIFICULTAD TECNICA MODERADA.

La preciosa vereda que comunica la cantera de los Frailes con el santuario, en los 50 últimos metros –los más próximos a la desembocadura en el camino de la cantera-, es mejor evitarla si ha llovido recientemente, además de que hay que prestar especial cuidado en coger la más asequible pues existe, al menos otra, un poco por debajo de la “correcta”, con un paso arriesgado, más con situaciones de suelo resbaladizo. ESTE TRAMO, EN SECO, TIENE UN GRADO DE DIFICULTAD TÉCNICA DE MODERADA, DIFICIL EN MOJADO.
El corredor que investigué al sur del santuario, buscando un mejor acceso desde el oeste, va complicándose a medida que se avanza, hasta que tuve que desistir de continuar por él. Este corredor tiene una CATALOGACIÓN DE DIFICIL.

Esto es con respecto a lo tangible.
En cuanto a lo que no se ve, pero se siente, la visita a esta zona es muy recomendable. Es de esos lugares en los que se percibe una energía que el ser humano, a lo largo de toda su historia, ha conseguido captar. Y es en estos sitios, donde siglo tras siglo, independientemente de la religión, se ha buscado ubicar los lugares de culto, civilización tras civilización. Con la llegada del “hombre moderno” se ha reducido esta capacidad, aunque, seguimos llevando ese “receptor” integrado y, en sitios como este, despierta en mayor o menor medida. Como dicen los autores del artículo mencionado “….. las construcciones neolíticas se ubican en puntos telúricos, en los que la piedra es parte fundamental en la relación de líneas magnéticas de gran alcance, que conocían los druidas en la Antigüedad. De ahí que en estos puntos se ubiquen lugares sagrados, donde establecían sus rituales, tales se consideran los de Glastonbury, Snowdonia, y otros puntos marcados por menhires, como Stonehenge”

¿Un enclave mágico –uno más- de los numerosos que posee nuestra provincia, y más concretamente, nuestra sierra ?
Como dice el marteño y estudioso de la historia de nuestra provincia Miguel Caballero en su blog:


“Que mientras que en algún lugar son hechos físicos y/o demostrables los que nos vamos a encontrar, en otros son sensaciones...historias...

Y quedará algún lugar en donde lo "especial" del mismo, sea una extraña sensación...quizás sea simple magia...quizás sea el latido de la tierra que antaño sentían los hombres prehistóricos y con los siglos perdimos...o quizás sea el peso de la historia...”
blog http://mangelcaballero.blogspot.com.es/2014/11/jaen-la-provincia-magica-la-otra.html